/ domingo 28 de noviembre de 2021

El poder del lenguaje

Amárrate las agujetas que te vas a dar un ranazo, equivale en México a: amárrate las agujetas porque te vas a caer, de ahí que, si hablamos frente a un extranjero, probablemente se quede con cara de what, muchos hablan directo expresando rudeza, creando confusiones y discusiones.

Si quien lo emite es una autoridad, las emociones se exaltan ya que el lenguaje se acompaña de palabras y expresiones que causan sentimientos y emociones, mandando señales reales o equivocadas, las palabras crean efectos y afectos o efectos y confusión, crean placer o incomodidad.

Hay quienes tienen miedo a usar palabras afectivas y conciliatorias en su diario expresar al considerarlas una cháchara, tal vez, porque como desde hace algunos años ya nos cayó el chahuistle pasamos días enteros tirando hueva de pescado para no pensar lo que se viene, o tal vez, porque como al Benemérito, el viento nos hace lo que a Juárez, expresión muy usada que se dice se acuñó, cuando Benito Juárez siendo un niño, se salvó de morir al ir en una canoa que no se volteó al soplar un súper ventarrón, o tal vez más bien provenga del famoso mural donde Juárez aparece muy peinado mientras la bandera se mueve por otro ventarrón, el chiste, que no es chiste, es que sepa la bola, como sucedía en la desordenada revolución mexicana donde quienes causaban actos de pillaje, huían sin mayor averiguación y, al preguntar quién lo hizo, alguien contestaba sepa la bola y asunto arreglado para seguir dándole vuelo a la hilacha y aunque el que es buen juez por su casa empieza, pareciera que en mi país la única barrida que se hace es con ramas de pirul y la casa se barre en desorden y no de arriba abajo para ver si la violencia baja, pues no es nada chido lo que se vive, por más manifestaciones que se hagan, tal vez por eso, no aparecen las mariposas amarillas de García Márquez, ni el juego es similar al tejo de Colombia, donde se lanzan discos metálicos contra láminas de pólvora y sólo si le pegas se hace la explosión, aquí, como en los tiempos de Escobar en Colombia, los muertos si cuelgan los tenis, chupan faros y hasta se les enrolla en el petate, mientras otros se hacen como que la virgen les habla, porque sepa lo bola donde quedaron, aún sabiendo, que es bonito rasguñar, pero feo clavar las uñas, tal vez, como dice el refrán, a mayor resistencia mayor dureza y a boca de jarro, sólo la china y el charro.

Como las penas con pan son menos, a buen tragón, buen taco antes que se arme la gorda y arda el hacha, no vaya a ser que nos carguen los muertos o el San Benito, como si hubiésemos comido en el mismo plato.

Aunque nos cacarean mucho el huevo y en verdad se crea que vamos mejor, necesitamos entrar en este próximo año con el pie derecho, a ver si las cosas mejoran y los insumos básicos bajan, pues comer de gorra no es fácil y a veces estamos en la cuarta pregunta, ahora ya, para nada nos alcanza y hay quien en actitud porfía y erre que erre se encuentra, y, para los mortales de a pie pareciera que solo escuchamos las cuentas del gran capitán sin importar un bledo si no se deja títere con cabeza, con riesgo a quedarnos como el gallo de Morón, sin plumas y cacareando, mientras la gente se pregunta que más hay, hay rémoras que por bolonios siguen creando chivos expiatorios omitiendo palabras de amor proliferando la crítica, por eso hoy, deseo que proliferen en ti y en mí, palabras cariñosas que aporten identidad de hermanos que puedan cambiar el día y la vida de cada mexicano, mientras tú encuentras con cuáles expresarte, yo deseo que pases una maravillosa semana esperando tus comentarios en:

correo:

angeldesofia@yahoo.com.mx

Gracias

correo:

angeldesofia@yahoo.com.mx

Gracias

Amárrate las agujetas que te vas a dar un ranazo, equivale en México a: amárrate las agujetas porque te vas a caer, de ahí que, si hablamos frente a un extranjero, probablemente se quede con cara de what, muchos hablan directo expresando rudeza, creando confusiones y discusiones.

Si quien lo emite es una autoridad, las emociones se exaltan ya que el lenguaje se acompaña de palabras y expresiones que causan sentimientos y emociones, mandando señales reales o equivocadas, las palabras crean efectos y afectos o efectos y confusión, crean placer o incomodidad.

Hay quienes tienen miedo a usar palabras afectivas y conciliatorias en su diario expresar al considerarlas una cháchara, tal vez, porque como desde hace algunos años ya nos cayó el chahuistle pasamos días enteros tirando hueva de pescado para no pensar lo que se viene, o tal vez, porque como al Benemérito, el viento nos hace lo que a Juárez, expresión muy usada que se dice se acuñó, cuando Benito Juárez siendo un niño, se salvó de morir al ir en una canoa que no se volteó al soplar un súper ventarrón, o tal vez más bien provenga del famoso mural donde Juárez aparece muy peinado mientras la bandera se mueve por otro ventarrón, el chiste, que no es chiste, es que sepa la bola, como sucedía en la desordenada revolución mexicana donde quienes causaban actos de pillaje, huían sin mayor averiguación y, al preguntar quién lo hizo, alguien contestaba sepa la bola y asunto arreglado para seguir dándole vuelo a la hilacha y aunque el que es buen juez por su casa empieza, pareciera que en mi país la única barrida que se hace es con ramas de pirul y la casa se barre en desorden y no de arriba abajo para ver si la violencia baja, pues no es nada chido lo que se vive, por más manifestaciones que se hagan, tal vez por eso, no aparecen las mariposas amarillas de García Márquez, ni el juego es similar al tejo de Colombia, donde se lanzan discos metálicos contra láminas de pólvora y sólo si le pegas se hace la explosión, aquí, como en los tiempos de Escobar en Colombia, los muertos si cuelgan los tenis, chupan faros y hasta se les enrolla en el petate, mientras otros se hacen como que la virgen les habla, porque sepa lo bola donde quedaron, aún sabiendo, que es bonito rasguñar, pero feo clavar las uñas, tal vez, como dice el refrán, a mayor resistencia mayor dureza y a boca de jarro, sólo la china y el charro.

Como las penas con pan son menos, a buen tragón, buen taco antes que se arme la gorda y arda el hacha, no vaya a ser que nos carguen los muertos o el San Benito, como si hubiésemos comido en el mismo plato.

Aunque nos cacarean mucho el huevo y en verdad se crea que vamos mejor, necesitamos entrar en este próximo año con el pie derecho, a ver si las cosas mejoran y los insumos básicos bajan, pues comer de gorra no es fácil y a veces estamos en la cuarta pregunta, ahora ya, para nada nos alcanza y hay quien en actitud porfía y erre que erre se encuentra, y, para los mortales de a pie pareciera que solo escuchamos las cuentas del gran capitán sin importar un bledo si no se deja títere con cabeza, con riesgo a quedarnos como el gallo de Morón, sin plumas y cacareando, mientras la gente se pregunta que más hay, hay rémoras que por bolonios siguen creando chivos expiatorios omitiendo palabras de amor proliferando la crítica, por eso hoy, deseo que proliferen en ti y en mí, palabras cariñosas que aporten identidad de hermanos que puedan cambiar el día y la vida de cada mexicano, mientras tú encuentras con cuáles expresarte, yo deseo que pases una maravillosa semana esperando tus comentarios en:

correo:

angeldesofia@yahoo.com.mx

Gracias

correo:

angeldesofia@yahoo.com.mx

Gracias