El cierre de locales en el Mercado República en una lamentable realidad, pues aunque se ha dado de manera paulatina el resultado es que al día de hoy son casi 400 negocios los que han bajado sus cortinas, debido a que los locatarios están pasando por una situación crítica comercialmente hablando.
Así lo manifestó el dirigente de los locatarios de dicho centro de abasto, Arturo Pérez Alonso, quien señaló la descomercialización ha incrementado alrededor de un 60 por ciento y que del total de los negocios que existen en el mercado son más del 30 por ciento los que han cerrado, problema que se ha visto más acentuado en los últimos tres años.
Detalló que el crecimiento del ambulantaje, los aumentos constantes en el precio de la gasolina y en la canasta básica, la crisis económica y la devaluación son factores que afectan a los comerciantes; sin embargo destacó que también la falta de mantenimiento en el mercado ha provocado un deterioro y eso lo hace menos atractivo para las personas, aunado a que los robos también se han incrementando al interior de éste.
“Hay gente del mercado que no hace ni la llamada cruz, venden 20 ó 30 pesos y no sacan ni para comer, entonces prefieren mejor quedarse en su casa y pues es no va a hacer que se reactive si están los locales cerrados, pero insisto que es por la falta de mantenimiento a la infraestructura, el estacionamiento totalmente abandonado y con malos olores que ponen riesgo de contraer alguna infección”, comentó.
Ante todo esto expresó que de seguir así se corre el riesgo de que el centro de abasto quede en el abandono, pues lamentó que hasta el momento las autoridades municipales no han atendido estos problemas que afectan fuertemente a los locatarios.
“Así como vamos, sin ser una actitud pesimista, lamentablemente puede ser que convierta en el llamado elefante blanco, son contados los espacios que pueden estar funcionando bien pero ese no es propósito principal, lo que se necesita es que el sector esté totalmente activado”, comentó.
Finalmente expresó que están a la espera de saber los resultados de las elecciones para buscar tener un acercamiento con el próximo alcalde y así poder trabajar en los puntos antes mencionados pues lo que no se quiere es que se pierda la fuente de trabajo y la tradición de acudir al mercado.