/ domingo 17 de abril de 2022

Un camino hacia Dios


«Vivamos gozosos el triunfo de Jesús», Moisés Lira Serafín Art. 800

Son momentos de reflexión después de recordar como Jesús murió en la cruz por nosotros, después de miles de años seguimos conmemorando y agradeciendo su sacrificio y nos sumamos a su victoria en el acto de resurrección.

En estos momentos debemos contagiarnos de estas demostraciones de amor ante tantos embates que hemos recibido en salud, economía, y falta de trabajo. Lo que nos ha sostenido de pie es nuestra fe viva, una fe en que vendrán tiempos mejores para nuestras familias, para nuestro país.

El padre Moisés Lira nos invita hoy a seguir adelante, siendo pequeños ante el Señor dejándole todo aquel peso que no nos deja continuar, Él sabrá iluminar el camino correcto para cada quien. El “Apóstol de la bondad”, siempre fue ejemplo en la dirección espiritual y hoy debemos alimentar nuestro corazón con mucha espiritualidad, debe estar inundado de amor para que nuestros actos sean demostraciones, igual que Jesús en la cruz nos demostró su amor, nosotros podemos hacer mucho desde nuestra trinchera, con actos buenos, de solidaridad, de apoyo y mucho compromiso social.

El padre Moisés fue un alma privilegiada del Señor, dotado de carismas especiales, como el de saber conducir por el camino de la perfección a quienes se acercaban a él en la confesión. Por su fidelidad a la gracia y su gran espíritu de obediencia hizo fructificar estos dones durante toda su vida a través de la dirección espiritual, misión principal de su congregación. Decía el padre Félix de Jesús: “Quiero que mis hijos siempre estén en el confesionario, haya gente o no haya gente, ustedes estén ahí”. Así fue el padre Moisés.

Nos cuesta mucho esperar cuando hay proyectos en nuestra vida y más si apremian las circunstancias, el “Apóstol de la bondad” nos dice, esperemos, los tiempos del Señor son perfectos, Dios inventó el tiempo, nosotros la prisa y eso nos angustia o nos lleva a cometer errores.

Nuestro Señor se quejaba con Concepción Cabrera de que muchas almas no llegan a la perfección por falta de directores. El padre Moisés fue un auténtico Misionero como nuestro Señor lo pidió; director de almas, porque no hay alguien que él haya dirigido que siga igual. No se estancaba un alma con él.

No nos estanquemos, sigamos adelante con fe y alegría en nuestros planes, muy nutridos de amor y espiritualidad, que ningún sesgo nos despiste, aun y cuando los acontecimientos sociales sean complejos, a seguir sólidos, con mucha voluntad y con mucha fe en el Señor.

Los proyectos se realizan cuando hay todo este andamiaje, dejando que el Señor conduzca. Que no nos gane el lado humano ni nos atropelle la prisa, sino entre la prudencia y el amor del Creador, con la certeza del amor de Jesús por la humanidad y su gran triunfo la Resurrección, sigamos viviendo junto a Jesús. Un hombre del pasado Moisés Lira Serafín, hoy vivo en el presente nos invita a vivir con Jesús y bajo su dirección espiritual.


«Vivamos gozosos el triunfo de Jesús», Moisés Lira Serafín Art. 800

Son momentos de reflexión después de recordar como Jesús murió en la cruz por nosotros, después de miles de años seguimos conmemorando y agradeciendo su sacrificio y nos sumamos a su victoria en el acto de resurrección.

En estos momentos debemos contagiarnos de estas demostraciones de amor ante tantos embates que hemos recibido en salud, economía, y falta de trabajo. Lo que nos ha sostenido de pie es nuestra fe viva, una fe en que vendrán tiempos mejores para nuestras familias, para nuestro país.

El padre Moisés Lira nos invita hoy a seguir adelante, siendo pequeños ante el Señor dejándole todo aquel peso que no nos deja continuar, Él sabrá iluminar el camino correcto para cada quien. El “Apóstol de la bondad”, siempre fue ejemplo en la dirección espiritual y hoy debemos alimentar nuestro corazón con mucha espiritualidad, debe estar inundado de amor para que nuestros actos sean demostraciones, igual que Jesús en la cruz nos demostró su amor, nosotros podemos hacer mucho desde nuestra trinchera, con actos buenos, de solidaridad, de apoyo y mucho compromiso social.

El padre Moisés fue un alma privilegiada del Señor, dotado de carismas especiales, como el de saber conducir por el camino de la perfección a quienes se acercaban a él en la confesión. Por su fidelidad a la gracia y su gran espíritu de obediencia hizo fructificar estos dones durante toda su vida a través de la dirección espiritual, misión principal de su congregación. Decía el padre Félix de Jesús: “Quiero que mis hijos siempre estén en el confesionario, haya gente o no haya gente, ustedes estén ahí”. Así fue el padre Moisés.

Nos cuesta mucho esperar cuando hay proyectos en nuestra vida y más si apremian las circunstancias, el “Apóstol de la bondad” nos dice, esperemos, los tiempos del Señor son perfectos, Dios inventó el tiempo, nosotros la prisa y eso nos angustia o nos lleva a cometer errores.

Nuestro Señor se quejaba con Concepción Cabrera de que muchas almas no llegan a la perfección por falta de directores. El padre Moisés fue un auténtico Misionero como nuestro Señor lo pidió; director de almas, porque no hay alguien que él haya dirigido que siga igual. No se estancaba un alma con él.

No nos estanquemos, sigamos adelante con fe y alegría en nuestros planes, muy nutridos de amor y espiritualidad, que ningún sesgo nos despiste, aun y cuando los acontecimientos sociales sean complejos, a seguir sólidos, con mucha voluntad y con mucha fe en el Señor.

Los proyectos se realizan cuando hay todo este andamiaje, dejando que el Señor conduzca. Que no nos gane el lado humano ni nos atropelle la prisa, sino entre la prudencia y el amor del Creador, con la certeza del amor de Jesús por la humanidad y su gran triunfo la Resurrección, sigamos viviendo junto a Jesús. Un hombre del pasado Moisés Lira Serafín, hoy vivo en el presente nos invita a vivir con Jesús y bajo su dirección espiritual.