Los problemas de catarata en bebés recién nacidos es un problema frecuente en menores de edad que detectado a tiempo es altamente tratable con resultados favorables.
De acuerdo con la doctora Beatriz Ramírez, oftalmólogo del Hospital General de Zona número 50 del IMSS, quien dijo que la catarata congénita es cuando el bebé nace ya con problema de catarata muy pequeña que inclusive puede pasar desapercibida hasta una edad adulta.
Cuando la catarata es importante ocasionará problemas visuales en el pequeño, sin embargo puede atenderse a edades tempranas como en bebés, y entre menor edad tenga el pequeño mejor será el pronóstico visual y su desarrollo visual, por eso es importante detectarse desde que nacen hasta aproximadamente los 7 años de edad o un poquito mayores, “si en esa edad no se detecta que tienen este tipo de problemas después no se recupera esa capacidad de visión que tienen los niños que se atienden de manera temprana, pues tienen más posibilidades de mejorar visión la mejor casi en un 100 por ciento”.
La recuperación dependerá de la edad y de la cirugía que se realice, esos niños normalmente tendrán que estar con vigilancia oftalmológica. Sin embargo si un niño nace con este padecimiento y por una u otra razón no se detecta a tiempo y no recibe el tratamiento que debe de recibir, no tendrá un desarrollo visual normal.
La mejor forma de detectar una falla de esa naturaleza en la visión de los pequeños es observar si el niño identifica o no las formas, a las personas, o no hay un enfoque de los ojos, eso es una forma de detectarlo y lo ideal también es que al momento de nacer se realice una revisión oftalmológica en general a todos los niños aunque no tenga ningún problema o antecedente, ya que pueden detectarse otras enfermedades que afectan en edades tempranas y que es bueno tener una revisión al menos una vez al año más hasta los 4 años de edad ya de ahí en adelante de forma habitual
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