Diputados propondrán que las autoridades federales prohíban definitivamente todo proceso de autorización para realizar “fracking” o fractura hidráulica en San Luis Potosí, a las empresas de exploración y explotación de gas.
Los diputados Jesús Cardona Mireles y Héctor Mendizábal Pérez, presentaron una propuesta para que el ejecutivo estatal intervenga ante las autoridades federales, luego de las manifestaciones de rechazo a esta práctica por habitantes de la zona huasteca y que fueron atendidas por los diputados del Congreso del Estado.
Señalan que desde hace tiempo se han presentado denuncias de que a escondidas y violando las normas internacionales, Petróleos Mexicanos (PEMEX) iniciará la exploración y explotación de gas e hidrocarburos a través de la fractura hidráulica (fracking) en la Huasteca Potosina.
Según la versión que se menciona, se trata de un acuerdo que tanto la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), Pemex Exploración y Producción (PEP) y las empresas D&S Petroleum, SA de CV y DS Servicios Petroleros SA de CV, firmaron para buscar y explorar aceite y gas en una zona a 400 kilómetros del territorio potosino. Cabe mencionar que las empresas involucradas están asociadas con la compañía china Sinopec.
El llamado fracking afecta a miles de campesinos y comuneros nahuas y tének que habitan en seis municipios de la Huasteca Potosina. De acuerdo con Francisco Peña de la Paz, investigador y docente de El Colegio de San Luis Potosí, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) ya otorgó a Pemex una autorización para comprar hasta 190 toneladas de “alto explosivo”, que la empresa utilizará durante el resto del 2018.
La zona de la Huasteca Potosina es vulnerable al fracking porque no tiene suficiencia de agua, además se contaminaría y no hay necesidad de petróleo. De acuerdo con Fernando Díaz Barriga, coordinador del Centro de Investigación Aplicada en Ambiente y Salud (CIAAS) de la UASLP, dicho proceso se realiza para la exploración de gas o petróleo, ubicados en medio de una formación geológica a profundidades muy extensas; se hace una perforación vertical a determinada profundidad y a partir de ahí se genera una serie de explosiones para romper la corteza y liberar el combustible que puede ser llevado a la superficie, del pozo previamente construido.
Además, la fractura no permitida en diferentes países del mundo, requiere grandes cantidades de agua debido a que es una perforación hidráulica que rompe con presión de agua, así como líquidos cuya composición se desconoce, pero contiene sustancias potencialmente radioactivas.
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