/ viernes 17 de junio de 2022

Entorno Empresarial

Dinero más caro y condiciones económicas turbulentas

Tras el fuerte repunte registrado en 2021, la economía mundial está entrando en una pronunciada desaceleración en medio de las nuevas amenazas derivadas de las variantes de la COVID-19 y el aumento de la inflación, la deuda y la desigualdad de ingresos, lo que podría poner en peligro la recuperación de México.

La marcada desaceleración de las principales economías (tales como los Estados Unidos y China) pesará sobre la demanda externa.

Con una inflación que tiene el precio de productos altos, se empieza a especular sobre una posible recesión en la economía mexicana con todas sus implicaciones.

Los factores macroeconómicos han tenido efectos que la mayoría de los mexicanos han resentido, pero particularmente los de menores recursos.

Lo que es ineludible es que estamos en un franco periodo de desaceleración económica.

Las consecuencias de la desaceleración económica son múltiples y costosas: el bajo crecimiento produce más pobreza, más inseguridad, afecta la recaudación fiscal y, con ello, dificulta la capacidad de gasto en inversión y programas sociales.

Aunque el tejido empresarial es sólido a las pymes les resultara difícil salir indemnes de una desaceleración económica.

Ante este panorama Estados Unidos se ha dado cuenta que la inflación no ha bajado como se esperaba y hace un aumento de tasas de interés en ¾ de punto, mucho mas de lo esperado, y que nuestro país se tendrá que poner a la par aumentando la tasa de interés.

En este espacio anticipábamos este escenario de contracción en el que la demanda de reduce, y el costo del dinero aumenta quedando posiblemente una tasa de 9 o 10%.

Lo que tanto se dijo que llegaría, ya llego este momento.

A principio de año se hablaba de un crecimiento del 4% y se ha ido ajustando hasta este momento que tenemos un pronostico de crecimiento de 1% y apenas vamos a mitad de año.

Para el próximo año anticipamos un crecimiento cero, creando un panorama en donde se derrumba la manufactura, las exportaciones derivado de la crisis en estados unidos.

Vamos a pasar por una situación económica turbulenta, y es recomendable prestar atención a los créditos contraídos en donde se ajusten las tasas, como las tarjetas de crédito en donde se pagaran mas intereses.

Tanto en las pymes como en los hogares habrá que hacer uso de la disciplina en las finanzas.

Dinero más caro y condiciones económicas turbulentas

Tras el fuerte repunte registrado en 2021, la economía mundial está entrando en una pronunciada desaceleración en medio de las nuevas amenazas derivadas de las variantes de la COVID-19 y el aumento de la inflación, la deuda y la desigualdad de ingresos, lo que podría poner en peligro la recuperación de México.

La marcada desaceleración de las principales economías (tales como los Estados Unidos y China) pesará sobre la demanda externa.

Con una inflación que tiene el precio de productos altos, se empieza a especular sobre una posible recesión en la economía mexicana con todas sus implicaciones.

Los factores macroeconómicos han tenido efectos que la mayoría de los mexicanos han resentido, pero particularmente los de menores recursos.

Lo que es ineludible es que estamos en un franco periodo de desaceleración económica.

Las consecuencias de la desaceleración económica son múltiples y costosas: el bajo crecimiento produce más pobreza, más inseguridad, afecta la recaudación fiscal y, con ello, dificulta la capacidad de gasto en inversión y programas sociales.

Aunque el tejido empresarial es sólido a las pymes les resultara difícil salir indemnes de una desaceleración económica.

Ante este panorama Estados Unidos se ha dado cuenta que la inflación no ha bajado como se esperaba y hace un aumento de tasas de interés en ¾ de punto, mucho mas de lo esperado, y que nuestro país se tendrá que poner a la par aumentando la tasa de interés.

En este espacio anticipábamos este escenario de contracción en el que la demanda de reduce, y el costo del dinero aumenta quedando posiblemente una tasa de 9 o 10%.

Lo que tanto se dijo que llegaría, ya llego este momento.

A principio de año se hablaba de un crecimiento del 4% y se ha ido ajustando hasta este momento que tenemos un pronostico de crecimiento de 1% y apenas vamos a mitad de año.

Para el próximo año anticipamos un crecimiento cero, creando un panorama en donde se derrumba la manufactura, las exportaciones derivado de la crisis en estados unidos.

Vamos a pasar por una situación económica turbulenta, y es recomendable prestar atención a los créditos contraídos en donde se ajusten las tasas, como las tarjetas de crédito en donde se pagaran mas intereses.

Tanto en las pymes como en los hogares habrá que hacer uso de la disciplina en las finanzas.