/ domingo 29 de julio de 2018

Un Camino Hacia Dios

“El ‘primeritito’, el más pequeño, el más humilde”. Moisés Lira Serafín


Art. 606

María Socorro Pérez Coss y León, mcmi

El padre Moisés Lira Serafín, “fue un alma predilecta de Dios nuestro Señor, fue al ‘primeritito’ que puso como piedra angular de la gran obra del padre Félix”, expresó el padre Edmundo Iturbide Reygondaud, Misionero del Espíritu Santo, enfatizando que fue nuestro Señor quien lo eligió como piedra angular y afirmando que “el primer Misionero del Espíritu Santo fue el padre Moisés. En orden místico, íntimo y amistoso decimos que monseñor Ibarra fue el primer Misionero, pero ante la Iglesia no. Ante la Iglesia es el padre Moisés, el más pequeño, el más humilde que nuestro padre había encontrado entre todos los candidatos”. Cuando el padre Félix ya se iba de Puebla para hacer la fundación en México, ya para salir el tren “se le presentó Moisés con un bultito debajo del brazo”.


En toda la Sagrada Escritura vemos claramente como Dios elige con predilección a los humildes y pequeños para hacer obras grandes, como en María, a los que saben que por sí mismos no pueden nada, por eso vacíos de sí mismos permiten que Dios los llene, así lo afirma el padre Edmundo del padre Moisés: “era un alma muy llena de Dios”, y era lo que trasmitía, quienes lo buscaban para la confesión o dirección espiritual encontraban a Dios, “tenía un don de almas admirable porque lo buscaban toda clase de personas, principalmente de la alta sociedad”.


Continúa el padre Edmundo, El padre Moisés estaba muy bien preparado en doctrina. Estudió Teología Dogmática en Roma en la Universidad Gregoriana, de 1926 a 1928, y era muy ameno en sus conferencias. “Cuando daba una plática y echaba sus charadas porque era de muy buen humor, tenía esa virtud pequeña, como San Francisco de Sales. Moisés era agradable, hacía reír a todos, siempre levantaba el ánimo. Era un alma muy bonita. Yo les digo, nuestro Señor no se equivoca. El padre Félix decía del padre Moisés: El primero de mis hijos”.


Conchita Cabrea, como madre, quien pronto será beatificada, interceda para que si es la voluntad de Dios, su pequeño y humilde hijo Moisés también sea beatificado para gloria de Dios, mostrando así la Espiritualidad de la Cruz como un camino de santidad al alcance de todos. Encomiéndate a su intercesión.


Dios y Padre nuestro,

que en el Venerable Siervo de Dios

padre Moisés Lira Serafín,

nos has dado un ejemplo de caridad

en el servicio alegre a los pobres

y lo constituiste apóstol

del amor filial a ti y a la Madre de tu Hijo.

Haz que imitándolo,

amemos a Cristo como él lo amó

y lo sirvamos en nuestros hermanos.

Escucha Señor nuestra súplica confiada

y otórganos por su intercesión

la gracia que te pedimos…


[pausa para hacer la petición]


Concédenos Padre,

que su glorificación en la Iglesia

sea para que en todos los hombres

se acreciente el espíritu de adopción

que nos has dado en tu Hijo Jesucristo. Amén.


Para comunicar testimonios: Tel 01(55)5547 3139 e-mail: apostoldelabondad@gmail.com



“El ‘primeritito’, el más pequeño, el más humilde”. Moisés Lira Serafín


Art. 606

María Socorro Pérez Coss y León, mcmi

El padre Moisés Lira Serafín, “fue un alma predilecta de Dios nuestro Señor, fue al ‘primeritito’ que puso como piedra angular de la gran obra del padre Félix”, expresó el padre Edmundo Iturbide Reygondaud, Misionero del Espíritu Santo, enfatizando que fue nuestro Señor quien lo eligió como piedra angular y afirmando que “el primer Misionero del Espíritu Santo fue el padre Moisés. En orden místico, íntimo y amistoso decimos que monseñor Ibarra fue el primer Misionero, pero ante la Iglesia no. Ante la Iglesia es el padre Moisés, el más pequeño, el más humilde que nuestro padre había encontrado entre todos los candidatos”. Cuando el padre Félix ya se iba de Puebla para hacer la fundación en México, ya para salir el tren “se le presentó Moisés con un bultito debajo del brazo”.


En toda la Sagrada Escritura vemos claramente como Dios elige con predilección a los humildes y pequeños para hacer obras grandes, como en María, a los que saben que por sí mismos no pueden nada, por eso vacíos de sí mismos permiten que Dios los llene, así lo afirma el padre Edmundo del padre Moisés: “era un alma muy llena de Dios”, y era lo que trasmitía, quienes lo buscaban para la confesión o dirección espiritual encontraban a Dios, “tenía un don de almas admirable porque lo buscaban toda clase de personas, principalmente de la alta sociedad”.


Continúa el padre Edmundo, El padre Moisés estaba muy bien preparado en doctrina. Estudió Teología Dogmática en Roma en la Universidad Gregoriana, de 1926 a 1928, y era muy ameno en sus conferencias. “Cuando daba una plática y echaba sus charadas porque era de muy buen humor, tenía esa virtud pequeña, como San Francisco de Sales. Moisés era agradable, hacía reír a todos, siempre levantaba el ánimo. Era un alma muy bonita. Yo les digo, nuestro Señor no se equivoca. El padre Félix decía del padre Moisés: El primero de mis hijos”.


Conchita Cabrea, como madre, quien pronto será beatificada, interceda para que si es la voluntad de Dios, su pequeño y humilde hijo Moisés también sea beatificado para gloria de Dios, mostrando así la Espiritualidad de la Cruz como un camino de santidad al alcance de todos. Encomiéndate a su intercesión.


Dios y Padre nuestro,

que en el Venerable Siervo de Dios

padre Moisés Lira Serafín,

nos has dado un ejemplo de caridad

en el servicio alegre a los pobres

y lo constituiste apóstol

del amor filial a ti y a la Madre de tu Hijo.

Haz que imitándolo,

amemos a Cristo como él lo amó

y lo sirvamos en nuestros hermanos.

Escucha Señor nuestra súplica confiada

y otórganos por su intercesión

la gracia que te pedimos…


[pausa para hacer la petición]


Concédenos Padre,

que su glorificación en la Iglesia

sea para que en todos los hombres

se acreciente el espíritu de adopción

que nos has dado en tu Hijo Jesucristo. Amén.


Para comunicar testimonios: Tel 01(55)5547 3139 e-mail: apostoldelabondad@gmail.com