No son muchas las esperanzas de que mejoren las ventas, pero se confía en que por Semana Mayor aumenten en un 10 o 15 por ciento, estimó Fernando Lastre García, representante de los locatarios del mercado De la Merced.
Destacó que desde que inició la pandemia, las ventas en este centro de abasto se desplomaron hasta en un 50 por ciento, pero ello no ha desalentado a los locatarios cuya mayoría ya reactivó sus labores.
En este sentido, destacó que el año pasado, tras el inicio de la pandemia, un número importante de locatarios se vio obligados a bajar la cortina, muchos de ellos por las disposiciones sanitarias y otros porque no pudieron reabastecer su mercancía, pero a la fecha el mercado prácticamente está totalmente activo.
“Antes de diciembre empezaron a reactivarse; no somos muchos, estamos alineados y ello nos permite trabajar a la mayoría. Uno que otro no ha regresado por enfermedad o porque ya no trabajó el giro, pero más de 90 por ciento ya está trabajando”, explicó.
Reconoció que tras el cambio del semáforo epidemiológico a color amarillo no se notó mucho repinte de compradores, pero consideró que ello se debe a que la mayoría de la población está afectada en lo económico. “La economía anda demasiado por el suelos…”, lamentó.
Sin embargo, insistió en que a pesar de la falta de eventos de atracción turística, se espera que durante Semana Mayor aumenten un poco las ventas en el citado mercado tradicional donde, dijo, se atienden al pie de la letra los protocolos sanitarios.
“No bajamos la guardia, nosotros checamos que los mismos compañeros atiendan las notificaciones, y es que ello es un beneficio para todos, para nosotros como locatarios y para las clientes”, indicó.