A lo largo de la historia de San Luis Potosí se encuentra insistentemente la pregunta ¿Qué gobierno es el mejor, el de las leyes o el de los hombres? Pregunta que no debe ser confundida con la interrogante de cuál es la mejor forma de gobierno. “Las leyes dan prescripciones generales, pero no prevén los casos que se presentan en el diario devenir de la sociedad por lo que, en cualquier arte, sería ingenuo guiarse sólo por las normas escritas, porque la ley no tiene pasiones, que, por el contrario, se encuentran necesariamente en la sociedad”, considera el maestro Luis Isaac Rojas Montes ante el escenario de cambio de poderes que se tendrá en la entidad.
El tema de la política ya no es el modelo de gobierno porque toda administración se fundamenta en la democracia que nunca deberá caer ni en la tiranía; ni en la oligarquía, “Con una visión estatal o municipal, el ejercicio del buen gobierno está en los indicadores populares del quehacer gubernamental; en otras palabras, atender las necesidades que la sociedad dicta; la inseguridad; el agua potable, el drenaje y la movilidad urbana”.
¿Sin embargo las reglas de operación en el ejercicio del presupuesto oficial muchas veces limitan el actuar de los gobiernos? Se le intercepta.
“Entendamos que estos rubros son las columna vertebral de un Buen Gobierno, el resto de rubros y temas se ordenan y priorizan, por supuesto, pero en lenguaje sencillo nos estamos refiriendo al arte de escuchar al pueblo, práctica perdida, donde se proyecta de acuerdo al interés económico y no social, por eso vemos calles destrozadas o llenas de baches por ejemplo o una ciudad sin policías, porque se están atendiendo negocios, no los problemas”.
Rojas Montes, presidente de la organización ciudadana Patria Nueva dice que el cambio de poderes en San Luis Potosí representa la oportunidad valiosa de construir un nuevo precepto social que supone que todos los gobernantes son en su mayoría malos, en el sentido de que tienden a usar del poder para sus propios fines. “Cada tres años o cada seis se tiene esa preciosa oportunidad de revertir ese pensamiento público, la necesidad de este San Luis Potosí convulsionado nos convoca a tener gobernantes sabios y valientes, porque en el aspecto legal el marco jurídico ya existe, con el cual se regula el actuar de los gobernantes para evitar arbitrariedades”.
El presidente de Patria Nueva reiteró que San Luis Potosí requiere gobiernos de hombres porque los gobiernos de leyes celebra ya su propio triunfo en la democracia; “Qué es la democracia sino un conjunto de reglas (las llamadas reglas del juego) para la solución de los conflictos sin que se haya de recurrir a la violencia; Personalmente no tengo ninguna duda en considerar que necesitamos de gobernantes fuertes, inteligentes y comprometidos con el cargo, sin miedo a ejercer su autoridad, sin temor a enfrentar los retos de una sociedad cada vez más crítica e informada, pero ávida de liderazgos que inspiren; líderes que hagan valer las leyes para beneficio de los ciudadanos”.