Luego de tres temporadas en la Primera División, el equipo Santos del San Luis perdió la categoría al ser derrotado por el equipo Laguna, en una serie por el no descenso, primero se jugó en el Plan de San Luis, donde empataron a cero goles y luego en Torreón, en donde el equipo lagunero se impuso por dos a cero.
Pero fue el día que se jugó en el “Plan de San Luis”, cuando se puede decretar, que ahí el equipo potosino perdió toda posibilidad de poder permanecer en el máximo circuito y se puede decir que ese fue el día más triste del futbol de San Luis Potosí.
Esa temporada de 1973-74, había sido un mal año para el equipo de San Luis. En ese entonces, el formato del campeonato era que se tenían dos grupos y al final de la temporada, los dos últimos lugares, de cada grupo, disputaban una serie por el no descenso, correspondiendo al equipo que más puntos hubiera hecho, cerrar en casa.
Desde el inicio de la temporada, las cosas no rodaban bien para el equipo San Luis, pues siempre se habían mantenido en los últimos lugares, sin embargo, ya casi en las últimas jornadas de esa temporada, hubo un rayo de esperanza de que el San Luis se pudiera salvar, pues se contrató a dos jugadorazos de Trinidad y Tobago, que eran Steve Davis y Warry Archibal, además de un escocés, que luego se quedó a vivir en San Luis, era Ronny Scharp.
Trinidad y Tobago acababan de ganarle a México en el Premundial y de ese torneo, directivos del San Luis, fueron a contratar a dos jugadores que se desempeñaban como delanteros, un extremo izquierdo y uno derecho.
De pronto, el equipo San Luis se convirtió en el equipo sensación, letales en el ataque y muy seguros en la defensa, por lo que se estaba seguro que en una serie contra La Laguna se iba a ganar fácil.
El primer partido que se iba a jugar en el “Plan de San Luis”, sería en un día domingo y un día antes, sorpresivamente los dos jugadores trinitarios anunciaron que se iban a su país y no jugarían esos dos últimos partidos. Directivos les rogaron y les pedían que se quedaran, pero estos jugadores se mantuvieron firmes en su decisión.
Aquella noche del sábado, fuimos a entrevistar al “Charro” Lara, técnico del equipo Laguna, para que nos diera sus impresiones, pero además le preguntamos que que opinaba que los trinitarios no estarían en esos juegos, a lo que el técnico no nos creyó.
El partido sería el domingo a las 12:00 del día, el San Luis volvía a ser el mismo de antes, chato en el ataque, pero además el jugador José Luis Rossete, que era el más o menos goleador, se había lesionado unos días antes, además de que Villalba, que era la estrella del equipo, iniciaba en la banca.
En ese tiempo los periodistas veíamos los juegos a ras de pasto, atrás de la portería del equipo visitante y desde ahí vimos a un equipo Laguna, totalmente nervioso, como pocas veces se puede ver a un equipo. Sus defensas gritaban y gritaban, trataban de organizarse para impedir que les hicieran daño, pero enfrente tenían a un equipo inoperante.
Ya a la desesperada metieron a José Luis Rossete, pero más que ayudar, fue un estorbo para sus compañeros y daba lástima como arrastraba la pierna para tratar de alcanzar la pelota.
Vino después el silbatazo final y los miles de aficionados que habían llenado el “Plan de San Luis”, se quedaron mudos, muchos de ellos tardaron en salir del estadio por que se quedaron a llorar un rato, no lo podían creer, su equipo no había sido capaz de aprovechar la localía y en Torreón les esperaba lo peor, como así fue.
Al día siguiente un viento movía los vasos de cartón y algunos pedazos de tela de las banderas, señal de que ahí se había lidiado una batalla y que se había perdido.
LOS DATOS
- Con dos jugadores trinitarios y un escocés, San Luis daba muestras de que evitaría el descenso, pero Davis y Archival decidieron no jugar esa liguilla
- “Caballo” Mendoza, nominalmente era el técnico, pero fueron algunos jugadores los que pusieron la alineación en los dos últimos juegos
