/ domingo 13 de diciembre de 2020

Imagen y estilo

Una festividad diferente

Verdaderamente impactante fue la celebración de un aniversario más de la aparición de nuestra Madre Santísima Virgen de Guadalupe, patrona de México, la virgen Morena más querida en todo el mundo, la madre de todas las madres. La virgen milagrosa a la que todos acudimos cuando tenemos algo que pedirle, que solicitarle, que agradecerle.

Impresionante ver la transmisión de las tradicionales mañanitas que siempre año con año, desde que tengo uso de razón veía con mis padres, ahora con mis hijas, los artistas alrededor del altar en la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México, interpretando diferentes canciones, con mariachis, ataviados de gala para llevarle a la virgen morena su felicitación.

Ahora, vimos cómo las autoridades federales decidieron bloquear las calles aledañas a la basílica con el fin de evitar el incremento en contagios por el Covid19, fue verdaderamente impactante ver el inmenso atrio completamente vacío, ni un alma se veía, cuando en años anteriores siempre eran peregrinaciones, multitudes abarrotando la basílica.

Los artistas cantaron igual, dentro del recinto Guadalupano, programas grabados, como siempre Televisa, TV Azteca y demás, pero ahora se notó la falta de gente, la falta de feligreses concentrados dentro de la basílica, todo vacío.

Esto hizo que nuestro corazón se apachurrara, que se sintiera un ambiente diferente, una festividad completamente distinta a otros años, por culpa de un Chino de Huwuan (con todo respeto para la comunidad China), que se le ocurrió comprar un murciélago contaminado para hacerse un caldito y que comenzó a expandir esta pandemia a nivel mundial y que no tiene para cuando terminarse.

Así, todos los mexicanos festejamos desde nuestros hogares a nuestra Virgen de Guadalupe, algunos tristes, otros agradecidos por estar con salud y trabajo, algunos más desesperados, por tener a familiares y amistades internados en hospitales por estar padeciendo del Covid19 y los más afectados, quienes perdieron a varios familiares a consecuencia de esta pandemia y que ni siquiera tuvieron la oportunidad de velarlos, ni una misa y mucho menos despedirlos.

Sin duda alguna y sin temor a equivocarme, todos pedimos a la hora de la misa concelebrada salud, trabajo y que esta pandemia termine pronto, que volvamos a la normalidad, pedimos por los médicos, enfermeras, quienes están en la primera línea del contagio. Todo México unido en un solo rezo!

Me despido con la siguiente reflexión: “pongamos en manos de Dios nuestro Señor y la Virgen de Guadalupe, nuestra seguridad. Doy gracias al Señor hoy y cada día de mi vida, pues ha puesto firmeza en mi corazón de que maravillosas cosas me sucederán… Confirmemos estos deseos en nuestra vida cada día. Que tengan una excelente semana. Y les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon

Una festividad diferente

Verdaderamente impactante fue la celebración de un aniversario más de la aparición de nuestra Madre Santísima Virgen de Guadalupe, patrona de México, la virgen Morena más querida en todo el mundo, la madre de todas las madres. La virgen milagrosa a la que todos acudimos cuando tenemos algo que pedirle, que solicitarle, que agradecerle.

Impresionante ver la transmisión de las tradicionales mañanitas que siempre año con año, desde que tengo uso de razón veía con mis padres, ahora con mis hijas, los artistas alrededor del altar en la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México, interpretando diferentes canciones, con mariachis, ataviados de gala para llevarle a la virgen morena su felicitación.

Ahora, vimos cómo las autoridades federales decidieron bloquear las calles aledañas a la basílica con el fin de evitar el incremento en contagios por el Covid19, fue verdaderamente impactante ver el inmenso atrio completamente vacío, ni un alma se veía, cuando en años anteriores siempre eran peregrinaciones, multitudes abarrotando la basílica.

Los artistas cantaron igual, dentro del recinto Guadalupano, programas grabados, como siempre Televisa, TV Azteca y demás, pero ahora se notó la falta de gente, la falta de feligreses concentrados dentro de la basílica, todo vacío.

Esto hizo que nuestro corazón se apachurrara, que se sintiera un ambiente diferente, una festividad completamente distinta a otros años, por culpa de un Chino de Huwuan (con todo respeto para la comunidad China), que se le ocurrió comprar un murciélago contaminado para hacerse un caldito y que comenzó a expandir esta pandemia a nivel mundial y que no tiene para cuando terminarse.

Así, todos los mexicanos festejamos desde nuestros hogares a nuestra Virgen de Guadalupe, algunos tristes, otros agradecidos por estar con salud y trabajo, algunos más desesperados, por tener a familiares y amistades internados en hospitales por estar padeciendo del Covid19 y los más afectados, quienes perdieron a varios familiares a consecuencia de esta pandemia y que ni siquiera tuvieron la oportunidad de velarlos, ni una misa y mucho menos despedirlos.

Sin duda alguna y sin temor a equivocarme, todos pedimos a la hora de la misa concelebrada salud, trabajo y que esta pandemia termine pronto, que volvamos a la normalidad, pedimos por los médicos, enfermeras, quienes están en la primera línea del contagio. Todo México unido en un solo rezo!

Me despido con la siguiente reflexión: “pongamos en manos de Dios nuestro Señor y la Virgen de Guadalupe, nuestra seguridad. Doy gracias al Señor hoy y cada día de mi vida, pues ha puesto firmeza en mi corazón de que maravillosas cosas me sucederán… Confirmemos estos deseos en nuestra vida cada día. Que tengan una excelente semana. Y les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon