NACE UNA ESTRELLA, de Bradley Cooper
Nota dedicada a Don Paulino Tafoya, con el deseo de que su salud mejore.
- Ficha técnica
- Director: Bradley Cooper
- Guión: Will Fetters, Bradley Cooper y Eric Roth
- Basado en la obra de William A Wellman
- Fotografía: MattewLibartique
- Música: Lady Gaga, Bradley Cooper
- Edición: Jay Cassidy
- Género: Musical
- País: Estados Unidos, 2018.
Intérpretes: Bradley Cooper (Jack Maine), Lady Gaga (Ally), Sam Elliott (Bobby Maine), Andrew Dice Clay (Lorenzo), DaveChappelle (Noodles), Anthony Ramos (Ramón), Rebecca Field (Gail), Bonnie Somarville (Sally).
Es importante mencionar, sobre todo para los iniciados, que la película NACE UNA ESTRELLA que se puede ver en la cartelera, es la cuarta versión de un tema escrito por William A. Wellman y que inició en el año de 1937.
La segunda adaptación se hizo en 1954 con la actuación de Judy Garland y James Mason, hasta llegar a la tercera interpretación en 1976 con Barbra Streisand y Kris Kristofferson, considerada, esta última, como la más plana y mala de todas las versiones.
Como se puede apreciar, el cine de Hollywood se nutre de sus éxitos comerciales y, en determinados periodos, recurre al refrito para repetir una fórmula ya probada que le garantice el éxito y el beneficio económico con todos los riesgos que eso implica.
En esta última versión de esta historia con connotaciones trágicas, tuvieron que pasar más de 40 años para volver al tema y contar la historia del descubrimiento de una gran voz y personalidad que brillará con luz propia una vez que alguien descubre su potencial que estaba perdido entre la gente común y corriente.
Por supuesto, la protagonista seleccionada, será una cantante famosa y dueña de una gran voz, que le dará vida al personaje que se encumbra a la fama en medio de grandes dificultades, mientras demuestra ante sus fanáticos, sus grandes dotes interpretativas.
Eso le ocurre a Ally, una inquieta mesera y que de noche canta en un bar de dragqueens hasta donde llega Jack Maine, un famoso cantautor country, quien, al escucharla, percibe de inmediato el potencial de voz de esa mujer que lo cautiva al instante.
Jack logra que Ally supere sus inseguridades y en su siguiente concierto hace que la chica suba al escenario a cantar su música logrando un impacto instantáneo con el público y de ahí en adelante su popularidad subirá como la espuma, mientras Jack inicia su descenso, aunque él no se dé cuenta de inmediato.
Y es que mientras Ally brilla, Jack Maine se vuelve más desagradable, siempre propenso a la autodestrucción y metido en un tobogán en caída libre arrastrado por el alcohol y las drogas, sustancias que usa acaso para mitigar la fama, algo que nunca pidió tener y que lo persigue a donde va,
NACE UNA ESTRELLA podría verse como una especie de aventura donde el éxito y la tragedia van de la mano mientras asistimos a una historia de amor que se desvanece por la propia actividad de ambos, envueltos en la fama que los separa por los intereses que esto conlleva.
La historia podría verse también como una disertación sobre la fama, vista como algo que de repente pesa mucho y que no se sabe qué hacer con ella, además, de que, en su delirio, oculta las heridas y el dolor que consumen por dentro a todo aquel que la lleva a cuestas y que le impiden escuchar su voz interior, esa voz que desgarra por dentro pidiendo a gritos ser escuchada antes de que sea demasiado tarde.
Ally arrastra otro lastre, el saber que es completamente controlada y manipulada por hombres muy poderosos de la industria musical, como su manager, que la obliga a perder su esencia artística a cambio de contratos millonarios que le garantizan convertirla en una triunfadora, así como por el propio Jack, su descubridor y gran amor para ella, pero, a fin de cuentas, manipulador y egoísta, que le quiere imponer su manera de ser y hasta de vestir.
Esta última entrega de NACE UNA ESTRELLA ha sido bien recibida por el público y la crítica misma, quien ha destacado las actuaciones de Bradley Cooper en su papel del atormentado Jack Maine. Cooper debuta también en esta cinta como director, y tiene una importante participación en los arreglos musicales, sus logros en conjunto, en este su primer trabajo como realizador, hacen pensar en las posibilidades que puede ofrecer como cineasta.
Lady Gaga es cosa aparte, para empezar, sorprende gratamente su trabajo actoral, y en cuanto a sus interpretaciones, simplemente atrapan al espectador que vibra con sus canciones mientras se deja llevar por esa voz que seduce y enciende al escucharla.
Pero haciendo a un lado las brillantes interpretaciones musicales, la cinta se pierde en la banalidad y en lo predecible de un tema que no aporta nada nuevo al género musical, la pregunta es ¿vale la pena revivir un tema filmado tantas veces? Los dueños de la inversión dirán que sí, siempre y cuando la taquilla responde, los cinéfilos tendrán la última palabra.
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