Ante el incremento en la demanda de oxígeno medicinal, que ha provocado el abarrotamiento en empresas dedicadas a la venta y distribución de éste, es necesario que Gobierno e iniciativa privada generen un acuerdo o plan de abasto, para que se regule de mejor manera la actividad comercial de este insumo, y así evitar que la población en general se vea afectada por la falta de oxígeno.
Así lo consideró Manuel Galván Arroyo, director del Clúster de Turismo Médico de San Luis Potosí, quien indicó que buscarán tener acercamiento con el nuevo titular de la Secretaría de Salud Estatal, Miguel Ángel Lutzow Steiner, para plantearle la idea de diseñar un plan emergente, a fin de garantizar el abasto de oxígeno medicinal en el estado.
“Considero importante que, ahora con el nuevo secretario de Salud nos podamos reunir, y buscaremos hacerlo, para ver la posibilidad de que exista algún plan que nos pueda ayudar con el abasto de oxígeno medicinal. Aunque eso no es responsabilidad del gobierno, ni tampoco de los privados, creo que debe haber modelo que sea consultado y trabajado por todas las partes para dar solución. Tiene que haber un esfuerzo conjunto entre gobierno, empresas privadas y ciudadanos”, expresó.
Señaló que, si bien, ya existe un control y una regulación comercial de productos y servicios, donde la COEPRIS y la COFEPRIS participan en la verificación del cumplimiento de las normas; sin embargo, reconoció, no existen suficientes inspectores para detectar quién está haciendo mal uso comercial de este tipo de productos, pues “siempre habrá alguien que compre productos de más y los quiera revender por fuera”.
“No se trata de que las empresas que generan estos servicios y productos estén dejando de hacer algo, lo que pasa es que muchas personas a nivel particular empiezan a comercializarlos de manera no adecuada. Estoy seguro que las empresas privadas han hecho su mejor esfuerzo para sacar al mercado sus productos, el problema es el cómo se comercializan y cómo se distribuyen”, apuntó.