Cerca del 83 por ciento de los mexicanos afirma seguir una dieta especial que los limita o restringe de comida o ingredientes específicos, incluso se ha referido que este país es el que más población vegana tiene a comparación de otros países de América Latina.
Una gran cantidad de ciudadano, han declarado seguir dietas motivadas por convicciones personales, como ser vegetarianos en un 19 por ciento, flexitarianos en un 15 por ciento y veganos en un 9 por ciento, muy por encima de otras naciones en América que alcanzan respectivamente el 8, 10 y 4 por ciento.
Recientemente en el Instituto Mexicano del Seguro Social, IMSS, se hizo un llamado para cuidar la alimentación, pero además se alertó del hecho de cambiar de régimen alimenticio de manera radical y sin consultar a un especialista, ya que ello puede ser contraproducente y causar daños irreversibles a la salud.
“Cuidar la salud implica mejorar la alimentación”, afirmó el coordinador de Nutrición y Dietética del Seguro Social en San Luis Potosí, Alejandro Jiménez Ortíz, quien recordó que el veganismo es un régimen alimenticio que ha retomado auge en los últimos años sobre todo en los jóvenes. La característica de quienes practican éste estilo de alimentación rechaza todos los productos de origen animal, carnes, huevo, leche, quesos, manteca y miel por mencionar algunos.
“Como en todo, existen los pros y los contras. En este caso, el beneficio de llevar una dieta bien indicada y valorada por un especialista es que, al omitir el consumo de alimentos de origen animal, disminuye la prevalencia de enfermedades cardiovasculares como obesidad, y en ocasiones es requerida en el control metabólico de pacientes con diabetes mellitus e hipertensión”.
Sin embargo, la falta de algunos nutrientes que aportan los productos de origen animal, pueden ocasionar daños a la salud, como lo es, la pérdida de masa ósea o desmineralización, además de la falta o deficiencia de aminoácidos, ácidos grasos, omega 3 y omega 6, vitamina B12, los cuales se encuentran en la carne, y tienen una función importante a nivel neurológico.
Algunas organizaciones de nutrición a nivel mundial, no recomiendan el consumo de esta dieta en niños, adolescentes y mujeres embarazadas. Al no tener los complementos que pueden aportar los alimentos de origen animal en el organismo, se pueden desencadenar padecimientos tales como retraso mental o psicomotor en los niños o adolescentes cuando se llega a practicar a muy temprana edad este estilo de alimentación.
Aquellos que practiquen o quieran iniciar una dieta vegana deben tener una adecuada orientación con un experto en alimentación o nutrición quien pueda recomendar de manera profesional cuáles pueden ser los suplementos adecuados de Vitamina B12, de calcio, hierro y otros beneficios que aportan los productos de origen animal.
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