Ha disminuido alrededor de un 90% la aplicación de pruebas rápidas para la detección temprana de Covid-19, indicó Manuel Galván Arroyo, presidente electo del Clúster Médico en San Luis Potosí.
Galván Arroyo indicó que a pesar de que en México hubo mala dirección en la pandemia, específicamente por parte del subsecretario de Salud, Hugo López Gatell al no promover la aplicación masiva de pruebas para la detección de Covid-19, las empresas y la población entendieron la importancia de este ejercicio "y hubo un disparo de aplicación de pruebas" durante 2020.
Sin embargo en este primer semestre de 2021, se tuvo una disminución considerable en la aplicación de pruebas; puso como ejemplo que si antes se aplicaban 100 pruebas al día, actualmente se aplican entre una y diez, lo que representa una disminución de 90%.
Atribuyó esta disminución a un exceso de confianza entre la población, y al parecer también en las empresas, pues señaló que si bien éstas aplicaban pruebas a sus trabajadores al inicio de la pandemia, muchas han dejado de hacerlo.
Destacó que esta reducción en la aplicación de pruebas no es buena, ya que el virus sigue presente y con ello los contagios, aunado a que el país ha entrado a la tercera ola epidémica, que tarde o temprano llegará también a San Luis Potosí.
Galván Arroyo explicó que al detectar de manera oportuna un caso, se puede evitar un contagio masivo, pues recordó que la transmisión es muy rápida, por lo que invitó a la población a continuar con sus evaluaciones médicas a través de las pruebas de detección de Covid-19.
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