Aunque el nuevo Tratado entre México, EUA y Canadá (T-MEC) establece que el 40 por ciento del valor de los vehículos deberá producirse en zonas donde se ofrezcan salarios de al menos 16 dólares por hora, no quiere decir que toda la industria automotriz mexicana deba incrementar los sueldos, sino que dependerá de cada una de las empresas de acuerdo a las características de sus cadenas productivas.
Señaló el presidente de la Unión de Usuarios de la Zona Industrial (UUZI), Ricardo Pérez Castillo, quien explicó que para cumplir con esta regla, denominada Valor de Contenido Laboral (VCL), cada armadora tendrá que analizar dónde le es más conveniente fabricar determinadas autopartes, incluso considerar si es más factible montar una planta en EUA o Canadá, o bien incrementar los salarios en México.
“Los armadores de equipo original van a tener qué determinar quiénes de sus proveedores van a hacer el ajuste o si lo van a hacer ellos mismos, ya cada una de las cadenas productivas analizaría la situación para verse lo menos afectados posible, cumpliendo la norma; puede que haya quien prefiera que determinadas partes sean enviadas desde EUA, pero cada quien lo evaluará, son las situaciones a las que se debe adecuar prácticamente la industria automotriz en México”, expresó.
No obstante, en caso de que las empresas automotrices decidieran incrementar el salario a sus trabajadores, para cumplir con esa regla pactada en el acuerdo comercial, el aumento no sólo sería para los operadores sino también para los colaboradores que participen en la parte de investigación y desarrollo de las plantas.
“Es probable que se tengan que hacer ajustes salariales en algunas de las plantas, pero esto prorratea, y también cuenta el desarrollo ingenieril y tecnológico, no es únicamente para el personal operativo, también puede ser considerado el personal que se dedique a las labores de investigación y desarrollo”, añadió.