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La Astrónoma por la Universidad de Berkeley, doctora Susana Estela Lizano Soberón, indicó que miles de millones de años tarda un planeta en formarse y el ser humano, que tiene solo un pequeño “instante” en la tierra, puede llevarlo al borde de la extinción, en lugar de hacerlo un lugar justo, habitable y sustentable.
La investigadora del Instituto de Astronomía y Astrofísica de la UNAM se presentó en el IPICYT para brindar la Conferencia Magistral: “El Nacimiento de los Sistemas Planetarios”, de donde detalla que previo a la formación de una estrella se da un proceso (en forma de disco giratorio con gas y polvo), que a través de miles de millones de años dará pasó al origen de sistemas planetarios como en el que habitamos.
Susana Estela Lizano explicó a investigadores, estudiantes y científicos del IPICYT que de nuestro sistema solar llamada “Vía Láctea” solo se conoce con la tecnología una pequeña parte que se denomina vecindad, ya que nuestro sistema solar mide de punta a punta cerca de 100 mil millones de años luz y se calcula existen cerca de 200 mil millones de estrellas en él.
“Hoy en día aún hay mucho material en nuestra galaxia que aún forma estrellas, de todos tamaños, desde menores a la tierra y otras que son 20 veces más grande que nuestro sol, durante su formación ocurren procesos que tienen que ver con vientos poderosísimos que se eyectan al espacio, con formaciones de estructuras aplanadas llamadas discos planetarios que van a formar sistemas solares”, agrega quien también es miembro del Colegio Nacional.
Destacó que todo este proceso de formación es muy lento, y tuvieron que pasar miles de millones de años para que la tierra se formara, y los homosapiens que tenemos apenas unos miles de años, hemos afectado nuestro mundo en lugar de bien, para mal.
Lizano Soberón dio a conocer que uno de los pasos que está logrando la astronomía y la astrobiología es buscar la presencia de vida en otros planetas, quizá no como la conocemos, pero sí como señales biológicas, microscópicas, celulares.
Este tipo de vida solo podría llegar a darse dentro de lo que denominamos “zona habitable de una estrella”, es decir planetas que están dentro de órbitas y temperaturas que den paso a la temperatura donde se pueda desarrollar agua, “que si bien no es la garantía de vida, es la condición 0 para tener vida, estamos muy cerca de saberlo, es muy probable que en esos 4 mil exoplanetas que conocemos tengamos pronto señales de vida, gracias a la tecnología”, concluyó la destacada Astrónoma de la UNAM.
