Al terminar el programa de estudios del Doctorado en Administración de Justicia, una primera generación de 14 doctorantes permiten al Poder Judicial del Estado, contar con funcionariado de mayor nivel académico y especialización, se trata, de servidoras y servidores públicos cuyas categorías inciden en las directrices de la vida jurídica del Estado.
Tras dos años y medio de estudios impartidos por la Escuela Judicial, los funcionarios del Poder Judicial pasaran ahora a la etapa de presentación de tesis y proyectos aplicativos que se basan en criterios de responsabilidad social, diversidad cultural y propositivos.
Las nueve mujeres y los cinco hombres integrantes de esta primera generación, cursaron diversas materias iniciando con el curso Propedéutico, Teorías de la Justicia, Hermenéutica y argumentación jurídica, Teorías y doctrina de los Derechos Humanos, Investigación Jurídica, Lógica jurídica, Teoría constitucional y convencionalidad, Metodología de la investigación jurídica, Derecho procesal constitucional, Justicia para grupos vulnerables, Fundamentos y técnicas de oralidad en Derecho, Seminario de investigación jurídica, Clínica de casos prácticos, Gerencia judicial, y Seminario de actualización.
Durante los momentos más críticos de la pandemia por covid-19, el programa de estudios se desarrolló en la modalidad virtual, con impartición de algunas cátedras que necesariamente tuvieron que ser presenciales, siempre observando los debidos protocolos sanitarios.
El profesorado estuvo integrado por los Doctores Gregorio Delfino Castillo Porras, Jorge Antonio Contreras Domínguez, Gilberto Martiñón, Juan Abelardo Hernández Franco e Isidro Emmanuel Muñoz Acevedo; las Doctoras Ángela Quiroga Quiroga y Elsa Cordero Martínez; el Magistrado Ricardo Sodi Cuéllar; las Maestras Nadia Sierra Campos, Mónica Isabel Zavaleta Izaguirre y, los Maestros Pablo Muñoz Díaz y Óscar Gutiérrez Parada.