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El Consejo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos que preside el ombudsman Jorge Andrés López Espinosa denunció la contaminación que existe en el Río de las Escobas que atraviesa las colonias de la Maroma, Casa Blanca, las Pilitas y Revolución, pertenecientes a la comunidad de Escalerillas.
Hizo un llamado “a las autoridades involucradas para atender la problemática y garantizar a las personas habitantes de dicha comunidad el derecho humano a un medio ambiente sano”.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos se encuentra integrando un expediente de queja con motivo de la denuncia pública realizada a través de redes sociales en la que habitantes de la zona manifestaron que desde hace 15 años se realizó una obra de drenaje en el cauce del río que viene de la presa “El Peaje” y la presa del “Potosí” con dirección a la presa “San José”, que no se le ha dado mantenimiento, motivo por el cual el agua del río se contaminó y de los registros salen aguas negras que se mezclan con el agua limpia.
El Consejo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos exhortó a las autoridades encargadas de otorgar los servicios de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de aguas residuales para que de manera articulada realicen las obras y acciones necesarias para el cese inmediato de la contaminación y en su momento se repare el daño que se ha causado.
“El acceso a un medio ambiente sano constituye un bien jurídico fundamental para el desarrollo de un plan de vida digno, el cual únicamente podrá realizarse cuando se aseguren las condiciones óptimas del entorno y la naturaleza”.
Señaló que “el agua del río que se encentra siendo contaminado es utilizada por habitantes de la comunidad para cubrir sus necesidades básicas y al mezclarse con aguas negras se convierte en un foco de infección con el riesgo de desencadenar enfermedades, así esta problemática también vulnera el derecho a la salud contemplado en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, en el cual el Estado Mexicano se obligó a adoptar “medidas para reducir la mortinatalidad y la mortalidad infantil; asegurar el sano desarrollo de los niños; mejorar la higiene del trabajo y del medio ambiente; prevenir y tratar enfermedades epidémicas, endémicas y profesionales, así como asegurar la asistencia médica a todos”.
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