/ sábado 18 de diciembre de 2021

El quedar bien no concede distinción

En la reciente reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores quedó de manifiesto la existencia de una diferencia entre lo que piensan y expresan los gobernantes y los sentimientos del ciudadano que analiza los actos oficiales.

Quedar bien con el presidente no concede ninguna distinción ante la ciudadanía, pero el intento de los gobernadores pudiera traducirse en tratos preferenciales en la distribución presupuestal de la federación para el 2022, lo que evidencia el grado de improvisación que desequilibra el desarrollo económico de los estados del país. No son las cuestiones técnicas ni las condiciones reales de los estados los que determinan el apoyo federal sino los lazos de amistad y confianza entre los políticos gobernantes.

La clase gobernante ignora lo que la gente piensa de ellos, pero permanece atenta a cualquier estornudo presidencial para asumir, sin mayor preocupación, las características de los programas federales tanto en materia económica como en la política electoral pues de ello depende su futuro personal mientras la situación de los estados pasa a ser una consecuencia de su buena o mala relación con el poder federal. En México, esa condición ya no debe continuar “para bien de todos”.

No importa si nuestros políticos son guindas, rojos, azules, verdes o naranjas. Lo que está en la mente de los ciudadanos son los resultados de la administración estatal correspondiente. Un buen resultado depende ahora de una relación fincada en el sometimiento al placer presidencial y, cuando el relevo de mandos federales ocurre, los gobernadores dejan de tener buenos resultados, consecuencia de su inesperada lejanía con el presidente en turno. Los ejemplos abundan a lo largo de nuestra historia y se destacan por sus consecuencias desastrosas.

Los adjetivos del poderoso presidente de la república colocados sobre “sus adversarios” pertenecen a una jerga que causa satisfacción si es favorable al calificado, pero es un castigo para quienes forman parte de los segmentos arbitrariamente creados en la mente del calificador, traduciéndose todo en la superación o en retraso para los estados o municipios de que se trate. El caprichoso andar de la administración pública federal ha generado una especie de mimetismo en algunos estados como el nuestro. La bipolaridad en la administración de San Luis se expresa en conductas que por momentos llegan a ser enfermizas.

Todavía no existen resultados que demuestren la eficacia de la administración del estado, pero ya tenemos elementos suficientes para crear el silogismo de nuestro porvenir. Las caras del gobierno estatal tratan de reflejar el rostro que tiene la administración federal en lugar de diseñar técnicamente los planes que aceleren el desarrollo de nuestro estado. Un comportamiento gubernamental fincado en la austeridad y el ahorro deja de ser impactante cuando no se sabe cual será el destino de lo ahorrado.

La conducta gubernamental, en todos los planos, exige explicaciones que, aunque forman parte de las obligaciones de los funcionarios, no son atendidas. En todo caso, son elementos para mostrarlos al presidente de la república como prueba de que en San Luis sus modos son un ejemplo que se practica en la realidad, aunque resultados no se incluyan en el anexo. Eso es más una apariencia que una resultante.

Cuando los gobernantes depongan sus criterios políticos mientras ejercen el poder y asuman como base de sus actos a la ciencia y la tecnología, en cualquiera de sus ramas, estaremos al principio de un futuro mejor.

DE MIRADAS Y OÍDAS INDISCRETAS

El comunicador Miguel Gallegos percibió que se le hizo bolas el engrudo cuando leyó las redes y escuchó los mensajes de algunos colegas molestos por lo que llamaron amenazas a la libre expresión y divulgación de informes relacionados con actividades delictivas. El vocero de seguridad pública del estado no se expresó bien cuando quiso decir que la divulgación de mensajes del crimen organizado podría ser considerado como delito, pero no expresó el criterio para hacerlo. Sin embargo, el tema no quedó ahí. ¿Cómo detectar si un periodista es receptor de esos mensajes y por qué vía?

Se adiciona enseguida la información de las dependencias policiales del estado para alertar a los usuarios de las redes sociales sobre el riesgo de ser “jaqueados” en sus cuentas personales. Las quejas, dijeron, son muchas y se suman a otra denuncia que hacen los legisladores locales que se han dado cuenta de que sus enlaces personales son objeto de modificaciones que aparentemente les son perjudiciales.

Y digo que ya se les hizo bolas el engrudo porque no hace mucho que los periodistas potosinos padecemos de un espionaje telefónico que poco o nada ganamos con denunciarlo si quien se encarga de recibir las quejas pudiera ser el autor del espionaje. Según las sospechas que han expresado varios de los colegas que han sido objeto de intervenciones telefónicas, en un edificio ubicado en la esquina de Carranza y Benigno Arriaga se encontraba un centro de escuchas telefónicas con un equipo que habían adquirido políticos para husmear la información que pudiera serles útil. La teoría perdió fuerza cuando se atribuyó a diferentes personas la labor de espiar y nunca se precisó la responsabilidad de alguien.

Del mismo modo existen varias versiones. Un secretario de finanzas que no es el actual, pedía que colocásemos los celulares junto a la bocina de un radio encendido y sintonizado en una estación de música mexicana, para eludir las grabaciones que luego circulaban por las redes. Otros colegas me han dicho que, si uno escucha ecos raros en un celular, es indicio de que estamos siendo grabados. No todas las llamadas que uno recibe tienen ese efecto, pero lo común es que al interlocutor se le advierta que “¡hay pájaros en los alambres!”.

Pero que ahora sean los centros de vigilancia policial los que adviertan a los usuarios sobre el “jaqueo” en redes sociales siento que la cosa es más seria. Lo que me queda por decir es que los “jaquers” son tan chingones que ni la policía puede localizarlos. Yo no creo que haya un aficionado a meterse en lo que no le importa haya invertido lo necesario para meterse en vidas ajenas nomás por satisfacer una curiosidad sin mayor valor. Si no estamos jugando a las escondidas con un loco, qué utilidad le puede uno encontrar al espionaje si no es valorado por un comprador en potencia.

Se necesita ser muy pendejo para no tomar las medidas para guardar en secreto las operaciones comerciales o el manejo de datos personales a través de la Internet. Ora, si de lo que se trata es de suplantar la personalidad para divulgar opiniones falsas o versiones increíbles, pues me parece una diversión estúpida corriendo bromas a cuenta de los demás. En todo caso, con una sonora mentada de madre tienen.

EL COTARRO POLÍTICO

El diputado Edmundo Torrescano Medina está en desacuerdo con que la administración federal presuma como un logro el tema de las remesas, cuando en realidad es una muestra del fracaso de una política económica para generar oportunidades para los mexicanos en su lugar de origen. “Sabemos todos que se van en busca de mejores oportunidades económicas en otro país, lo cual es una poderosa razón para que se modifiquen y reestructuren las políticas públicas en materia laboral y generar oportunidades que provoquen arraigo entre la gente, que les vaya bien en el lugar donde viven”… El que no sabe lo que dice es el insigne diputado José Luis Fernández Martínez al anunciar que con 350 millones de tepalcates se puede crear una “guardia civil” para ofrecernos seguridad y paz en San Luis. Instalaciones, armamento y equipo tienen que ser iguales o mejores a los de la delincuencia. O solo que los quieran armar con resorteras… Y con planes de austeridad ¡menos!... La siguiente joya literaria puede usted adjudicarla a una diputada huasteca que sabe cómo acomodarse en la fila: “Vamos a hacer lo que sea suficiente para que el Gobierno Federal mande los recursos suficientes a San Luis Potosí, haremos la planeación que tenemos para recorrer los hospitales como Soledad, Ciudad Valles, en la capital, para ver de cerca, aunque ya sabemos cuáles son las necesidades y poder acordar con la gente que trabaja día a día, como una enfermera, un doctor, una auxiliar”… Sea pues… Funciones de Lucha Libre, Teatro del Pueblo, peleas de gallos, corrida de toros, pabellón comercial, artesanal y gastronómico, así como juegos mecánicos, entre los atractivos de la mejor fiesta de invierno a partir de hoy, anuncia la alcaldesa de Villa de Reyes, Érika Briones Pérez, en lo que es la Feria Regional. Todo eso en la plaza principal… Y, para no ser menos, anuncia que hoy estarán en la función inaugural artistas de renombre… Por cierto, mucha gente podrá ir este fin de semana a la Plaza de Fundadores y a la Plaza de Armas, a disfrutar de un buen espectáculo navideño… El terrible Manolo ya se fue a tomar la foto… HASTA LA PRÓXIMA

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx

En la reciente reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores quedó de manifiesto la existencia de una diferencia entre lo que piensan y expresan los gobernantes y los sentimientos del ciudadano que analiza los actos oficiales.

Quedar bien con el presidente no concede ninguna distinción ante la ciudadanía, pero el intento de los gobernadores pudiera traducirse en tratos preferenciales en la distribución presupuestal de la federación para el 2022, lo que evidencia el grado de improvisación que desequilibra el desarrollo económico de los estados del país. No son las cuestiones técnicas ni las condiciones reales de los estados los que determinan el apoyo federal sino los lazos de amistad y confianza entre los políticos gobernantes.

La clase gobernante ignora lo que la gente piensa de ellos, pero permanece atenta a cualquier estornudo presidencial para asumir, sin mayor preocupación, las características de los programas federales tanto en materia económica como en la política electoral pues de ello depende su futuro personal mientras la situación de los estados pasa a ser una consecuencia de su buena o mala relación con el poder federal. En México, esa condición ya no debe continuar “para bien de todos”.

No importa si nuestros políticos son guindas, rojos, azules, verdes o naranjas. Lo que está en la mente de los ciudadanos son los resultados de la administración estatal correspondiente. Un buen resultado depende ahora de una relación fincada en el sometimiento al placer presidencial y, cuando el relevo de mandos federales ocurre, los gobernadores dejan de tener buenos resultados, consecuencia de su inesperada lejanía con el presidente en turno. Los ejemplos abundan a lo largo de nuestra historia y se destacan por sus consecuencias desastrosas.

Los adjetivos del poderoso presidente de la república colocados sobre “sus adversarios” pertenecen a una jerga que causa satisfacción si es favorable al calificado, pero es un castigo para quienes forman parte de los segmentos arbitrariamente creados en la mente del calificador, traduciéndose todo en la superación o en retraso para los estados o municipios de que se trate. El caprichoso andar de la administración pública federal ha generado una especie de mimetismo en algunos estados como el nuestro. La bipolaridad en la administración de San Luis se expresa en conductas que por momentos llegan a ser enfermizas.

Todavía no existen resultados que demuestren la eficacia de la administración del estado, pero ya tenemos elementos suficientes para crear el silogismo de nuestro porvenir. Las caras del gobierno estatal tratan de reflejar el rostro que tiene la administración federal en lugar de diseñar técnicamente los planes que aceleren el desarrollo de nuestro estado. Un comportamiento gubernamental fincado en la austeridad y el ahorro deja de ser impactante cuando no se sabe cual será el destino de lo ahorrado.

La conducta gubernamental, en todos los planos, exige explicaciones que, aunque forman parte de las obligaciones de los funcionarios, no son atendidas. En todo caso, son elementos para mostrarlos al presidente de la república como prueba de que en San Luis sus modos son un ejemplo que se practica en la realidad, aunque resultados no se incluyan en el anexo. Eso es más una apariencia que una resultante.

Cuando los gobernantes depongan sus criterios políticos mientras ejercen el poder y asuman como base de sus actos a la ciencia y la tecnología, en cualquiera de sus ramas, estaremos al principio de un futuro mejor.

DE MIRADAS Y OÍDAS INDISCRETAS

El comunicador Miguel Gallegos percibió que se le hizo bolas el engrudo cuando leyó las redes y escuchó los mensajes de algunos colegas molestos por lo que llamaron amenazas a la libre expresión y divulgación de informes relacionados con actividades delictivas. El vocero de seguridad pública del estado no se expresó bien cuando quiso decir que la divulgación de mensajes del crimen organizado podría ser considerado como delito, pero no expresó el criterio para hacerlo. Sin embargo, el tema no quedó ahí. ¿Cómo detectar si un periodista es receptor de esos mensajes y por qué vía?

Se adiciona enseguida la información de las dependencias policiales del estado para alertar a los usuarios de las redes sociales sobre el riesgo de ser “jaqueados” en sus cuentas personales. Las quejas, dijeron, son muchas y se suman a otra denuncia que hacen los legisladores locales que se han dado cuenta de que sus enlaces personales son objeto de modificaciones que aparentemente les son perjudiciales.

Y digo que ya se les hizo bolas el engrudo porque no hace mucho que los periodistas potosinos padecemos de un espionaje telefónico que poco o nada ganamos con denunciarlo si quien se encarga de recibir las quejas pudiera ser el autor del espionaje. Según las sospechas que han expresado varios de los colegas que han sido objeto de intervenciones telefónicas, en un edificio ubicado en la esquina de Carranza y Benigno Arriaga se encontraba un centro de escuchas telefónicas con un equipo que habían adquirido políticos para husmear la información que pudiera serles útil. La teoría perdió fuerza cuando se atribuyó a diferentes personas la labor de espiar y nunca se precisó la responsabilidad de alguien.

Del mismo modo existen varias versiones. Un secretario de finanzas que no es el actual, pedía que colocásemos los celulares junto a la bocina de un radio encendido y sintonizado en una estación de música mexicana, para eludir las grabaciones que luego circulaban por las redes. Otros colegas me han dicho que, si uno escucha ecos raros en un celular, es indicio de que estamos siendo grabados. No todas las llamadas que uno recibe tienen ese efecto, pero lo común es que al interlocutor se le advierta que “¡hay pájaros en los alambres!”.

Pero que ahora sean los centros de vigilancia policial los que adviertan a los usuarios sobre el “jaqueo” en redes sociales siento que la cosa es más seria. Lo que me queda por decir es que los “jaquers” son tan chingones que ni la policía puede localizarlos. Yo no creo que haya un aficionado a meterse en lo que no le importa haya invertido lo necesario para meterse en vidas ajenas nomás por satisfacer una curiosidad sin mayor valor. Si no estamos jugando a las escondidas con un loco, qué utilidad le puede uno encontrar al espionaje si no es valorado por un comprador en potencia.

Se necesita ser muy pendejo para no tomar las medidas para guardar en secreto las operaciones comerciales o el manejo de datos personales a través de la Internet. Ora, si de lo que se trata es de suplantar la personalidad para divulgar opiniones falsas o versiones increíbles, pues me parece una diversión estúpida corriendo bromas a cuenta de los demás. En todo caso, con una sonora mentada de madre tienen.

EL COTARRO POLÍTICO

El diputado Edmundo Torrescano Medina está en desacuerdo con que la administración federal presuma como un logro el tema de las remesas, cuando en realidad es una muestra del fracaso de una política económica para generar oportunidades para los mexicanos en su lugar de origen. “Sabemos todos que se van en busca de mejores oportunidades económicas en otro país, lo cual es una poderosa razón para que se modifiquen y reestructuren las políticas públicas en materia laboral y generar oportunidades que provoquen arraigo entre la gente, que les vaya bien en el lugar donde viven”… El que no sabe lo que dice es el insigne diputado José Luis Fernández Martínez al anunciar que con 350 millones de tepalcates se puede crear una “guardia civil” para ofrecernos seguridad y paz en San Luis. Instalaciones, armamento y equipo tienen que ser iguales o mejores a los de la delincuencia. O solo que los quieran armar con resorteras… Y con planes de austeridad ¡menos!... La siguiente joya literaria puede usted adjudicarla a una diputada huasteca que sabe cómo acomodarse en la fila: “Vamos a hacer lo que sea suficiente para que el Gobierno Federal mande los recursos suficientes a San Luis Potosí, haremos la planeación que tenemos para recorrer los hospitales como Soledad, Ciudad Valles, en la capital, para ver de cerca, aunque ya sabemos cuáles son las necesidades y poder acordar con la gente que trabaja día a día, como una enfermera, un doctor, una auxiliar”… Sea pues… Funciones de Lucha Libre, Teatro del Pueblo, peleas de gallos, corrida de toros, pabellón comercial, artesanal y gastronómico, así como juegos mecánicos, entre los atractivos de la mejor fiesta de invierno a partir de hoy, anuncia la alcaldesa de Villa de Reyes, Érika Briones Pérez, en lo que es la Feria Regional. Todo eso en la plaza principal… Y, para no ser menos, anuncia que hoy estarán en la función inaugural artistas de renombre… Por cierto, mucha gente podrá ir este fin de semana a la Plaza de Fundadores y a la Plaza de Armas, a disfrutar de un buen espectáculo navideño… El terrible Manolo ya se fue a tomar la foto… HASTA LA PRÓXIMA

pedrocervantesroque@yahoo.com.mx