/ domingo 10 de marzo de 2019

Hablemos de Cine

OBSESIÓN, de Steven Knight

Ficha técnica

Director: Steven Knight

Guión: Steven Knight

Fotografía: Jess Hall

Música: Benjamin Wallfisch

Edición: Laura Jennings

Género; Thriller, drama

País: Estados Unidos, 2018.

Intérpretes

Matthew McConaughey (Baker), Anne Hathaway (Karen), Diane Lane (Constance), Jason Clarke (esposo de Karen), Jeremy Strong (Reid), Rafael Sayegh (Patrick), Djimon Hounsou.

Hablemos de una película difícil de apreciar, de entender, demasiado pretenciosa y para muchos, aburrida en extremo. Con todos estos adjetivos, podríamos dar por terminada la nota y olvidarla, pero resulta que la película tiene otros atributos que vale la pena revisar.

Nos referimos a la cinta OBSESIÓN dirigida y escrita por Steven Knight, un escritor británico creador de varios guiones excelentes que han sido premiados en diversos Festivales de Cine y que ha dirigido algunos de sus guiones.

OBSESIÓN es uno de ellos en el que elabora una rebuscada trama con unos personajes que navegan entre la fantasía y una realidad que se confunde con la ficción.

Pero, ¿de qué trata OBSESIÓN?, la cinta nos muestra a Baker, un hombre amargado, que pasa sus días en el mar apartado de los demás con el agravante de no tener muchos recursos económicos; dentro de su soledad, Baker tiene la obsesión de atrapar a un pez de aleta amarilla que nunca ha podido pescar.

Su rutina cambia al recibir la visita de Karen, su ex esposa y con la que tiene un hijo, la ex de entrada le hace una propuesta que lo deja helado, quiere que mate a su esposo, argumentando que a su lado corre un gran peligro junto con Patrick, su hijo, además, el hombre es rico y puede haber mucho dinero de por medio.

La vida de Baker da un giro total, la oferta de Karen es irresistible, suficiente para dejar atrás la obsesión de la pesca para ahora obsesionarse con la idea de matar al tipo, inclusive, la propia Karen le dice como, bastaría con llevar al violento marido a alta mar y echarlo a los tiburones con el que éstos se darían un festín.

Baker está dispuesto a llegar hasta el final y cumplirle el capricho a su ex, pero cuando las cosas no alcanzan su objetivo, por diversos motivos, Baker entrará en crisis que lo llevarán a cuestionarse su comportamiento y tratar de comprender hasta dónde ha llegado.

Parecería que estamos ante la clásica película donde la mujer fatal quiere matar al marido y busca un cómplice que le haga el trabajo sucio, pero no es tan fácil verla así; atrás del ofrecimiento, hay una serie de situaciones y giros de tuerca a la trama que le dan otra connotación a la rebuscada trama.

Para empezar, el elegido de Karen es su ex esposo, un hombre solitario, que arrastra un pesado fardo y con claras señales de perturbación que le provocan la confusión entre la realidad con la fantasía, rasgo que le da a la trama un sesgo de ficción.

Y es que la estabilidad de Baker se vuelve frágil donde él mismo empieza a dudar de sus fijaciones que lo llevan a pensar que las cosas no son como parecen.

Esto nos lleva a cuestionarnos en dónde estamos, en la realidad o en la ficción, donde pasan cosas llenas de incertidumbre y misterio y que nos obligan a dudar de la propia realidad.

Ese es el juego de espejos de la película, un thriller oscuro, a veces absurdo y obsesivo en una propuesta con tintes de erotismo donde los personajes parecen jugar con sus propias acciones y sentimientos.

El elenco de la película es formidable, pero hasta ellos parecerían estar desconcertados ante los acontecimientos y actitudes que viven sus personajes siempre inmersos en un mar de dudas y contradicciones en su comportamiento.

Este mismo elenco se ha pregunta del por qué del fracaso del filme y llegan a la conclusión que en parte se debe a la escasa difusión y promoción que le dieron en su estreno, pero los productores argumentaron que las pruebas que habían hecho en funciones privadas, habían detectado el escaso interés del público, de ahí que decidieron no meterle más dinero ante el riesgo de perderlo.

La verdad es que la película, más allá de su trabajo artístico, peca de pretenciosa y exagerada, dejando la apariencia de languidecer en cada escena restándole atractivo para el gran público.

OBSESIÓN nos dice que en algún lugar de una isla remota, vive un hombre confundido, que anda errante, tratando de olvidar su pasado pero, cuidado, se le ha metido en la cabeza la obsesión de matar, ¿o será todo una mentira?

Correo electrónico: ernestorobledo@hotmail.com

OBSESIÓN, de Steven Knight

Ficha técnica

Director: Steven Knight

Guión: Steven Knight

Fotografía: Jess Hall

Música: Benjamin Wallfisch

Edición: Laura Jennings

Género; Thriller, drama

País: Estados Unidos, 2018.

Intérpretes

Matthew McConaughey (Baker), Anne Hathaway (Karen), Diane Lane (Constance), Jason Clarke (esposo de Karen), Jeremy Strong (Reid), Rafael Sayegh (Patrick), Djimon Hounsou.

Hablemos de una película difícil de apreciar, de entender, demasiado pretenciosa y para muchos, aburrida en extremo. Con todos estos adjetivos, podríamos dar por terminada la nota y olvidarla, pero resulta que la película tiene otros atributos que vale la pena revisar.

Nos referimos a la cinta OBSESIÓN dirigida y escrita por Steven Knight, un escritor británico creador de varios guiones excelentes que han sido premiados en diversos Festivales de Cine y que ha dirigido algunos de sus guiones.

OBSESIÓN es uno de ellos en el que elabora una rebuscada trama con unos personajes que navegan entre la fantasía y una realidad que se confunde con la ficción.

Pero, ¿de qué trata OBSESIÓN?, la cinta nos muestra a Baker, un hombre amargado, que pasa sus días en el mar apartado de los demás con el agravante de no tener muchos recursos económicos; dentro de su soledad, Baker tiene la obsesión de atrapar a un pez de aleta amarilla que nunca ha podido pescar.

Su rutina cambia al recibir la visita de Karen, su ex esposa y con la que tiene un hijo, la ex de entrada le hace una propuesta que lo deja helado, quiere que mate a su esposo, argumentando que a su lado corre un gran peligro junto con Patrick, su hijo, además, el hombre es rico y puede haber mucho dinero de por medio.

La vida de Baker da un giro total, la oferta de Karen es irresistible, suficiente para dejar atrás la obsesión de la pesca para ahora obsesionarse con la idea de matar al tipo, inclusive, la propia Karen le dice como, bastaría con llevar al violento marido a alta mar y echarlo a los tiburones con el que éstos se darían un festín.

Baker está dispuesto a llegar hasta el final y cumplirle el capricho a su ex, pero cuando las cosas no alcanzan su objetivo, por diversos motivos, Baker entrará en crisis que lo llevarán a cuestionarse su comportamiento y tratar de comprender hasta dónde ha llegado.

Parecería que estamos ante la clásica película donde la mujer fatal quiere matar al marido y busca un cómplice que le haga el trabajo sucio, pero no es tan fácil verla así; atrás del ofrecimiento, hay una serie de situaciones y giros de tuerca a la trama que le dan otra connotación a la rebuscada trama.

Para empezar, el elegido de Karen es su ex esposo, un hombre solitario, que arrastra un pesado fardo y con claras señales de perturbación que le provocan la confusión entre la realidad con la fantasía, rasgo que le da a la trama un sesgo de ficción.

Y es que la estabilidad de Baker se vuelve frágil donde él mismo empieza a dudar de sus fijaciones que lo llevan a pensar que las cosas no son como parecen.

Esto nos lleva a cuestionarnos en dónde estamos, en la realidad o en la ficción, donde pasan cosas llenas de incertidumbre y misterio y que nos obligan a dudar de la propia realidad.

Ese es el juego de espejos de la película, un thriller oscuro, a veces absurdo y obsesivo en una propuesta con tintes de erotismo donde los personajes parecen jugar con sus propias acciones y sentimientos.

El elenco de la película es formidable, pero hasta ellos parecerían estar desconcertados ante los acontecimientos y actitudes que viven sus personajes siempre inmersos en un mar de dudas y contradicciones en su comportamiento.

Este mismo elenco se ha pregunta del por qué del fracaso del filme y llegan a la conclusión que en parte se debe a la escasa difusión y promoción que le dieron en su estreno, pero los productores argumentaron que las pruebas que habían hecho en funciones privadas, habían detectado el escaso interés del público, de ahí que decidieron no meterle más dinero ante el riesgo de perderlo.

La verdad es que la película, más allá de su trabajo artístico, peca de pretenciosa y exagerada, dejando la apariencia de languidecer en cada escena restándole atractivo para el gran público.

OBSESIÓN nos dice que en algún lugar de una isla remota, vive un hombre confundido, que anda errante, tratando de olvidar su pasado pero, cuidado, se le ha metido en la cabeza la obsesión de matar, ¿o será todo una mentira?

Correo electrónico: ernestorobledo@hotmail.com

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