De nueva cuenta, la comunidad LGBT+ tronó contra la Unidad de Gestión del Centro Histórico, y acusó a su titular, Rocío Leticia Zavala García y a sus inspectores de discriminación en verificaciones a establecimientos de la comunidad.
Aunque aseguraron que negocios de la comunidad enfrentan esta situación, se refirieron en concreto al caso del restaurant-bar Glitter, y acusaron que hubo un allanamiento por parte de los inspectores, toda vez que a pesar que el establecimiento estaba cerrado, violentaron la puerta principal y entraron.
Esto, dijo Alejandro V., representante del establecimiento, ocurrió el pasado viernes y aseguraron que, durante la intervención, desaparecieron 90 mil pesos que estaban destinado al pago de salarios y propinas del personal.
Los denunciantes dijeron no entender el motivo de la incursión, debido a que a las 22:00 horas cerraron el establecimiento, por lo que procederán por la vía legal, tanto por las agresiones, como por la desaparición del dinero y los destrozos ocasionados al inmueble que ocupan, lo cual quedó videograbado.
Indicaron que reciben frecuentemente la visita de inspectores que presuntamente acuden a verificar el cumplimiento de las medidas sanitarias y el respeto a los horarios extraordinarios por la pandemia, lo que siempre se ha atendido.
Sin embargo, acuden con actitudes groseras. “Muestran actitudes machistas, y en ocasiones nos agreden”, señaló Francisco Javier, quien se identificó como empleado de un bar del Centro Histórico. Indicó que los inspectores suelen acudir acompañados de policías municipales, que también suelen burlarse de ellos.
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