/ domingo 14 de noviembre de 2021

Un camino hacia Dios


«Encuentro providencial con el P. Félix de Jesús Rougier» Moisés Lira Serafín

Art. 778

En 1914 el padre Félix de Jesús Rougier, de origen Francés con largo historial misionero en Hispano América, buscaba vocaciones para fundar la Congregación de los Misioneros del Espíritu Santo con la ayuda y apoyo de monseñor Ibarra, Obispo de Puebla, quien fuera protector de las Obras de la Cruz. El padre Félix, lleno de confianza en Dios ponía los medios para hacer dicha fundación y Dios le iba abriendo caminos y proporcionando espacios para la búsqueda de vocaciones. El padre Félix llegó al Seminario el día 25 de agosto para promover vocaciones con este fin y monseñor Sánchez Paredes que era el rector lo nombró Director Espiritual del Seminario y le pidió además que diera algunos cursos de Francés,

Un día el padre Félix decidió hablar sobre la Vida Religiosa y Sacerdotal a un grupo de seminaristas, invitando a los que se sintieran llamados a este estado, dieran una respuesta. Pero ¡oh! sorpresa, nadie de los demás seminaristas respondió a las inquietudes propuestas, sólo hubo alguien en el que sí se prendieron amorosamente estas inquietudes, nuestro muy querido Moisés Lira Serafín, a quien su confesor había asegurado que, además de ser sacerdote también podía ser religioso, para servir mejor al Señor. Este ideal fue forjándose en su corazón y su mente, pero sin decidir todavía en cual Congregación religiosa podría realizar ese anhelo, Al impulso del Espíritu Santo, seguramente podemos afirmarlo hoy, respondió que él se iba con el padre Félix, aún cuando humanamente no parece que sea así, Dios se vale de todo cuando desea llamar a alguien para que lo siga. Cuando el padre Félix terminó su conferencia a los seminaristas, le preguntó de nuevo a Moisés:

«¿usted de verdad quiere?» él contestó: «mire padre, yo realmente no, sino que me impacienté porque nadie contestaba y eso me impulsó». -«Eso quiere decir que hay algo ... hay algo»- dijo el padre Félix y empezaron a dialogar.

Desde ese momento Moisés comenzó a sentir que su vocación era la de Misionero del Espíritu Santo, por lo que fue madurando esta inquietud durante algunos meses, obedeciendo al padre Félix que le recomendó que lo pensara, por eso cuando le volvió a preguntar: «¿qué hay? ¿qué dice?» -le respondió- «pues, estoy pensando». Esta actitud muestra su adhesión y obediencia hasta en los mínimos detalles de manera constate, viviendo así de manera heroica la virtud de la obediencia, como característica propia, siendo su lema el mismo de Jesús «Hago siempre lo que es del agrado de mi Padre».

El Venerable Siervo de Dios padre Moisés Lira, el Apóstol de la Bondad, se encuentra en proceso de ser reconocido por la Iglesia como santo, encomiéndate a su intercesión. Comunica los favores recibidos a: Oficina de la causa de beatificación y canonización Moisés Lira Serafín, M.Sp.S., tel: 444 813 2309; e-mail: causamoisesliraserafin@gmail.com


«Encuentro providencial con el P. Félix de Jesús Rougier» Moisés Lira Serafín

Art. 778

En 1914 el padre Félix de Jesús Rougier, de origen Francés con largo historial misionero en Hispano América, buscaba vocaciones para fundar la Congregación de los Misioneros del Espíritu Santo con la ayuda y apoyo de monseñor Ibarra, Obispo de Puebla, quien fuera protector de las Obras de la Cruz. El padre Félix, lleno de confianza en Dios ponía los medios para hacer dicha fundación y Dios le iba abriendo caminos y proporcionando espacios para la búsqueda de vocaciones. El padre Félix llegó al Seminario el día 25 de agosto para promover vocaciones con este fin y monseñor Sánchez Paredes que era el rector lo nombró Director Espiritual del Seminario y le pidió además que diera algunos cursos de Francés,

Un día el padre Félix decidió hablar sobre la Vida Religiosa y Sacerdotal a un grupo de seminaristas, invitando a los que se sintieran llamados a este estado, dieran una respuesta. Pero ¡oh! sorpresa, nadie de los demás seminaristas respondió a las inquietudes propuestas, sólo hubo alguien en el que sí se prendieron amorosamente estas inquietudes, nuestro muy querido Moisés Lira Serafín, a quien su confesor había asegurado que, además de ser sacerdote también podía ser religioso, para servir mejor al Señor. Este ideal fue forjándose en su corazón y su mente, pero sin decidir todavía en cual Congregación religiosa podría realizar ese anhelo, Al impulso del Espíritu Santo, seguramente podemos afirmarlo hoy, respondió que él se iba con el padre Félix, aún cuando humanamente no parece que sea así, Dios se vale de todo cuando desea llamar a alguien para que lo siga. Cuando el padre Félix terminó su conferencia a los seminaristas, le preguntó de nuevo a Moisés:

«¿usted de verdad quiere?» él contestó: «mire padre, yo realmente no, sino que me impacienté porque nadie contestaba y eso me impulsó». -«Eso quiere decir que hay algo ... hay algo»- dijo el padre Félix y empezaron a dialogar.

Desde ese momento Moisés comenzó a sentir que su vocación era la de Misionero del Espíritu Santo, por lo que fue madurando esta inquietud durante algunos meses, obedeciendo al padre Félix que le recomendó que lo pensara, por eso cuando le volvió a preguntar: «¿qué hay? ¿qué dice?» -le respondió- «pues, estoy pensando». Esta actitud muestra su adhesión y obediencia hasta en los mínimos detalles de manera constate, viviendo así de manera heroica la virtud de la obediencia, como característica propia, siendo su lema el mismo de Jesús «Hago siempre lo que es del agrado de mi Padre».

El Venerable Siervo de Dios padre Moisés Lira, el Apóstol de la Bondad, se encuentra en proceso de ser reconocido por la Iglesia como santo, encomiéndate a su intercesión. Comunica los favores recibidos a: Oficina de la causa de beatificación y canonización Moisés Lira Serafín, M.Sp.S., tel: 444 813 2309; e-mail: causamoisesliraserafin@gmail.com