Aunque la cancelación de la Procesión del Silencio será nuevamente un golpe duro para la economía del sector restaurantero y hotelero, la decisión es favorable dadas las actuales condiciones sanitarias, y considerando que en este evento se reunían hasta 160 mil personas en el Centro Histórico de la ciudad.
Así lo consideró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), Juan Carlos Banda Calderón, quien comentó que si bien, las actividades de turismo religioso que se realizaban durante la Semana Santa, beneficiaban más a los restaurantes ubicados en el Centro, quienes lograban repuntar sus ventas en un 100 por ciento, debido a que la mayoría de los eventos se concentraban en esa zona.
No obstante, con la llegada de la pandemia por el Covid-19, en las fechas y periodos importantes como Navidad, Semana Santa, 14 de febrero, Día de la Madre, Día del Padre entre otras, las ventas se han visto mermadas por prohibición de festejos y eventos masivos.
“Hoy en día predomina la salud de todos los potosinos, y viendo las aglomeraciones que se presentan año tras año, hoy debemos cuidar la salud y disminuir los contagios que se están presentando, y ya en un futuro vendrá esta tradición que tanto beneficia al estado de SLP, porque lo posiciona como un lugar atractivo para visitar”, expresó.
Aunque lamentó que no existen las condiciones de salud adecuadas para realizar un evento de esta magnitud, el cual era uno de los principales atractivos de la capital potosina durante la Semana Santa, que generaba una importante derrama económica, apuntó que en estos momentos no podemos “dar marcha atrás” a las medidas sanitarias, y ya en un futuro “vendrán tiempos mejores para retomar esta tradición”.