/ domingo 14 de agosto de 2022

Imagen, Estilo y algo más | ¡¡¡98 años de vida!!!

¡¡¡Un cumpleaños mágico!!!

El día de hoy dedico este espacio a quien el día de ayer cumplió años. Un cumpleaños mágico, un cumpleaños excepcional. Ustedes se preguntarán porque? Simplemente porque a la persona que me refiero llegó a los 98 años de edad. Lúcida, sin enfermedades, con una mente brillante, con quien me paso horas y horas platicando de lo que vivió en su juventud, en su adolescencia, este día felicito con muchísimo cariño a Doña María Tránsito Palomera de González, a quien conozco desde que nací, gran amiga y pariente de mi madre, originaria también de Cihuatlán, Jalisco.

Felicito a sus hijos Lupita, Silvia, Luz del Carmen, Salvador y Manolo, quienes tienen la fortuna de contar con su madre, nietos y bisnietos, yernos y nueras. Una enorme bendición el llegar a los 98 años en perfecto estado de salud. Felicidades!!!

Doña María, casada con el Dr. Salvador González Moreno (q.e.p.d.) llegó el día de ayer a su cumpleaños número 98 con la alegría que siempre le ha caracterizado, pendiente de los temas políticos, de lo que sucede en el mundo, siempre atenta al acontecer diario.

Recuerda todos los tiempos vividos, uno a uno, mis cumpleaños, los de sus 5 hijos, los viajes realizados, los nombres de todos sus nietos y bisnietos, con quienes están casados, lo que hacen diariamente, recuerda todo, una memoria privilegiada, una mente brillante!

Hoy al dedicarle este espacio, no me queda más que agradecer su presencia, siempre sus oraciones, siempre su bendición, siempre deseando cosas buenas, siempre su sabio consejo. Gracias por todo y por tanto y estoy segura que llegará con esa sabiduría a los 100 años de edad.

Les comparto el siguiente texto que me envío mi querida amiga de la infancia Laurita Galván Aldrette y que dice lo siguiente:

Se titula: “HE APRENDIDO”

He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se puede amar, el resto depende de los otros.

He aprendido que se pueden requerir años para construir la confianza, y solo segundos para destruirla.

He aprendido que lo que realmente cuenta en la vida, no son las cosas que tengo alrededor, sino las personas.

He aprendido que no puedo compararme con lo mejor que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.

He aprendido que lo más importante no es lo que me sucede, sino lo que hago al respecto.

He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante, y que pueden ocasionar dolor toda una vida.

He aprendido que puedo llegar mucho más lejos, de lo que pensé posible.

He aprendido que soy responsable de lo que hago, cualquiera que sea el sentimiento que tenga.

He aprendido que si no controlo mis actitudes y mis emociones, ellas me controlan a mí.

He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidas, a pesar de las consecuencias.

He aprendido que el dinero es un pésimo indicador del valor de algo o de alguien.

He aprendido que a veces tengo el derecho de estar enojado, pero no el de ser cruel.

He aprendido que el verdadero amor y la verdadera amistad, continuarán creciendo a pesar de las distancias.

He aprendido que por más grande que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor.

He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias pueden haber influido en lo que soy, Yo soy el responsable de lo que llego a ser.

He aprendido que dos personas pueden mirar la misma cosa y ver algo totalmente diferente.

He aprendido que sin importar las circunstancias, cuando soy honesto conmigo mismo, llego más lejos en la vida.

He aprendido que es importante practicar para convertirme en la persona que quiero ser.

He aprendido que es mucho más fácil reaccionar que pensar … y más satisfactorio pensar que reaccionar.

Me despido con la siguiente reflexión: “Los milagros no ocurren cuando lloras, los milagros ocurren cuando crees!”. Que tengan una excelente semana y les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon

¡¡¡Un cumpleaños mágico!!!

El día de hoy dedico este espacio a quien el día de ayer cumplió años. Un cumpleaños mágico, un cumpleaños excepcional. Ustedes se preguntarán porque? Simplemente porque a la persona que me refiero llegó a los 98 años de edad. Lúcida, sin enfermedades, con una mente brillante, con quien me paso horas y horas platicando de lo que vivió en su juventud, en su adolescencia, este día felicito con muchísimo cariño a Doña María Tránsito Palomera de González, a quien conozco desde que nací, gran amiga y pariente de mi madre, originaria también de Cihuatlán, Jalisco.

Felicito a sus hijos Lupita, Silvia, Luz del Carmen, Salvador y Manolo, quienes tienen la fortuna de contar con su madre, nietos y bisnietos, yernos y nueras. Una enorme bendición el llegar a los 98 años en perfecto estado de salud. Felicidades!!!

Doña María, casada con el Dr. Salvador González Moreno (q.e.p.d.) llegó el día de ayer a su cumpleaños número 98 con la alegría que siempre le ha caracterizado, pendiente de los temas políticos, de lo que sucede en el mundo, siempre atenta al acontecer diario.

Recuerda todos los tiempos vividos, uno a uno, mis cumpleaños, los de sus 5 hijos, los viajes realizados, los nombres de todos sus nietos y bisnietos, con quienes están casados, lo que hacen diariamente, recuerda todo, una memoria privilegiada, una mente brillante!

Hoy al dedicarle este espacio, no me queda más que agradecer su presencia, siempre sus oraciones, siempre su bendición, siempre deseando cosas buenas, siempre su sabio consejo. Gracias por todo y por tanto y estoy segura que llegará con esa sabiduría a los 100 años de edad.

Les comparto el siguiente texto que me envío mi querida amiga de la infancia Laurita Galván Aldrette y que dice lo siguiente:

Se titula: “HE APRENDIDO”

He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se puede amar, el resto depende de los otros.

He aprendido que se pueden requerir años para construir la confianza, y solo segundos para destruirla.

He aprendido que lo que realmente cuenta en la vida, no son las cosas que tengo alrededor, sino las personas.

He aprendido que no puedo compararme con lo mejor que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.

He aprendido que lo más importante no es lo que me sucede, sino lo que hago al respecto.

He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante, y que pueden ocasionar dolor toda una vida.

He aprendido que puedo llegar mucho más lejos, de lo que pensé posible.

He aprendido que soy responsable de lo que hago, cualquiera que sea el sentimiento que tenga.

He aprendido que si no controlo mis actitudes y mis emociones, ellas me controlan a mí.

He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidas, a pesar de las consecuencias.

He aprendido que el dinero es un pésimo indicador del valor de algo o de alguien.

He aprendido que a veces tengo el derecho de estar enojado, pero no el de ser cruel.

He aprendido que el verdadero amor y la verdadera amistad, continuarán creciendo a pesar de las distancias.

He aprendido que por más grande que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor.

He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias pueden haber influido en lo que soy, Yo soy el responsable de lo que llego a ser.

He aprendido que dos personas pueden mirar la misma cosa y ver algo totalmente diferente.

He aprendido que sin importar las circunstancias, cuando soy honesto conmigo mismo, llego más lejos en la vida.

He aprendido que es importante practicar para convertirme en la persona que quiero ser.

He aprendido que es mucho más fácil reaccionar que pensar … y más satisfactorio pensar que reaccionar.

Me despido con la siguiente reflexión: “Los milagros no ocurren cuando lloras, los milagros ocurren cuando crees!”. Que tengan una excelente semana y les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon