/ domingo 16 de febrero de 2020

Un Camino hacia Dios

« Seamos buenos hijos » Moisés Lira Serafín Art. 687

Oscar Segura Ramírez

Reflexionemos si con nuestras acciones estamos respondiendo al legado de Jesús y de María, en este mundo dinámico donde se han perdido muchas cosas y hoy vivimos con miedos, incertidumbre de lo que acontece en distintos temas, pero que al final, nos afecta y nos inhibe, temas mundiales como guerras entre naciones, inseguridad y hoy la salud con brotes epidemiológicos, la economía, finanzas y bienestar social y una lista interminable, y si vamos a lo nacional, más temas que en ocasiones parecieran asfixiarnos y ¿dónde quedo Dios?

El padre Moisés Lira Serafín nos da aliento y también nos dice que todo esto, es más llevadero cuando vamos de la mano con Jesús, procuremos darle gusto a Él en todo y hasta donde se pueda y Él hará lo demás, que no perdamos la paz, estar tranquilos y ser sencillos, suframos en Él y con Él y por Él.

“Ser humildes y pequeños, comienza en la filiación divina, esta filiación viene de la gracia; por eso debemos recordar todo lo que se refiere a la gracia en nosotros. Un Padre que nos ama, nos soporta, nos perdona, nos sostiene, por eso debemos estar firmes en esa verdad y nada temer, Dios es nuestro y nosotros somos de Dios. No temamos ser muy hijos de Él, nuestra madre la Iglesia nos los enseña y Jesús con su vida y su doctrina también nos lo dice claramente”, estas palabras nos las comparte el “Apóstol de la Bondad”, hagámoslas parte de nuestra vida.

Muchas problemáticas de nuestro entorno no están en nuestras manos resolverlas, pero sin en las manos de Jesús, si nos abandonamos a Él y le dejamos que haga su voluntad y no esa lucha constante y perene de que se haga nuestra voluntad. Humildes y pequeños, “María también, después de Jesús y nadie como Ella, fue la hija predilecta de Dios, entremos, con todo el entusiasmo en esta verdad”.

Los buenos hijos, dice el padre Moisés hacen la voluntad de sus padres, en la obediencia de Jesús encontramos el amor ardiente a su Padre. El hijo bueno ama y obedece a sus padres y tiene gran confianza para con su padre, los buenos hijos son audaces con sus padre, no son mentirosos, son abiertos, entonces las relaciones que debemos tener para con Dios son de portarnos como hijos de Dios, no como hermanos, no como grandes personas estiradas, soberbias y orgullosas, sino como hijos pequeños, no le tengamos miedo, sino la confianza de hijos, no necesitamos anunciarnos con Él para que nos reciba, porque somos de la familia.

Nos toca emular y vivir intensamente esta enseñanza que nos comparte, problemas siempre van a existir de acuerdo a la dimensión que queramos darle, pero siempre de la mano con Jesús y como hijos pequeños será más llevadero y tendremos respuestas, seamos buenos hijos, como lo fue este hombre del pasado, hoy vivo en el presente, Moisés Lira Serafín. Comunica tus testimonios a e-mail: causamoisesliraserafin@gmail.com

« Seamos buenos hijos » Moisés Lira Serafín Art. 687

Oscar Segura Ramírez

Reflexionemos si con nuestras acciones estamos respondiendo al legado de Jesús y de María, en este mundo dinámico donde se han perdido muchas cosas y hoy vivimos con miedos, incertidumbre de lo que acontece en distintos temas, pero que al final, nos afecta y nos inhibe, temas mundiales como guerras entre naciones, inseguridad y hoy la salud con brotes epidemiológicos, la economía, finanzas y bienestar social y una lista interminable, y si vamos a lo nacional, más temas que en ocasiones parecieran asfixiarnos y ¿dónde quedo Dios?

El padre Moisés Lira Serafín nos da aliento y también nos dice que todo esto, es más llevadero cuando vamos de la mano con Jesús, procuremos darle gusto a Él en todo y hasta donde se pueda y Él hará lo demás, que no perdamos la paz, estar tranquilos y ser sencillos, suframos en Él y con Él y por Él.

“Ser humildes y pequeños, comienza en la filiación divina, esta filiación viene de la gracia; por eso debemos recordar todo lo que se refiere a la gracia en nosotros. Un Padre que nos ama, nos soporta, nos perdona, nos sostiene, por eso debemos estar firmes en esa verdad y nada temer, Dios es nuestro y nosotros somos de Dios. No temamos ser muy hijos de Él, nuestra madre la Iglesia nos los enseña y Jesús con su vida y su doctrina también nos lo dice claramente”, estas palabras nos las comparte el “Apóstol de la Bondad”, hagámoslas parte de nuestra vida.

Muchas problemáticas de nuestro entorno no están en nuestras manos resolverlas, pero sin en las manos de Jesús, si nos abandonamos a Él y le dejamos que haga su voluntad y no esa lucha constante y perene de que se haga nuestra voluntad. Humildes y pequeños, “María también, después de Jesús y nadie como Ella, fue la hija predilecta de Dios, entremos, con todo el entusiasmo en esta verdad”.

Los buenos hijos, dice el padre Moisés hacen la voluntad de sus padres, en la obediencia de Jesús encontramos el amor ardiente a su Padre. El hijo bueno ama y obedece a sus padres y tiene gran confianza para con su padre, los buenos hijos son audaces con sus padre, no son mentirosos, son abiertos, entonces las relaciones que debemos tener para con Dios son de portarnos como hijos de Dios, no como hermanos, no como grandes personas estiradas, soberbias y orgullosas, sino como hijos pequeños, no le tengamos miedo, sino la confianza de hijos, no necesitamos anunciarnos con Él para que nos reciba, porque somos de la familia.

Nos toca emular y vivir intensamente esta enseñanza que nos comparte, problemas siempre van a existir de acuerdo a la dimensión que queramos darle, pero siempre de la mano con Jesús y como hijos pequeños será más llevadero y tendremos respuestas, seamos buenos hijos, como lo fue este hombre del pasado, hoy vivo en el presente, Moisés Lira Serafín. Comunica tus testimonios a e-mail: causamoisesliraserafin@gmail.com