Los preparativos comenzaron a las 4:30 de la madrugada de este sábado, cuando los centenares de migrantes se levantaron y comenzaron a reunir sus pertenencias para emprender nuevamente el camino rumbo al norte del país, a las 5 de la madrugada ya se habían dispuesto los alimentos en el albergue para que desayunaran y tomaran algunas frutas y agua para el camino.
A esa rutina se han tenido que acoplar los más pequeñitos del grupo, quienes han tenido que seguirle el paso a los adultos en estos 20 días desde que emprendieron el viaje; así, entre cobijas o simplemente con suéter o chamarra, los primeros grupos emprendieron el camino entre la niebla y el frío de la madrugada, unos a pie y otros con mayor suerte consiguieron un “aventón” por parte de traileros que los subieron a la caja cerrada de su unidad o a una plataforma.
Antes de partir se les dieron algunos consejos de seguridad y autocuidado, y se les hizo saber sus derechos humanos con la finalidad de que continúen con su trayecto, ordenado y seguro para llegar a su destino.
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La caravana que llegó a la Capital potosina el viernes estaba conformada por 1031 hombres, 345 mujeres, 424 niños y niñas, que de acuerdo al director del Instituto de Migración y Enlace Internacional (IMEI), fue el mismo que arribó a la Ciudad de México y luego avanzó a Querétaro, para posteriormente pasar por la entidad potosina.
Sin embargo el grupo que este sábado por la madrugada avanzó a Matehuala es un poco menor, pues por la mañana, alrededor de cinco personas externaron su deseo de quedarse en México y dos más pidieron regresar a su país de origen, por lo que se quedaron en la Capital potosina para realizar el trámite de retorno con ayuda de los consulados.
Entre ellos hay tres guatemaltecos que pedirán la visa por razones humanitarias para quedarse en México, y dos mujeres, una madre y su hija, que solicitaron el retorno asistido debido a que enfrentan problemas de salud y el trayecto no ha sido como se los habían planteado, pues se les dijo que serían transportadas en autobús todo el camino.
Durante su estancia en la Capital potosina, la Cruz Roja otorgó 457 atenciones médicas a los integrantes de la caravana a través de 163 voluntarios, y además realizó el traslado de tres personas que requerían atención hospitalaria, se trata de dos varones y una mujer que fueron llevados al Hospital General de Soledad debido a que presentaban malestares musculares y gastrointestinales; al respecto el delegado Oscar Segura Rodríguez dijo desconocer si los migrantes fueron dados de alta para reintegrarse a la caravana o siguen hospitalizados, pues quedaron a resguardo de los consulados.
Además participaron 39 voluntarios en la distribución de alimento y ropa, y se otorgaron 127 llamadas telefónicas gratuitas para que establecieran contacto con sus familias en sus países de origen; la labor de la benemérita institución continúa hasta este domingo, pues acompañarán a los migrantes hasta su salida de territorio potosino, por lo que la unidad médica, ambulancias, enfermeros, socorristas y médicos, continuaron su servicio en Matehuala.
Aparte, el cónsul de Honduras en San Luis Potosí, José Natividad Ortiz Cisnado, informó que uno de sus connacionales solicitó el retorno asistido, manifestó que muchas personas querían tramitar su visa humanitaria para permanecer en México, sin embargo el tiempo que tuvieron para realizar el trámite fue muy corto y no todos contaban con la documentación necesaria, por lo que decidieron continuar con su camino.
Respecto a las tres personas que fueron llevadas a recibir atención hospitalaria, informó que dos fueron dados de alta y se reintegraron a la caravana, mientras que está pendiente de la ubicación de la tercera persona.
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