Hay padres y madres que a consecuencia de las adicciones pierden la conciencia y ejercen maltrato a sus hijos, lo que ha obligado a que les sea retirada la patria potestad para alejar a los menores del entorno de violencia, pero es difícil que estos niños sean dados en adopción debido a la problemática que arrastran, indicó Lorena Valle Rodríguez, presidente del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
Valle Rodríguez manifestó que en el DIF se han atendido casos de niños maltratados a raíz de las adicciones del padre o la madre, “el alcoholismo provoca mucha violencia, pero también las adicciones a sustancias provocan el descuido y la violencia para los niños”, y en estos casos interviene para proteger a los menores, por lo que se les busca una red familiar y son colocados con la abuela o abuelo, en caso de no encontrar una red familiar, son llevados a las casas del DIF.
Indicó que el DIF tiene más de 20 solicitudes de pérdida de patria potestad para alejar a niños de un entorno de violencia, aunque señaló que “a veces tienen discapacidad, tanto motriz de nacimiento, o porque se les causó a raíz de la violencia que sufrieron”, pues han sido víctima de golpes e incluso quemaduras, y esto dificulta que sean dados en adopción, “porque las familias buscan un niño sano, un niño que no haya sufrido tanta violencia y por consecuencia haya tenido un trastorno ya psíquico”.
Finalmente, señaló que estos casos son remitidos a la Fiscalía y pidió que no haya impunidad para los padres, tíos o padrastros que ejercen violencia en contra de los niños.