La desorganización e insensibilidad sigue privando en la entrega de apoyos a adultos mayores, de manera inconsciente les hacen hacer largas filas desde temprana hora para comenzar con el proceso de entrega de fichas hasta entrado el día, aun y cuando no se tiene el recurso suficiente para distribuirse.
Adultos mayores que desde entre las 5:00 y 6:00 de la mañana hicieron fila este lunes para cobrar su apoyo bimestral de 65 y más, en las oficinas de Telégrafos, acudieron a nuestras oficinas de El Sol de San Luis a denunciar públicamente que pese a llegar muy temprano aun no se les entregaban las fichas para ver el orden en que ingresarían a cobrar su recurso.
El proceso de entrega de fichas comenzó alrededor de las 14:00 horas, es decir más de ocho horas después de que llegara la primera persona a hacer fila, y a decir del señor Felipe, en un muy lento proceso comenzaron a pagar, sin embargo más tarde se les dijo que no tenían el recurso para realizar el pago a la totalidad de los adultos formados, siendo para entonces alrededor de las 16:00 horas.
En el caso de la señora Rosita que llegó a hacer fila a las 6:00 de la mañana, con su ficha número 59 comentó en su experiencia que ha sido testigo de adultos de mayor edad que la suya quienes llegan sin desayunar esperando el recurso para comprar su desayuno.
O como el caso de doña “María”, quien llegó a las 9:00 de la mañana sin desayunar y en espera de recibir su recurso simplemente se desvaneció siendo auxiliada por almas caritativas acompañantes de otros adultos mayores, quienes al conocer más de su historia llamaron a elementos de seguridad pública, ya que la señora presentaba golpes en varias partes del cuerpo, aparentemente propinados por sus propios hijos.
En su caso, y con el paso del día, su situación se tornaba para ella mas estresante, pues el recurso de su apoyo le es indispensable para regresar a casa y no solo “llevarles de comer a sus hijos”, sino lo más importante; para salvarse de la golpiza que éstos podrían propinarle si regresaba sin su apoyo.
Así lo comentaron las señoras Rosita, Carmen y Juliana, quienes la auxiliaron y a quienes dijo que los golpes que tenía en su cuerpo eran propinados por sus hijos, uno de ellos adicto a sustancias psicotrópicas, y quienes según los relatos, le quitan su pensión para subsanar sus propios gastos, dejando a dona “María” en el desamparo.
Las señoras contaron lo narrado por doña “María” a los elementos de seguridad quienes se negaron a acudir a su vivienda a verificar su dicho, argumentaron que era necesario que ella o uno de sus hijos o nietos presentaran la denuncia por lesiones para proceder a investigar.
Comentaron también que según la plática de doña “María”, personal del DIF se presento en su domicilio ya en una ocasión, sin embargo ella no pudo narrar los abusos y violencia de que es objeto porque estaban sus hijos presentes y al decir ella algo, al irse la autoridad seria duramente reprendida y nuevamente golpeada.
Las compañeras de fila de doña María pidieron a la autoridad ubicar a la señora y auxiliarla antes de que se convierta en una víctima mortal de sus propios hijos, bajo el argumento de lesiones accidentales.
Leer más de El Sol de San Luis