La lista de propósitos es una de las tradiciones más comunes al recibir un año nuevo, desde proponerse a viajar, comprar un auto o una casa, buscar un empleo nuevo, mejorar el aspecto físico, entre otros.
No obstante, por lo general casi nunca se piensa en tener un mejor cuidado de las finanzas personales, por lo que, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) recomienda realizar los siguientes propósitos:
- No más deudas. Si aun se tiene un crédito pendiente por pagar, es recomendable aprovechar una parte del aguinaldo o caja de ahorro para liquidar el préstamo y liberarse de las deudas.
- Administrar mejor los recursos. Si se tienen más gastos que ingresos, es recomendable hacer un ajuste a nuestra economía, y, la mejor manera de hacerlo es fijando un presupuesto. Primero se deben identificar todos nuestros ingresos y gastos, anotarlos para tenerlos siempre presente y así eliminar más fácilmente aquellos gastos que no son necesarios. Asimismo, llevar un presupuesto detallado ayudará a mantener sana nuestra cartera.
- No dejar el ahorro en el olvido. Hay que tener presente que el primer paso para realizar nuestras metas es generando un ahorro.
- Elaborar un calendario anual de gastos. Ahorrar para comprar con anticipación nos quitará muchos dolores de cabeza, además de prever las fechas más significativas como Día de Reyes, 14 de febrero, Día de las Madres, vacaciones de Semana Santa o el regreso a clases, entre otros. Esto nos dará mayor tranquilidad durante todo el año.
- Anticipar los posibles riesgos. Comprar un seguro, ya sea de vida, gastos médicos, de auto o de vivienda no es un gasto, al contrario, es una inversión que se puede programar hoy para evitar un mayor desembolso en un futuro.
- Hacer algo por nuestro retiro. El ahorro voluntario incrementa considerablemente el monto de nuestra pensión, además es deducible de impuestos. Depende de uno mismo tener un retiro digno.