/ viernes 4 de marzo de 2022

Entorno Empresarial

Estanflación en México


Las expectativas de crecimiento económico para México van a la baja.


La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recortó en un punto su expectativa de crecimiento para México y ahora anticipa que el Producto Interno Bruto (PIB) registrará un avance de 2.3% desde 3.3% previo.


Este ajuste incorpora el impacto del debilitamiento de la actividad económica originado en la baja que experimenta la inversión desde el 2019.


Por su parte, los expertos del sector privado redujeron de 2.79% a 2.27% su pronóstico de crecimiento para el PIB en 2022.


Tampoco hay buenas noticias en materia de inflación: se espera que la inflación general cierre este año en 4.42%, fuera del rango objetivo de Banxico. La inflación cerró el 2021 en 7.3%, el nivel más alto en dos décadas.


Los confinamientos que han provocado una caída en el PIB y ahora los efectos de la guerra en Ucrania, que encarecen los hidrocarburos y la energía provocaran una mayor presión inflacionaria, y provocan una coyuntura de focos rojos para nuestro país.


Si la situación sigue igual, posiblemente no lleguemos a crecer ni un 1% para el primer trimestre del año. Y de continuar así llegaríamos a una recesión.


Sin embargo podríamos decir que transitamos por un panorama de Estanflación.


La estanflación en un país es la combinación de inflación y estancamiento económico. Dicho fenómeno une estos dos conceptos, que cuando se producen a la vez son devastadores para la economía.


En otras palabras, la estanflación surge cuando la economía de un país se encuentra estancada, es decir, no crece y, a la vez, se encarece el costo de vida, motivado por una elevada inflación. Esta combinación provoca el empobrecimiento de la población.


Es un escenario muy complicado donde se solapan situaciones de alza de precios, aumento de desempleo y estancamiento económico. Esto puede llevar al país a una circunstancia muy grave de empobrecimiento.


La estanflación afecta gravemente al crecimiento de los distintos sectores productivos.


A las empresas que han podido sortear los confinamientos de la pandemia, y por ende la baja en el consumo, ahora les llueve sobre mojado con la actual situación económica internacional con la guerra y nacional que genera mucha incertidumbre, lo que provocará que la actividad económica será menor en los siguientes meses.


Sin ayuda del Gobierno las empresas y ciudadanos deberán ser cautelosos ante esta estanflación.


Estanflación en México


Las expectativas de crecimiento económico para México van a la baja.


La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recortó en un punto su expectativa de crecimiento para México y ahora anticipa que el Producto Interno Bruto (PIB) registrará un avance de 2.3% desde 3.3% previo.


Este ajuste incorpora el impacto del debilitamiento de la actividad económica originado en la baja que experimenta la inversión desde el 2019.


Por su parte, los expertos del sector privado redujeron de 2.79% a 2.27% su pronóstico de crecimiento para el PIB en 2022.


Tampoco hay buenas noticias en materia de inflación: se espera que la inflación general cierre este año en 4.42%, fuera del rango objetivo de Banxico. La inflación cerró el 2021 en 7.3%, el nivel más alto en dos décadas.


Los confinamientos que han provocado una caída en el PIB y ahora los efectos de la guerra en Ucrania, que encarecen los hidrocarburos y la energía provocaran una mayor presión inflacionaria, y provocan una coyuntura de focos rojos para nuestro país.


Si la situación sigue igual, posiblemente no lleguemos a crecer ni un 1% para el primer trimestre del año. Y de continuar así llegaríamos a una recesión.


Sin embargo podríamos decir que transitamos por un panorama de Estanflación.


La estanflación en un país es la combinación de inflación y estancamiento económico. Dicho fenómeno une estos dos conceptos, que cuando se producen a la vez son devastadores para la economía.


En otras palabras, la estanflación surge cuando la economía de un país se encuentra estancada, es decir, no crece y, a la vez, se encarece el costo de vida, motivado por una elevada inflación. Esta combinación provoca el empobrecimiento de la población.


Es un escenario muy complicado donde se solapan situaciones de alza de precios, aumento de desempleo y estancamiento económico. Esto puede llevar al país a una circunstancia muy grave de empobrecimiento.


La estanflación afecta gravemente al crecimiento de los distintos sectores productivos.


A las empresas que han podido sortear los confinamientos de la pandemia, y por ende la baja en el consumo, ahora les llueve sobre mojado con la actual situación económica internacional con la guerra y nacional que genera mucha incertidumbre, lo que provocará que la actividad económica será menor en los siguientes meses.


Sin ayuda del Gobierno las empresas y ciudadanos deberán ser cautelosos ante esta estanflación.