Los ajustes al salario mínimo en el país deben ser graduales y conforme a las condiciones de cada región, además de corresponder a otras circunstancias particulares como las habilidades y no basados en decisiones tomadas desde un escritorio.
Así lo afirmó el diputado Héctor Mauricio Ramírez Konishi, quien dijo que temas tan delicados y trascendentales como el ingreso económico de los trabajadores, no pueden abordarse con decisiones que se vean populistas o políticamente atractivas, porque no es lo mismo las condiciones que prevalecen en Tabasco, Chiapas o Tlaxcala que en la zona norte del país.
Lo que considera “bueno”, dijo; es que se trata de una referencia de mayor ingreso para la gente y eso siempre se celebra, “pero los salarios mínimos que se determinan por decreto deben responder a situaciones de oferta y demanda, habilidades desarrolladas, de forma gradual y conforme al entorno que prevalece”.
Ramírez Konishi manifestó que cuando no es así, ocurren problemas serios como el de la frontera norte por el aumento tan radical que se decretó; en San Luis Potosí existe un salario promedio de contratación de 260 pesos, superior al salario mínimo que no se dio por decreto sino en base a la oferta y la demanda.
Esto permite tener mano de obra calificada y buena, valorada, “pero incluso en San Luis las condiciones no son las mismas en todo el estado, no es lo mismo Charcas que Tamazunchale o Valles que Villa de Arriaga, es decir, es complicado responder en todas partes al mismo llamado”.
Añadió que las realidades siempre son diferentes, “y tomar decisiones desde el escritorio con objetivos políticos y populistas no siempre van a generar los beneficios que se esperaban, por ello en este tema del salario mínimo, se debe actuar con prudencia, tomando decisiones que sean realistas”.