El historiador José Antonio Rivera Villanueva, académico de El Colegio de San Luis, COLSAN, encabezó a un grupo de alumnos de la Maestría en Historia para varias visitas de trabajo de campo como parte del seminario que imparte, “Los pueblos de indios en la frontera chichimeca, siglos XVI-XVII”.
Entre los lugares que han visitado destacan los sitios arqueológicos de El Cóporo, en Ocampo, Guanajuato, La Quemada, en Villanueva, Zacatecas y las pinturas rupestres de Arroyo Seco, municipio de Victoria, también en Guanajuato.
En las próximas semanas visitarán las zonas arqueológicas de Cañada de la Virgen, en el municipio de San Miguel de Allende, El Cerrito, en El Pueblito municipio de Corregidora, en Querétaro, Tula, en Hidalgo y San Juan Teotihuacán, además de la zona arqueológica en donde se ubicaban los cuatro señoríos de la provincia de Tlaxcala, en la zona conurbada de la ciudad de Tlaxcala.
También se visitarán los pueblos de indios fundados por las familias tlaxcaltecas que emigraron al norte novohispano, especialmente las que corresponden a SLP, como son el barrio de Tlaxcala, Mexquitic, Moctezuma, Venado y Charcas.
“Se visitan estos sitios arqueológicos porque se localizan en lo que la arqueóloga Beatriz Braniff denominó la frontera septentrional de Mesoamérica, están en la línea de la frontera chichimeca y son el más claro ejemplo material entre la forma de vida de los pueblos sedentarios y los grupos nómadas. Conocer los sitios es entender que estas culturas fueron las que influenciaron en los otros sitios referidos”.
El plan de estudios abarca temas de estudio sobre Mesoamérica, Aridoamérica, Frontera chichimeca y los pueblos de indios fundados desde el siglo XVI en el norte novohispano, por ello es importante mostrar in situ a los alumnos, en dónde estuvo situada la franja de la frontera chichimeca que separaba a los indios sedentarios de los nómadas, ver la transformación social, cultural, política y económica suscitada; la transformación geográfica y del paisaje producto del cambio de la cultura material de los recolectores-cazadores.
Entre las reacciones entre los alumnos, es que les ha parecido algo novedoso tener la clase en los sitios arqueológicos, pero principalmente ligar las lecturas de los temas tratados con el sitio estudiado, y este ejercicio les reafirma el conocimiento del tema en cuestión.