/ domingo 10 de julio de 2022

Un camino hacia Dios | La Alianza de Amor

«Director del grupo de Alianza de Amor», Moisés Lira Serafín

Art. 811

La Alianza de Amor, tercera de las cinco Obras de la Cruz, quedó bajo la dirección del padre Moisés a contar del año 1933 hasta 1936, al ser delegado por el padre Félix que era el director de todas las obras.

Después de la persecución religiosa, el grupo se reinició con 60 personas, que viviendo en el mundo, aspiraban a la perfección y a una vida de más unión con Dios, según lo exige su objetivo. El padre Moisés se dedicó con esmero a formar a sus miembros, hablándoles de sus compromisos, se lee en el libro de actas: «En la Alianza, sin el voto de las religiosas, libremente las almas se comprometen con fórmulas sencillas a seguir a Jesús más de cerca, más interiormente. Al hacer su compromiso dan un paso en la unión con Jesús.»

Para lograr el objetivo que las socias del grupo de Alianza perseguían, que es el de adquirir el tinte de las Obras de la Cruz, tenía con ellas reuniones frecuentes, retiros mensuales y ejercicios espirituales. Era él quien imponía la medalla a las de nuevo ingreso, invitándolas a que se arrojaran sin reserva en los brazos de Dios.

Según se viene diciendo, el padre Moisés vivía una intensa vida interior y de unión con Dios y esto era lo que transmitía en los retiros y ejercicios que daba a las socias. Había en esos días un gran ambiente de silencio y recogimiento a fin de sacar fruto de la oración y de la unión con Dios.

Un gran número de socias fueron sus hijas de confesión, entre ellas están las dos primeras que el Señor eligió y que puso en sus manos para hacer la fundación de su Obra en la Iglesia, la señorita Amalia Garduño y la señorita Teresa Martínez.

Es conveniente mencionar que el grupo de la Alianza de Amor dirigido por el padre Moisés, fue semillero de vocaciones, pues las que no siguieron por el camino de la vida religiosa, vivieron su vocación cristianamente como casadas o solteras. La madre Emilia Massimí, MCMI., testifica:

«Desde el primer Retiro me sentí atraída. Muy lejano, pero muy vivo, tengo el recuerdo del padre Moisés en la junta de los miércoles en la noche en ese saloncito de los Adoradores Nocturnos: sus ojos negros, brillantes, muy vivos, bondadosos se fijaban en mí, tal vez por ser nueva, me atrajo el interés que me mostró, sentí que me tomaba en cuenta, que no pasaba inadvertida y aunque no me habló, me sentí contenta con lo que él explicaba a las Socias de la Alianza. Creo que fue para mí un “descubrir algo nuevo”, espiritual, que me llenaba,» ese algo era su unión con Dios.

El Venerable Siervo de Dios Moisés Lira Serafín, hoy se encuentra en proceso de canonización, en proceso de ser reconocido por la Iglesia como santo, encomiéndate a su intercesión. Comunica los favores recibidos a: Oficina de la causa de beatificación y canonización Moisés Lira Serafín, M.Sp.S., tel: 444 813 2309

«Director del grupo de Alianza de Amor», Moisés Lira Serafín

Art. 811

La Alianza de Amor, tercera de las cinco Obras de la Cruz, quedó bajo la dirección del padre Moisés a contar del año 1933 hasta 1936, al ser delegado por el padre Félix que era el director de todas las obras.

Después de la persecución religiosa, el grupo se reinició con 60 personas, que viviendo en el mundo, aspiraban a la perfección y a una vida de más unión con Dios, según lo exige su objetivo. El padre Moisés se dedicó con esmero a formar a sus miembros, hablándoles de sus compromisos, se lee en el libro de actas: «En la Alianza, sin el voto de las religiosas, libremente las almas se comprometen con fórmulas sencillas a seguir a Jesús más de cerca, más interiormente. Al hacer su compromiso dan un paso en la unión con Jesús.»

Para lograr el objetivo que las socias del grupo de Alianza perseguían, que es el de adquirir el tinte de las Obras de la Cruz, tenía con ellas reuniones frecuentes, retiros mensuales y ejercicios espirituales. Era él quien imponía la medalla a las de nuevo ingreso, invitándolas a que se arrojaran sin reserva en los brazos de Dios.

Según se viene diciendo, el padre Moisés vivía una intensa vida interior y de unión con Dios y esto era lo que transmitía en los retiros y ejercicios que daba a las socias. Había en esos días un gran ambiente de silencio y recogimiento a fin de sacar fruto de la oración y de la unión con Dios.

Un gran número de socias fueron sus hijas de confesión, entre ellas están las dos primeras que el Señor eligió y que puso en sus manos para hacer la fundación de su Obra en la Iglesia, la señorita Amalia Garduño y la señorita Teresa Martínez.

Es conveniente mencionar que el grupo de la Alianza de Amor dirigido por el padre Moisés, fue semillero de vocaciones, pues las que no siguieron por el camino de la vida religiosa, vivieron su vocación cristianamente como casadas o solteras. La madre Emilia Massimí, MCMI., testifica:

«Desde el primer Retiro me sentí atraída. Muy lejano, pero muy vivo, tengo el recuerdo del padre Moisés en la junta de los miércoles en la noche en ese saloncito de los Adoradores Nocturnos: sus ojos negros, brillantes, muy vivos, bondadosos se fijaban en mí, tal vez por ser nueva, me atrajo el interés que me mostró, sentí que me tomaba en cuenta, que no pasaba inadvertida y aunque no me habló, me sentí contenta con lo que él explicaba a las Socias de la Alianza. Creo que fue para mí un “descubrir algo nuevo”, espiritual, que me llenaba,» ese algo era su unión con Dios.

El Venerable Siervo de Dios Moisés Lira Serafín, hoy se encuentra en proceso de canonización, en proceso de ser reconocido por la Iglesia como santo, encomiéndate a su intercesión. Comunica los favores recibidos a: Oficina de la causa de beatificación y canonización Moisés Lira Serafín, M.Sp.S., tel: 444 813 2309