DIOS CRISTO JESUS en Romanos 5:12 de la Biblia nos invita a considerar lo siguiente: “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”.
Cristo con lo anterior nos retrotrae a la advertencia dada en Génesis 2:16-17 por Dios en el huerto Edén a Adán, en el inicio del género humano, al decirle: “De todo árbol del huerto podrás comer, mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás”, lo cual fue extensivo para Eva, según Génesis 3:2-3.
Sin embargo, Adán y Eva desobedecieron a Dios y pecaron al comer el fruto del árbol prohibido, según Génesis 3:1-24, muriendo ellos de inmediato en lo espiritual, con lo cual con lo cual Dios los había creado a su imagen y semejanza, así como después murieron en su cuerpo físico para volver al polvo de la tierra.
Lo anterior, por ende, conforme a Romanos 5:12, no presenta ninguna variante para nosotros como género humano, porque después de Adán y Eva, según la declaración divina, la muerte espiritual y física pasó a todos los hombres porque todos hemos pecado.
Pero así como Adán y Eva, antes de pecar tenían perfección espiritual, así también todos los seres humanos posteriores a ellos, incluidos nosotros aquí ahora, desde el vientre de nuestras madres, contamos con todas las riquezas espirituales que Dios nos regala en nuestro primer ciclo de vida como niños, por propia declaración de Jesús, al decir: “Dejad a los niños venid a mí; porque de ellos es el Reino de los Cielos”, según Mateo 19:14; pero perdemos esta perfección espiritual por causa del pecado, cuando llegamos a la juventud, según Génesis 8:21, y entonces, sólo Cristo nos puede salvar del pecado, según Juan 3:16.
Estimado Lector: Cristo te llama a abandonar el mundo de muerte del pecado, al tenerlo como tu Salvador, si sólo le dices con valentía y reflexión: “Mi Señor Dios Cristo, ¡SALVAME!, me arrepiento ante Ti de mis pecados, perdóname, y límpiame con tu Sangre Divina derramada en la cruz del Calvario, creo en Ti y te recibo como Unico, Suficiente y Perfecto Salvador Personal”.
Dios los bendiga y si El permite continuaremos el viernes siguiente. Mi teléfono es el 444-815-39-73.