/ domingo 3 de junio de 2018

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¡DESCANSE EN PAZ MONSEÑOR ARTURO ANTONIO SYMANSKI RAMIREZ!

¡QUERERNOS MÁS A NOSOTROS MISMOS!

Envío mis más sinceras condolencias al Arzobispado de San Luis Potosí, familiares, amigos, sacerdotes, seminaristas y monjitas que le cuidaban, por el sensible fallecimiento de nuestro Arzobispo Emérito Monseñor Don Arturo Antonio Symanski Ramírez, Dios lo tenga en su santa gloria y luzca para él la luz perpetua. Descanse en paz.

Les comparto el siguiente pensamiento escrito por Charles Chaplin, titulado “querernos más a nosotros mismos”:

Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene nombre… autoestima.


Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no son sino señales de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es… autenticidad.


Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. Hoy sé que eso se llama… madurez.


Cuando me amé de verdad, comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación o a una persona solo para alcanzar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o que la persona (tal vez yo mismo) no está preparada. Hoy sé que el nombre de eso es… respeto.


Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas y situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. Al principio, mi razón llamó egoísmo a esa actitud. Hoy sé que se llama… amor hacia uno mismo.


Cuando me amé de verdad, dejé de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. Hoy sé, que eso es… simplicidad.


Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. Así descubrí la… humildad.


Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama… plenitud.


Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, es una valiosa aliada. Y esto es… ¡saber vivir!


No debemos tener miedo de cuestionarnos… Hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas. Charles Chaplin.


Finalmente continúan con gran descredito de unos y de otros las campañas políticas. Estamos a muy pocos días de las elecciones, pensemos y reflexionemos muy bien a quienes vamos a elegir con nuestro voto. Recordemos que el voto es libre secreto y sobre todo razonado.


¡Que tengan una excelente semana y tratemos todos de ser mejores y positivos! Les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon





¡DESCANSE EN PAZ MONSEÑOR ARTURO ANTONIO SYMANSKI RAMIREZ!

¡QUERERNOS MÁS A NOSOTROS MISMOS!

Envío mis más sinceras condolencias al Arzobispado de San Luis Potosí, familiares, amigos, sacerdotes, seminaristas y monjitas que le cuidaban, por el sensible fallecimiento de nuestro Arzobispo Emérito Monseñor Don Arturo Antonio Symanski Ramírez, Dios lo tenga en su santa gloria y luzca para él la luz perpetua. Descanse en paz.

Les comparto el siguiente pensamiento escrito por Charles Chaplin, titulado “querernos más a nosotros mismos”:

Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene nombre… autoestima.


Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no son sino señales de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es… autenticidad.


Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. Hoy sé que eso se llama… madurez.


Cuando me amé de verdad, comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación o a una persona solo para alcanzar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o que la persona (tal vez yo mismo) no está preparada. Hoy sé que el nombre de eso es… respeto.


Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas y situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. Al principio, mi razón llamó egoísmo a esa actitud. Hoy sé que se llama… amor hacia uno mismo.


Cuando me amé de verdad, dejé de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. Hoy sé, que eso es… simplicidad.


Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. Así descubrí la… humildad.


Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama… plenitud.


Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, es una valiosa aliada. Y esto es… ¡saber vivir!


No debemos tener miedo de cuestionarnos… Hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas. Charles Chaplin.


Finalmente continúan con gran descredito de unos y de otros las campañas políticas. Estamos a muy pocos días de las elecciones, pensemos y reflexionemos muy bien a quienes vamos a elegir con nuestro voto. Recordemos que el voto es libre secreto y sobre todo razonado.


¡Que tengan una excelente semana y tratemos todos de ser mejores y positivos! Les invito para que nos escriban a la siguiente dirección: anavaldez@prodigy.net.mx y en Facebook: Facebook.com/anamariavaldezcastrejon, en twitter @anacastrejon