El alto número de incidentes de posible constitución de delito que se registran diariamente en las redes sociales y que en varios casos se han consumado cono tal, ha obligado a las autoridades de seguridad a implementar medidas de prevención en los sectores más vulnerables de la población.
Las actividades de prevención se realizan principalmente en instituciones educativas, y a través del Secretariado Ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública (SECESP), personal especializado con amplio conocimiento en el tema promueve el uso responsable de las nuevas tecnologías y redes sociales entre alumnos, padres de familia y docentes.
De acuerdo con el personal de la Policía Cibernética de la SSPE, actualmente no sólo estudiantes y menores de edad son víctimas de delitos cibernéticos, también los adultos con la suplantación de identidad, robo de datos, fraudes y en algunos casos son víctimas de enganche con fines de explotación sexual y laboral, por lo que no hay un sector de la población exenta de ser víctima de algún delito en las redes sociales.
Para evitarlo, lo ideal es que la población este informada de los delitos cibernéticos y como cuidarse de ellos.
Una de las principales medidas y recomendaciones es que no se proporcione información personal, familiar y de cuentas bancarias a desconocidos, aunque se lleve una aparente amistad en redes sociales.
Otra es mantener los dispositivos electrónicos actualizados en antivirus, entre más sofisticados y vanguardistas sean mayor será la protección a los equipos, otra medida es encriptar información relevante que se envíe a través de correos electrónicos, usar contraseñas seguras y sobre todo, mantenerse alertas ante cualquier petición de información, imágenes o ubicaciones fuera de lo común.
Una estrategia que ha resultado de gran éxito en materia de prevención es la campaña “Un Like por la Prevención”, dirigida a alumnos de cuarto, quinto y sexto grado de primaria, a estudiantes de secundaria, bachillerato y universidades.
Mediante ésta se trata de concienciarlos sobre los riesgos que se corren al enviar cierto tipo de información o imágenes a través de computadoras o dispositivos móviles, con lo que se convertirían en víctimas de los delitos de “sexting”, “grooming”, “spam”, “phishing” o “phubbing”, principalmente.