/ viernes 8 de enero de 2021

Entorno empresarial

2021 año complicado

La recuperación económica después de la pandemia no está exenta de la desigualdad. Cada economía en el mundo tendrá su propio proceso, por supuesto uno más eficaz que otro. Ahora, reconstruir el tejido socioeconómico debería ser la meta.

A mediados del último trimestre de 2020, Euromonitor International recopiló en la publicación Economía Global en 2021: un vistazo a la recuperación y a los riesgos potenciales, los puntos más importantes y que se van a destacar en el año que comienza, así como las proyecciones más relevantes y los riesgos sobre los cuales se debe mantener una importante atención.

Obstáculos logísticos podrían prolongar la distribución de la inmunización en los primeros seis meses del año.

Con esto en mente, el crecimiento del PIB para el último trimestre de 2020 se proyecta negativo en las economías avanzadas y con decrecimientos importantes en España, Francia e Italia, cuyos pronósticos se acercan al -12%.

Por otro lado, en Estados Unidos y Corea del Sur se presentarían los escenarios más optimistas, con decrecimientos en su economía del -4% y del -1,7%, respectivamente.

Por su parte, en los países emergentes las caídas más fuertes en el PIB se presentarían en países como India y México, con un -10,5% cada uno, mientras que en países como Indonesia y China se verían escenarios menos trágicos.

En cuanto a los efectos inflacionarios, se verá un aumento marcado en las economías emergentes como México con un promedio del 2,4% para finales de 2020, en comparación con las avanzadas, que se espera no alcancen ni siquiera el 1%.

El problema latente, y que tiene una probabilidad de ocurrencia entre el 27% y el 37% según la investigación de Euromonitor, es la posibilidad de una segunda ola pandémica, seguida de una posible tercera.

Según la Ocde, las políticas sanitarias y económicas no son excluyentes y que, por el contrario, deben ir de la mano, lastima que en México se tenga otra estrategia.

Todos los países presentarán recuperación pues al estar con semejante descalabro, cada movimiento de la actividad económica marcará un avance que dista mucho de una recuperación real.

A pesar de ello, la manutención de estrictos protocolos de bioseguridad será crucial en esta nueva etapa, acompañados de un rescate empresarial que como sabemos no se dará.

2021 año complicado

La recuperación económica después de la pandemia no está exenta de la desigualdad. Cada economía en el mundo tendrá su propio proceso, por supuesto uno más eficaz que otro. Ahora, reconstruir el tejido socioeconómico debería ser la meta.

A mediados del último trimestre de 2020, Euromonitor International recopiló en la publicación Economía Global en 2021: un vistazo a la recuperación y a los riesgos potenciales, los puntos más importantes y que se van a destacar en el año que comienza, así como las proyecciones más relevantes y los riesgos sobre los cuales se debe mantener una importante atención.

Obstáculos logísticos podrían prolongar la distribución de la inmunización en los primeros seis meses del año.

Con esto en mente, el crecimiento del PIB para el último trimestre de 2020 se proyecta negativo en las economías avanzadas y con decrecimientos importantes en España, Francia e Italia, cuyos pronósticos se acercan al -12%.

Por otro lado, en Estados Unidos y Corea del Sur se presentarían los escenarios más optimistas, con decrecimientos en su economía del -4% y del -1,7%, respectivamente.

Por su parte, en los países emergentes las caídas más fuertes en el PIB se presentarían en países como India y México, con un -10,5% cada uno, mientras que en países como Indonesia y China se verían escenarios menos trágicos.

En cuanto a los efectos inflacionarios, se verá un aumento marcado en las economías emergentes como México con un promedio del 2,4% para finales de 2020, en comparación con las avanzadas, que se espera no alcancen ni siquiera el 1%.

El problema latente, y que tiene una probabilidad de ocurrencia entre el 27% y el 37% según la investigación de Euromonitor, es la posibilidad de una segunda ola pandémica, seguida de una posible tercera.

Según la Ocde, las políticas sanitarias y económicas no son excluyentes y que, por el contrario, deben ir de la mano, lastima que en México se tenga otra estrategia.

Todos los países presentarán recuperación pues al estar con semejante descalabro, cada movimiento de la actividad económica marcará un avance que dista mucho de una recuperación real.

A pesar de ello, la manutención de estrictos protocolos de bioseguridad será crucial en esta nueva etapa, acompañados de un rescate empresarial que como sabemos no se dará.