/ domingo 28 de octubre de 2018

Hablemos de Cine

MUSEO, de Alonso Ruizpalacios

El personaje de Juan le explica a su amigo “Wilson”: Nadie sabe por qué se originan las cosas, nadie sabe tampoco por qué suceden. El suceso está ahí, se da y punto.


Ficha técnica

Director: Alonso Ruizpalacios

Guión: Alonso Ruizpalacios y Manuel Alacalá

Fotografía: Damián García

Música: Tomás Barreiro

Género: Drama, thriller

País: México, 2018.


Intérpretes: Gael García Bernal (Juan Núñez), Leonardo Ortizgris (Benjamín “Wilson”), Alfredo Castro (doctor Núñez), Lynn Gilmartin (Gemma), Lisa Owen (señora Núñez), Simón Russell Beale (Mr. Graves), Leticia Brédace (Sherezada), Ilse Salas (Silvia), Bernardo Velazco (Bosco).



El director chilango Alonso Ruizpalacios logra un interesante filme que nos habla del fracaso, de la amistad y de la redención, así como también, de ese descontento social que, de pronto, florece entre las sociedades permeando el ambiente entre las familias y los amigos.

Lo más extraño es que la película trata de un robo, pero este, es usado de manera muy inteligente, para mostrarnos el accionar y los acontecimientos de una ciudad donde sus habitantes tenían muy fresca en la memoria el temblor que los había sacudido e impactado.

Hablamos de la película MUSEO del realizador Ruizpalacios (Güeros, Café Paradise, El último canto del pájaro Cú) que, partiendo de un hecho real, hace una disección del comportamiento de dos jóvenes casi treintañeros, tocados por la ambición.

La noche del 24 de diciembre del 1985, apenas tres meses después del terremoto de septiembre, y pese a tantas calamidades, las familias se disponen a celebrar la navidad. En los preámbulos de la cena de la familia Núñez, conocemos a Juan, el hermano hermético, problemático, rebelde, que no sabe bien que hacer cunado está con la familia; en realidad, a Juan le urge zafarse de ahí pues tiene otros planes, entrar al Museo de Antropología para robarse piezas de incalculable valor, el atraco lo hará con “Wilson”, su cómplice y gran amigo desde la infancia.

El robo lo hacen limpiamente, los guardias del lugar ni cuenta se dan y a la mañana siguiente el país entero se despierta con la noticia que indigna y entristece a sus habitantes.

Uno de los más enfadados es el doctor Núñez, padre de Juan, quien maldice a los ladrones sin saber que uno de ellos es su propio hijo. Y es a partir de ahí, que empezará el calvario para los dos jóvenes criminales quienes intentarán, sin éxito, vender las piezas robadas mientras la policía comienza a seguirles los pasos y podrían ser atrapados en cualquier momento.

Uno de tantos aciertos del filme, es que la trama se olvida de la policía, no hay aquí persecuciones, ni balazos, ni violencia extrema, la historia se centra en el comportamiento de sus personajes, en la confrontación entre ellos y con sus familias, dentro de ese microcosmos, que simula el desorden y descontento de una sociedad en su conjunto.

No por nada, el guión de la película fue galardonado con el primer lugar en el pasado Certamen de Cine de Berlín, al distinguir su inteligente desarrollo en medio de una atmósfera cargada de mucha tensión para mostrarnos a un par sin oficio alguno que, tocados por la codicia, se les ocurre un ilícito sin medir su trascendencia y consecuencias.

Y es que Juan y el “Wilson” son dos perdedores, dos mediocres que siguen viviendo a costa de sus padres mientras ven pasar la vida. “Wilson” cuida a su anciano padre que está muy enfermo y Juan, el líder de los dos, se la pasa peleando con sus hermanas que le exigen que haga algo y deje de vivir a costa de sus papás.

Lo que hace Juan es lo impensable y todo se resumirá en una estrujante escena donde Juan les confiesa a sus padres su participación en el atraco; ante la confesión, el padre abofetea varias veces a su vástago, mientras su madre, se deshace en llanto en medio de un dramatismo que estruja, que conmueve a todo el que la ve.

Y aquí entramos a otra faceta del filme, la de la redención, Juan hará otra cosa impensable, acaso para resarcir el dolor de sus padres o simplemente porque la serie de circunstancias no le dejaban otra opción después de haber estado en varios lugares del país y tratado con diversas personas, cuyas acciones en varios sentidos, le reafirman el porqué de su rebeldía ante las injusticas de la vida.


Esa indisciplina de Juan se manifiesta en otro razonamiento que le dice a “Wilson”: Observa bien cómo los habitantes de nuestro barrio son personas que llegan de trabajar a sus casas cansados, se ponen a ver la TV en vez de estar con su familia y se van a dormir más cansados y nunca logran salir de este ciclo de agotamiento perpetuo.

MUSEO es una excelente cinta mexicana que nos remite al pasado de la ciudad de México con el traslado del Dios Tlaloc, así como también cuando trajeron a la ballena Keiko a un centro de diversiones y, sobre todo, nos muestra a una sociedad golpeada por el temblor, enojada por tener un gobierno incompetente, pero también amorosa y defensora de su país y de sus ciudad, que se manifiesta en el propio Juan quien, pese a sus acciones delictivas, es incapaz de contenerse cuando alguien se expresa mal de México y de su cultura. No se la pierda.


Correo electrónico: ernestorobledo@hotmail.com




MOVIOLA

PELICULA: MUSEO

DIRECTOR: ALONSO RUIZPALACIOS

PERSONAJES: JUAN NUÑEZ (Gael García Bernal)

BENJAMIN ”WILSON” (Leonardo Ortizgris)

DOCTOR NUÑEZ (Alfredo Castro)


SINOPSIS


La noche del 24 de diciembre del 1985, dos jóvenes clase medieros realizaron un robo que estremeció al país entero; sin que la policía se diera cuenta, lograron sacar del museo del Museo de Antropología cuantiosas piezas sin saber después cómo colocarlas en el mercado negro. Los dos jóvenes, después del atraco, vivirían un verdadero calvario con sus familias y consigo mismos.

MUSEO, de Alonso Ruizpalacios

El personaje de Juan le explica a su amigo “Wilson”: Nadie sabe por qué se originan las cosas, nadie sabe tampoco por qué suceden. El suceso está ahí, se da y punto.


Ficha técnica

Director: Alonso Ruizpalacios

Guión: Alonso Ruizpalacios y Manuel Alacalá

Fotografía: Damián García

Música: Tomás Barreiro

Género: Drama, thriller

País: México, 2018.


Intérpretes: Gael García Bernal (Juan Núñez), Leonardo Ortizgris (Benjamín “Wilson”), Alfredo Castro (doctor Núñez), Lynn Gilmartin (Gemma), Lisa Owen (señora Núñez), Simón Russell Beale (Mr. Graves), Leticia Brédace (Sherezada), Ilse Salas (Silvia), Bernardo Velazco (Bosco).



El director chilango Alonso Ruizpalacios logra un interesante filme que nos habla del fracaso, de la amistad y de la redención, así como también, de ese descontento social que, de pronto, florece entre las sociedades permeando el ambiente entre las familias y los amigos.

Lo más extraño es que la película trata de un robo, pero este, es usado de manera muy inteligente, para mostrarnos el accionar y los acontecimientos de una ciudad donde sus habitantes tenían muy fresca en la memoria el temblor que los había sacudido e impactado.

Hablamos de la película MUSEO del realizador Ruizpalacios (Güeros, Café Paradise, El último canto del pájaro Cú) que, partiendo de un hecho real, hace una disección del comportamiento de dos jóvenes casi treintañeros, tocados por la ambición.

La noche del 24 de diciembre del 1985, apenas tres meses después del terremoto de septiembre, y pese a tantas calamidades, las familias se disponen a celebrar la navidad. En los preámbulos de la cena de la familia Núñez, conocemos a Juan, el hermano hermético, problemático, rebelde, que no sabe bien que hacer cunado está con la familia; en realidad, a Juan le urge zafarse de ahí pues tiene otros planes, entrar al Museo de Antropología para robarse piezas de incalculable valor, el atraco lo hará con “Wilson”, su cómplice y gran amigo desde la infancia.

El robo lo hacen limpiamente, los guardias del lugar ni cuenta se dan y a la mañana siguiente el país entero se despierta con la noticia que indigna y entristece a sus habitantes.

Uno de los más enfadados es el doctor Núñez, padre de Juan, quien maldice a los ladrones sin saber que uno de ellos es su propio hijo. Y es a partir de ahí, que empezará el calvario para los dos jóvenes criminales quienes intentarán, sin éxito, vender las piezas robadas mientras la policía comienza a seguirles los pasos y podrían ser atrapados en cualquier momento.

Uno de tantos aciertos del filme, es que la trama se olvida de la policía, no hay aquí persecuciones, ni balazos, ni violencia extrema, la historia se centra en el comportamiento de sus personajes, en la confrontación entre ellos y con sus familias, dentro de ese microcosmos, que simula el desorden y descontento de una sociedad en su conjunto.

No por nada, el guión de la película fue galardonado con el primer lugar en el pasado Certamen de Cine de Berlín, al distinguir su inteligente desarrollo en medio de una atmósfera cargada de mucha tensión para mostrarnos a un par sin oficio alguno que, tocados por la codicia, se les ocurre un ilícito sin medir su trascendencia y consecuencias.

Y es que Juan y el “Wilson” son dos perdedores, dos mediocres que siguen viviendo a costa de sus padres mientras ven pasar la vida. “Wilson” cuida a su anciano padre que está muy enfermo y Juan, el líder de los dos, se la pasa peleando con sus hermanas que le exigen que haga algo y deje de vivir a costa de sus papás.

Lo que hace Juan es lo impensable y todo se resumirá en una estrujante escena donde Juan les confiesa a sus padres su participación en el atraco; ante la confesión, el padre abofetea varias veces a su vástago, mientras su madre, se deshace en llanto en medio de un dramatismo que estruja, que conmueve a todo el que la ve.

Y aquí entramos a otra faceta del filme, la de la redención, Juan hará otra cosa impensable, acaso para resarcir el dolor de sus padres o simplemente porque la serie de circunstancias no le dejaban otra opción después de haber estado en varios lugares del país y tratado con diversas personas, cuyas acciones en varios sentidos, le reafirman el porqué de su rebeldía ante las injusticas de la vida.


Esa indisciplina de Juan se manifiesta en otro razonamiento que le dice a “Wilson”: Observa bien cómo los habitantes de nuestro barrio son personas que llegan de trabajar a sus casas cansados, se ponen a ver la TV en vez de estar con su familia y se van a dormir más cansados y nunca logran salir de este ciclo de agotamiento perpetuo.

MUSEO es una excelente cinta mexicana que nos remite al pasado de la ciudad de México con el traslado del Dios Tlaloc, así como también cuando trajeron a la ballena Keiko a un centro de diversiones y, sobre todo, nos muestra a una sociedad golpeada por el temblor, enojada por tener un gobierno incompetente, pero también amorosa y defensora de su país y de sus ciudad, que se manifiesta en el propio Juan quien, pese a sus acciones delictivas, es incapaz de contenerse cuando alguien se expresa mal de México y de su cultura. No se la pierda.


Correo electrónico: ernestorobledo@hotmail.com




MOVIOLA

PELICULA: MUSEO

DIRECTOR: ALONSO RUIZPALACIOS

PERSONAJES: JUAN NUÑEZ (Gael García Bernal)

BENJAMIN ”WILSON” (Leonardo Ortizgris)

DOCTOR NUÑEZ (Alfredo Castro)


SINOPSIS


La noche del 24 de diciembre del 1985, dos jóvenes clase medieros realizaron un robo que estremeció al país entero; sin que la policía se diera cuenta, lograron sacar del museo del Museo de Antropología cuantiosas piezas sin saber después cómo colocarlas en el mercado negro. Los dos jóvenes, después del atraco, vivirían un verdadero calvario con sus familias y consigo mismos.

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