/ sábado 6 de marzo de 2021

Solarium

Despegan campañas y ofrecen “seguridad”

Aunque estaba cantado el tema de la seguridad pública en el territorio potosino, los nueve candidatos a la gubernatura de San Luis Potosí incluyeron promesas que tienen distintos enfoques. Van desde los muy generales como la recuperación de la tranquilidad en las calles, hasta la aplicación de la justicia sin permitir la impunidad como sello de la administración estatal.

A la hora de los despegues, los nueve aspirantes a gobernador para el sexenio que se inicia el próximo mes de septiembre, las diferencias estuvieron en el campo de la organización, de la forma de difundir los actos y la calidad de los discursos. Hubo actos discretos que tuvieron escasa asistencia con motivo de las regulaciones sanitarias para evitar contagios de COVID 19 y los hubo con la asistencia de una cantidad regular de asistentes. En todos los casos tuvieron a su disposición los recursos de las redes sociales y pudieron difundir sus mensajes pese a que es difícil evaluar la cantidad de receptores presenciales y de quienes esperaban enterarse a través de las páginas y portales que los replicaron enseguida. El interés del electorado en los arranques de campaña no significó ninguna sorpresa. Difícil acreditar que la inmediatez del inicio marcado por el primer minuto de ayer haya sido el punto fuerte con que los candidatos quisieron impactar en la percepción ciudadana. La condición sanitaria sirve de explicación y al mismo tiempo de aceptación de que las grandes concentraciones no fueron posibles. Pero no solamente el tiempo fue un elemento de posible impacto en la ciudadanía. También lo fue la temática de su oferta y los hechos delictivos más recientes les sirvieron de base para iniciar la oferta que su trabajo tiene. Ayer no fue posible percibir la credibilidad que el ciudadano concedió al discurso de los candidatos. La improvisación fue la causa compartida para ello.

Pese a la importancia que tiene el acto de inicio entre los augurios que es posible fincar, no estamos todavía en condiciones de conceder ventajas definitivas. Sin embargo, es un hecho que los programas de actividades no estaban preparados. Seria éste el segundo aspecto negativo de las campañas. Gallardo demostró un mayor sentido de la organización y un mejor control de su equipo de campaña. No obstante, la doctora Mónica Liliana Rangel hizo gala de una oratoria poco usual entre los profesionistas de la medicina. En el terreno de la oratoria tampoco fueron menos los recursos demostrados por Octavio Pedroza Gaitán y Juan Carlos Machinena Morales al referirse al tema de la seguridad que compartieron los nueve aspirantes. Marvely Costanzo tuvo expresiones frente al Teatro de La Paz en un lenguaje coloquial. Ciertamente abordó el tema del momento y se esforzó por coincidir con las expresiones más escuchadas en torno a los casos recientes en el estado. Es una verdad que Javier Rico Ávalos, Adrián Esper Cárdenas, José Luis Romero y Arturo Segoviano García han desprotegido sus espacios de divulgación. Esta campaña apenas empieza y los adjetivos todavía no se sustancian.

POLÍTICA DE SALUD, O SALUD POLÍTICA

Es fácil comprender las razones por las que el cuidado de la salud es un tema especialmente vinculado al ejercicio del poder político. En México, la atención médica y el otorgamiento de medicinas es, para decirlo pronto, asunto crucial para los tres niveles de gobierno. El Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” vive momentos difíciles para la prestación de esos servicios a la gente de menos recursos. No obstante que el derecho a la salud es una de las varias garantías constitucionales, la situación por la que atraviesa el nosocomio parece inexplicable. No cuadran la calidad de sus servicios con los aprietos económicos que lo aquejan, a pesar de la obligación del gobierno federal para destinarle los recursos necesarios para conservarlo con salud financiera. Evidentemente el Hospital Central es el de mayor capacidad con que cuenta el estado y el único capaz de prestar atención a los habitantes de por lo menos tres entidades del noreste y centro del país, amén de funcionar como hospital-escuela con la presencia cotidiana de alumnos de la facultad de medicina de la UASLP. Las especificaciones técnicas y su equipamiento le determinan también la necesidad de contar con recursos para su operación. ¿Qué sucede entonces?

La concurrencia de enfermos que demandan atención del tercer nivel o de alta especialidad procedentes de entidades vecinas representa, además, la necesidad de operar financieramente la carga del Hospital Central de manera que su gasto se distribuya entre los presupuestos federales asignados a cada uno de los estados de origen de la población que demanda el servicio. O, en todo caso, que el gobierno federal asuma que el gasto que representa un hospital de tal magnitud es parte de un presupuesto sin reducciones de ninguna naturaleza.

La salida de personal médico y de enfermeras que enfrentan serias dificultades para dar una atención de mínima calidad, representa la voz de una gran cantidad de mexicanos que no tienen otra opción que venir al Central en busca de su salud como parte de las garantías a que tiene derecho todo mexicano. El reclamo de los profesionistas nada tiene que ver con las politiquerías electorales, ni debe prestarse al juego entre políticos que buscan especular para su beneficio. Cualquiera que sea la razón del abandono federal de sus obligaciones para atender el ramo de la salud de los habitantes de la zona atendida por el “Ignacio Morones Prieto”, es urgente que se resuelvan los problemas actuales y se cumpla con las disposiciones constitucionales.

El Hospital Central no ofrece causa alguna para ser involucrado en decisiones que no sean las del estricto criterio médico para garantizar la salud de sus pacientes. Cuando está en juego la vida de las personas, digo, las indecisiones y los pretextos no son una respuesta satisfactoria para nadie. No hay nada que negociar, no hay otra negociación que el cumplimiento de lo dispuesto en las normas nacionales. Si esto no se llega a entender, la respuesta popular puede ser el enojo.

EL COTARRO POLÍTICO

Mientras la escalada de violencia en el estado fue numérica y no afectó los niveles de relevancia de las personas afectadas, nadie parecía preocuparse por lo que pasaba en las calles de las ciudades más importantes de San Luis Potosí. Sin embargo, preocupa que la violencia escale y afecte a sectores productivos del estado, como fue el caso del presidente de Coparmex, Julio César Galindo, porque ya no se trata de pugnas entre organizaciones del crimen organizado sino de acciones directamente destinadas a minar la fuerza del gobierno y a tener consecuencias en momentos electorales. Evidentemente la respuesta de la fiscalía tiene que ser en el campo de la procuración de justicia sin tomar en cuenta cualquier otra consideración… Alguien debe indagar dos casos políticos importantes: 1.- Alguien dispuso que se hicieran llamadas telefónicas a una gran cantidad de domicilios de la capital potosina la madrugada del pasado jueves, haciendo referencia al candidato de Morena a reelegirse como alcalde por la capital, Xavier Nava… Y 2.- ¿cómo fue que vendedores ambulantes cerraron los carriles centrales de la diagonal Salvador Nava unas horas antes de que ocurriera el despegue de campaña de Octavio Pedroza Gaitán, cuyo acceso principal es precisamente esa vía rápida?... Si no entienden que esa forma de hacer campaña es absolutamente condenable, la autoridad debe hacerles entenderlo… “San Luis Potosí no está condenado a elegir entre los malos y los peores, habemos ciudadanas y ciudadanos dispuestos a trabajar para acabar con la violencia que todos los días nos arranca a nuestras personas queridas, que impide a mujeres transitar seguras por las calles”, dijo Adriana Marvely Costanzo, al iniciar su campaña electoral por la gubernatura del Estado este viernes en un acto público en la explanada del Teatro de la Paz, en la capital potosina… A través de un mensaje difundido en redes sociales a las 00:01 horas de ayer, 5 de marzo, Octavio Pedroza Gaitán, candidato de la Coalición “Sí por San Luis Potosí”, integrada por los partidos PAN, PRI, PRD y Conciencia Popular, arrancó con su campaña política. “Vamos sin riesgo y sin miedo, vamos unidas y unidos, vamos a la segura”, recalcó… Por su parte, la doctora Mónica Liliana Rangel dijo en Tamazunchale que ofrece una administración austera y sin corrupción “por eso estoy aquí, en Tamazunchale, ya se siente el miedo a perder los privilegios, el miedo a perder el poder, el miedo al cambio”… La dirigente nacional del Partido Verde, Karen Castrejón Trujillo, y Ángel Benjamín robles en presentación del líder del Partido del Trabajo, Alberto Anaya, dijeron que Ricardo Gallardo “tiene las habilidades necesarias para marcar un triunfo histórico”. Su declaración fue en el madrugador mitin de inicio de campaña del Pollo… José Luis Romero Calzada debe sentirse satisfecho con lo apuntado en un espectacular que dice “Juntos hagamos TODO MAL”… Así ¿cómo?... Hasta el terrible Manolo se santiguó… HASTA LA PRÓXIMA

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx

Despegan campañas y ofrecen “seguridad”

Aunque estaba cantado el tema de la seguridad pública en el territorio potosino, los nueve candidatos a la gubernatura de San Luis Potosí incluyeron promesas que tienen distintos enfoques. Van desde los muy generales como la recuperación de la tranquilidad en las calles, hasta la aplicación de la justicia sin permitir la impunidad como sello de la administración estatal.

A la hora de los despegues, los nueve aspirantes a gobernador para el sexenio que se inicia el próximo mes de septiembre, las diferencias estuvieron en el campo de la organización, de la forma de difundir los actos y la calidad de los discursos. Hubo actos discretos que tuvieron escasa asistencia con motivo de las regulaciones sanitarias para evitar contagios de COVID 19 y los hubo con la asistencia de una cantidad regular de asistentes. En todos los casos tuvieron a su disposición los recursos de las redes sociales y pudieron difundir sus mensajes pese a que es difícil evaluar la cantidad de receptores presenciales y de quienes esperaban enterarse a través de las páginas y portales que los replicaron enseguida. El interés del electorado en los arranques de campaña no significó ninguna sorpresa. Difícil acreditar que la inmediatez del inicio marcado por el primer minuto de ayer haya sido el punto fuerte con que los candidatos quisieron impactar en la percepción ciudadana. La condición sanitaria sirve de explicación y al mismo tiempo de aceptación de que las grandes concentraciones no fueron posibles. Pero no solamente el tiempo fue un elemento de posible impacto en la ciudadanía. También lo fue la temática de su oferta y los hechos delictivos más recientes les sirvieron de base para iniciar la oferta que su trabajo tiene. Ayer no fue posible percibir la credibilidad que el ciudadano concedió al discurso de los candidatos. La improvisación fue la causa compartida para ello.

Pese a la importancia que tiene el acto de inicio entre los augurios que es posible fincar, no estamos todavía en condiciones de conceder ventajas definitivas. Sin embargo, es un hecho que los programas de actividades no estaban preparados. Seria éste el segundo aspecto negativo de las campañas. Gallardo demostró un mayor sentido de la organización y un mejor control de su equipo de campaña. No obstante, la doctora Mónica Liliana Rangel hizo gala de una oratoria poco usual entre los profesionistas de la medicina. En el terreno de la oratoria tampoco fueron menos los recursos demostrados por Octavio Pedroza Gaitán y Juan Carlos Machinena Morales al referirse al tema de la seguridad que compartieron los nueve aspirantes. Marvely Costanzo tuvo expresiones frente al Teatro de La Paz en un lenguaje coloquial. Ciertamente abordó el tema del momento y se esforzó por coincidir con las expresiones más escuchadas en torno a los casos recientes en el estado. Es una verdad que Javier Rico Ávalos, Adrián Esper Cárdenas, José Luis Romero y Arturo Segoviano García han desprotegido sus espacios de divulgación. Esta campaña apenas empieza y los adjetivos todavía no se sustancian.

POLÍTICA DE SALUD, O SALUD POLÍTICA

Es fácil comprender las razones por las que el cuidado de la salud es un tema especialmente vinculado al ejercicio del poder político. En México, la atención médica y el otorgamiento de medicinas es, para decirlo pronto, asunto crucial para los tres niveles de gobierno. El Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” vive momentos difíciles para la prestación de esos servicios a la gente de menos recursos. No obstante que el derecho a la salud es una de las varias garantías constitucionales, la situación por la que atraviesa el nosocomio parece inexplicable. No cuadran la calidad de sus servicios con los aprietos económicos que lo aquejan, a pesar de la obligación del gobierno federal para destinarle los recursos necesarios para conservarlo con salud financiera. Evidentemente el Hospital Central es el de mayor capacidad con que cuenta el estado y el único capaz de prestar atención a los habitantes de por lo menos tres entidades del noreste y centro del país, amén de funcionar como hospital-escuela con la presencia cotidiana de alumnos de la facultad de medicina de la UASLP. Las especificaciones técnicas y su equipamiento le determinan también la necesidad de contar con recursos para su operación. ¿Qué sucede entonces?

La concurrencia de enfermos que demandan atención del tercer nivel o de alta especialidad procedentes de entidades vecinas representa, además, la necesidad de operar financieramente la carga del Hospital Central de manera que su gasto se distribuya entre los presupuestos federales asignados a cada uno de los estados de origen de la población que demanda el servicio. O, en todo caso, que el gobierno federal asuma que el gasto que representa un hospital de tal magnitud es parte de un presupuesto sin reducciones de ninguna naturaleza.

La salida de personal médico y de enfermeras que enfrentan serias dificultades para dar una atención de mínima calidad, representa la voz de una gran cantidad de mexicanos que no tienen otra opción que venir al Central en busca de su salud como parte de las garantías a que tiene derecho todo mexicano. El reclamo de los profesionistas nada tiene que ver con las politiquerías electorales, ni debe prestarse al juego entre políticos que buscan especular para su beneficio. Cualquiera que sea la razón del abandono federal de sus obligaciones para atender el ramo de la salud de los habitantes de la zona atendida por el “Ignacio Morones Prieto”, es urgente que se resuelvan los problemas actuales y se cumpla con las disposiciones constitucionales.

El Hospital Central no ofrece causa alguna para ser involucrado en decisiones que no sean las del estricto criterio médico para garantizar la salud de sus pacientes. Cuando está en juego la vida de las personas, digo, las indecisiones y los pretextos no son una respuesta satisfactoria para nadie. No hay nada que negociar, no hay otra negociación que el cumplimiento de lo dispuesto en las normas nacionales. Si esto no se llega a entender, la respuesta popular puede ser el enojo.

EL COTARRO POLÍTICO

Mientras la escalada de violencia en el estado fue numérica y no afectó los niveles de relevancia de las personas afectadas, nadie parecía preocuparse por lo que pasaba en las calles de las ciudades más importantes de San Luis Potosí. Sin embargo, preocupa que la violencia escale y afecte a sectores productivos del estado, como fue el caso del presidente de Coparmex, Julio César Galindo, porque ya no se trata de pugnas entre organizaciones del crimen organizado sino de acciones directamente destinadas a minar la fuerza del gobierno y a tener consecuencias en momentos electorales. Evidentemente la respuesta de la fiscalía tiene que ser en el campo de la procuración de justicia sin tomar en cuenta cualquier otra consideración… Alguien debe indagar dos casos políticos importantes: 1.- Alguien dispuso que se hicieran llamadas telefónicas a una gran cantidad de domicilios de la capital potosina la madrugada del pasado jueves, haciendo referencia al candidato de Morena a reelegirse como alcalde por la capital, Xavier Nava… Y 2.- ¿cómo fue que vendedores ambulantes cerraron los carriles centrales de la diagonal Salvador Nava unas horas antes de que ocurriera el despegue de campaña de Octavio Pedroza Gaitán, cuyo acceso principal es precisamente esa vía rápida?... Si no entienden que esa forma de hacer campaña es absolutamente condenable, la autoridad debe hacerles entenderlo… “San Luis Potosí no está condenado a elegir entre los malos y los peores, habemos ciudadanas y ciudadanos dispuestos a trabajar para acabar con la violencia que todos los días nos arranca a nuestras personas queridas, que impide a mujeres transitar seguras por las calles”, dijo Adriana Marvely Costanzo, al iniciar su campaña electoral por la gubernatura del Estado este viernes en un acto público en la explanada del Teatro de la Paz, en la capital potosina… A través de un mensaje difundido en redes sociales a las 00:01 horas de ayer, 5 de marzo, Octavio Pedroza Gaitán, candidato de la Coalición “Sí por San Luis Potosí”, integrada por los partidos PAN, PRI, PRD y Conciencia Popular, arrancó con su campaña política. “Vamos sin riesgo y sin miedo, vamos unidas y unidos, vamos a la segura”, recalcó… Por su parte, la doctora Mónica Liliana Rangel dijo en Tamazunchale que ofrece una administración austera y sin corrupción “por eso estoy aquí, en Tamazunchale, ya se siente el miedo a perder los privilegios, el miedo a perder el poder, el miedo al cambio”… La dirigente nacional del Partido Verde, Karen Castrejón Trujillo, y Ángel Benjamín robles en presentación del líder del Partido del Trabajo, Alberto Anaya, dijeron que Ricardo Gallardo “tiene las habilidades necesarias para marcar un triunfo histórico”. Su declaración fue en el madrugador mitin de inicio de campaña del Pollo… José Luis Romero Calzada debe sentirse satisfecho con lo apuntado en un espectacular que dice “Juntos hagamos TODO MAL”… Así ¿cómo?... Hasta el terrible Manolo se santiguó… HASTA LA PRÓXIMA

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx