/ sábado 16 de febrero de 2019

Solarium

La pobreza es causa de la austeridad

Yo no sé si todos los conflictos, problemas, diferencias y controversias que enfrenta el gobierno federal sean resultado de la política de austeridad que impulsa el presidente López Obrador. Pero así parece.

Y no lo sé porque nadie se ha encargado de explicar las causas de la austeridad. Si se le llama austeridad al reacomodo de las partidas presupuestales del gobierno federal para restar volúmenes de dinero a unas y asignarlos a otras, trataría de entenderlo, pero no.

Si la austeridad es producto de la falta de dinero, no se justifican ni se explican los yerros que significan los pagos que resultan obligados tras la suspensión del muy conocido caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, o de ofrecer en venta el avión presidencial aunque de antemano se sepa que será una pérdida.

La percepción más próxima al comportamiento del gobierno federal en estos primeros días del sexenio en curso, es la confusión.

Cuantifica el valor de las gasolinas y otros combustibles que dejaron de robar los huachicoleros y considera que es un ahorro.

No he escuchado a ningún ciudadano que llame ahorro al valor de las cosas que no le han robado porque puso un candado en la puerta. Más bien, dejó de perder.

En cambio, no cuantifica el monto de las pérdidas ocasionadas por el cierre de los ductos que abastecen las entidades en que tuvieron problemas de abasto de combustibles y perdieron, ellos sí, al no poder movilizar mercancías hacia los centros de consumo.

Frente al reclamo de las madres y padres de familia porque se cambió el mecanismo de subsidios a la atención de niños en guarderías comunitarias, explica el presidente López Obrador que se detectaron irregularidades en la operación de una cantidad imprecisa de ellas, pero no extiende su exposición al motivo, causa o razón por la que los responsables permanecen sin castigo.

Elimina más de 500 millones de pesos del presupuesto de INEGI para 2019 y la institución plantea una controversia constitucional en la Suprema Corte en defensa de sus funciones y la autonomía de su operación. Entre tanto, la renovación de los miembros de la Comisión Reguladora de Energía se convierte en motivo para enfrentar al actual titular de la misma porque tachó de ineptos a los propuestos para sucederlo.

La política de austeridad federal tiene luces y contraluces. No obstante, no se ve claro el panorama nacional. Los estados del país sufren los efectos de esta situación. El gobierno potosino planteó una reducción de más del 50 por ciento al invernadero Santa Rita, pese a que es su caja chica por las exportaciones que realiza de diversos productos agrícolas, por ejemplo.

Otro ejemplo es el subsidio al Hospital Central Ignacio Morones Prieto que este año se reduce en 13 por ciento con relación al año pasado. Si bien la construcción de su nuevo edificio es una inversión federal importante, el costo de su operación sufre por la reducción anunciada.

Sin embargo, la percepción que produce el gobierno estatal es de una entidad limitada por la insuficiencia de ingresos. La reducción del fondo minero a los ayuntamientos que tienen esa actividad como preponderante, reduce su capacidad de operación y obliga a sus alcaldes a gestionar apoyos excepcionales ante la federación y el gobierno estatal. Lo deseable es que el panorama comience a aclararse.

CINCUENTA Y DOS RINCONES DE POBREZA

Pocas veces en la vida de los habitantes de las cabeceras municipales de San Luis Potosí capital, Matehuala, Rioverde, Ciudad Valles, Tamazunchale y Soledad, llega a cruzarse por su mente la interrogante sobre cómo sobreviven los residentes en las 52 cabeceras municipales restantes. Ni siquiera los principales funcionarios de las dependencias estatales o federales llegan a conocer a fondo las condiciones de vida de esa mitad de la población que subsiste gracias a un gran remedio: las remesas de dólares que envían sus parientes radicados en algún lugar de los Estados Unidos.

No tenemos un radicado en aquel país por uno que permanece en su terruño, pero lo que envían los que viven en el vecino país es suficiente para mantener una especie de economía mínima que es favorecida en varias actividades, especialmente las comerciales. A eso se debe la dolarización de varios de nuestros municipios y tal vez hayamos encontrado un nivel de equilibrio entre los que salen en busca de fortuna a otros lugares y quienes son necesarios para conservar activo a su municipio.

No existe, claro está, una visión particular de cada uno de los municipios encasillados en la pobreza porque todavía no gozan del apoyo de los gobiernos federal y estatal para sumarse a la producción agrícola o ganadera y tampoco existe el entorno de una industria que aproveche lo que las primeras envían al mercado. La economía de subsistencia no logra estabilizar el aprovechamiento de las condiciones favorables en la Huasteca, por ejemplo, y los gobiernos municipales no disponen de las estructuras necesarias para impulsar su desarrollo.

No obstante, ha permanecido una red de controles que ha sido tendida por los partidos políticos para ofrecer opciones que ilusionan a los habitantes y les hacen creer que todavía se puede, nomás con que voten por sus candidatos. No hay excepciones. Todos los partidos políticos transitan en caravana por los municipios con la promesa de que “ya falta menos” aunque el fin de la pobreza esté muy distante.

Las dos caras que ofrece la entidad con relación al desarrollo nos lleva a considerar que existe un profundo desequilibrio económico y social que jamás ha sido valorado por los partidos políticos y luego por los gobernantes que de ellos emanan, lo cual configura un negro panorama para los habitantes de cada uno de los 52 municipios pobres del estado. La actuación gubernamental siempre lo hace con la emergencia al lado. Es muy difícil considerar un plan de desarrollo en municipios como el de Vanegas, cuya superficie territorial es casi igual a la del estado de Aguascalientes, pero donde solamente viven algo más de siete mil habitantes.

El ascenso al poder ha sido, en San Luis, producto de consejas entre políticos encumbrados en la federación y los políticos empoderados en el estado. Ninguno se ha propuesto realizar un programa que desarrolle las actividades en cada municipio y se concretan a sobrellevar la responsabilidad de gobernar con limitaciones. Los desequilibrios resultantes han sido aliviados parcialmente por las remesas. Mil millones de dólares al año que, convertidos a pesos, representan cerca de veinte mil millones de pesos, casi la mitad del presupuesto que opera el gobierno del estado, y sin embargo la pobreza extrema subsiste.

EL COTARRO POLÍTICO

El Tesorero Municipal, Rodrigo Portilla Díaz, reveló que avanzan las negociaciones con la empresa concesionaria del servicio de recolección de basura, por lo que se espera en los próximos días alcanzar un convenio para pagar en mensualidades el adeudo de pasadas administraciones, el cual alcanza los 83 millones de pesos, a fin de evitar un deterioro en las finanzas del Ayuntamiento.Destacó la disposición de los directivos de la compañía conciliar los saldos, determinar el pasivo y “acordar el pago a lo largo de 24 meses de esa millonaria deuda, a la par de continuar con los compromisos económicos que mes con mes se deben liquidar por la recolección, transferencia y la disposición final de los residuos domésticos”… El Hospital Central es uno de los centros más importantes del país al contar con 96 especialidades y 4 servicios (Clínica de Heridas, Clínica de catéter de Acceso Central, Clínica de Displasias y Clínica de epilepsia); que lo convierte en el único en el país que cuenta con este número de especialidades y subespecialidades.“El nuevo Hospital Central va muy bien y avanzando, para finales de este año estaremos en pruebas de lo que serán los servicios de la torre médica, para atender un flujo cercano de 4 mil 500 usuarios diariamente”, explicó la Secretaria de Salud, doctora Mónica Liliana Rangel Martínez… El doctor Francisco Alejo González, Oncólogo del Hospital Central, expuso ayer que

“El cáncer en la Infancia es la segunda causa de muerte en niños y niñas de 4 a doce años de edad y la probabilidad de Supervivencia en México es de un 60 por ciento, de ahí el llamado a que los papás, familiares, maestros, médicos estemos atentos de los cambios del cuerpo de los pequeños para detectar y diagnosticar en tiempo el tratamiento, también aconsejó, que no se debe faltar a las consultas médicas desde que están recién nacidos porque mes con mes se van evaluando los cambios de su crecimiento”. Ayer fue “día del cáncer infantil”… Lo que nunca, el terrible Manolo ha llegado amoroso, simpático, accesible ¿por qué será?... HASTA LA PRÓXIMA

mail:

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx

La pobreza es causa de la austeridad

Yo no sé si todos los conflictos, problemas, diferencias y controversias que enfrenta el gobierno federal sean resultado de la política de austeridad que impulsa el presidente López Obrador. Pero así parece.

Y no lo sé porque nadie se ha encargado de explicar las causas de la austeridad. Si se le llama austeridad al reacomodo de las partidas presupuestales del gobierno federal para restar volúmenes de dinero a unas y asignarlos a otras, trataría de entenderlo, pero no.

Si la austeridad es producto de la falta de dinero, no se justifican ni se explican los yerros que significan los pagos que resultan obligados tras la suspensión del muy conocido caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, o de ofrecer en venta el avión presidencial aunque de antemano se sepa que será una pérdida.

La percepción más próxima al comportamiento del gobierno federal en estos primeros días del sexenio en curso, es la confusión.

Cuantifica el valor de las gasolinas y otros combustibles que dejaron de robar los huachicoleros y considera que es un ahorro.

No he escuchado a ningún ciudadano que llame ahorro al valor de las cosas que no le han robado porque puso un candado en la puerta. Más bien, dejó de perder.

En cambio, no cuantifica el monto de las pérdidas ocasionadas por el cierre de los ductos que abastecen las entidades en que tuvieron problemas de abasto de combustibles y perdieron, ellos sí, al no poder movilizar mercancías hacia los centros de consumo.

Frente al reclamo de las madres y padres de familia porque se cambió el mecanismo de subsidios a la atención de niños en guarderías comunitarias, explica el presidente López Obrador que se detectaron irregularidades en la operación de una cantidad imprecisa de ellas, pero no extiende su exposición al motivo, causa o razón por la que los responsables permanecen sin castigo.

Elimina más de 500 millones de pesos del presupuesto de INEGI para 2019 y la institución plantea una controversia constitucional en la Suprema Corte en defensa de sus funciones y la autonomía de su operación. Entre tanto, la renovación de los miembros de la Comisión Reguladora de Energía se convierte en motivo para enfrentar al actual titular de la misma porque tachó de ineptos a los propuestos para sucederlo.

La política de austeridad federal tiene luces y contraluces. No obstante, no se ve claro el panorama nacional. Los estados del país sufren los efectos de esta situación. El gobierno potosino planteó una reducción de más del 50 por ciento al invernadero Santa Rita, pese a que es su caja chica por las exportaciones que realiza de diversos productos agrícolas, por ejemplo.

Otro ejemplo es el subsidio al Hospital Central Ignacio Morones Prieto que este año se reduce en 13 por ciento con relación al año pasado. Si bien la construcción de su nuevo edificio es una inversión federal importante, el costo de su operación sufre por la reducción anunciada.

Sin embargo, la percepción que produce el gobierno estatal es de una entidad limitada por la insuficiencia de ingresos. La reducción del fondo minero a los ayuntamientos que tienen esa actividad como preponderante, reduce su capacidad de operación y obliga a sus alcaldes a gestionar apoyos excepcionales ante la federación y el gobierno estatal. Lo deseable es que el panorama comience a aclararse.

CINCUENTA Y DOS RINCONES DE POBREZA

Pocas veces en la vida de los habitantes de las cabeceras municipales de San Luis Potosí capital, Matehuala, Rioverde, Ciudad Valles, Tamazunchale y Soledad, llega a cruzarse por su mente la interrogante sobre cómo sobreviven los residentes en las 52 cabeceras municipales restantes. Ni siquiera los principales funcionarios de las dependencias estatales o federales llegan a conocer a fondo las condiciones de vida de esa mitad de la población que subsiste gracias a un gran remedio: las remesas de dólares que envían sus parientes radicados en algún lugar de los Estados Unidos.

No tenemos un radicado en aquel país por uno que permanece en su terruño, pero lo que envían los que viven en el vecino país es suficiente para mantener una especie de economía mínima que es favorecida en varias actividades, especialmente las comerciales. A eso se debe la dolarización de varios de nuestros municipios y tal vez hayamos encontrado un nivel de equilibrio entre los que salen en busca de fortuna a otros lugares y quienes son necesarios para conservar activo a su municipio.

No existe, claro está, una visión particular de cada uno de los municipios encasillados en la pobreza porque todavía no gozan del apoyo de los gobiernos federal y estatal para sumarse a la producción agrícola o ganadera y tampoco existe el entorno de una industria que aproveche lo que las primeras envían al mercado. La economía de subsistencia no logra estabilizar el aprovechamiento de las condiciones favorables en la Huasteca, por ejemplo, y los gobiernos municipales no disponen de las estructuras necesarias para impulsar su desarrollo.

No obstante, ha permanecido una red de controles que ha sido tendida por los partidos políticos para ofrecer opciones que ilusionan a los habitantes y les hacen creer que todavía se puede, nomás con que voten por sus candidatos. No hay excepciones. Todos los partidos políticos transitan en caravana por los municipios con la promesa de que “ya falta menos” aunque el fin de la pobreza esté muy distante.

Las dos caras que ofrece la entidad con relación al desarrollo nos lleva a considerar que existe un profundo desequilibrio económico y social que jamás ha sido valorado por los partidos políticos y luego por los gobernantes que de ellos emanan, lo cual configura un negro panorama para los habitantes de cada uno de los 52 municipios pobres del estado. La actuación gubernamental siempre lo hace con la emergencia al lado. Es muy difícil considerar un plan de desarrollo en municipios como el de Vanegas, cuya superficie territorial es casi igual a la del estado de Aguascalientes, pero donde solamente viven algo más de siete mil habitantes.

El ascenso al poder ha sido, en San Luis, producto de consejas entre políticos encumbrados en la federación y los políticos empoderados en el estado. Ninguno se ha propuesto realizar un programa que desarrolle las actividades en cada municipio y se concretan a sobrellevar la responsabilidad de gobernar con limitaciones. Los desequilibrios resultantes han sido aliviados parcialmente por las remesas. Mil millones de dólares al año que, convertidos a pesos, representan cerca de veinte mil millones de pesos, casi la mitad del presupuesto que opera el gobierno del estado, y sin embargo la pobreza extrema subsiste.

EL COTARRO POLÍTICO

El Tesorero Municipal, Rodrigo Portilla Díaz, reveló que avanzan las negociaciones con la empresa concesionaria del servicio de recolección de basura, por lo que se espera en los próximos días alcanzar un convenio para pagar en mensualidades el adeudo de pasadas administraciones, el cual alcanza los 83 millones de pesos, a fin de evitar un deterioro en las finanzas del Ayuntamiento.Destacó la disposición de los directivos de la compañía conciliar los saldos, determinar el pasivo y “acordar el pago a lo largo de 24 meses de esa millonaria deuda, a la par de continuar con los compromisos económicos que mes con mes se deben liquidar por la recolección, transferencia y la disposición final de los residuos domésticos”… El Hospital Central es uno de los centros más importantes del país al contar con 96 especialidades y 4 servicios (Clínica de Heridas, Clínica de catéter de Acceso Central, Clínica de Displasias y Clínica de epilepsia); que lo convierte en el único en el país que cuenta con este número de especialidades y subespecialidades.“El nuevo Hospital Central va muy bien y avanzando, para finales de este año estaremos en pruebas de lo que serán los servicios de la torre médica, para atender un flujo cercano de 4 mil 500 usuarios diariamente”, explicó la Secretaria de Salud, doctora Mónica Liliana Rangel Martínez… El doctor Francisco Alejo González, Oncólogo del Hospital Central, expuso ayer que

“El cáncer en la Infancia es la segunda causa de muerte en niños y niñas de 4 a doce años de edad y la probabilidad de Supervivencia en México es de un 60 por ciento, de ahí el llamado a que los papás, familiares, maestros, médicos estemos atentos de los cambios del cuerpo de los pequeños para detectar y diagnosticar en tiempo el tratamiento, también aconsejó, que no se debe faltar a las consultas médicas desde que están recién nacidos porque mes con mes se van evaluando los cambios de su crecimiento”. Ayer fue “día del cáncer infantil”… Lo que nunca, el terrible Manolo ha llegado amoroso, simpático, accesible ¿por qué será?... HASTA LA PRÓXIMA

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pedrocervantesroque@yahoo.com.mx