Ante los duros cuestionamientos que le han hecho por su evidente estrategia para apoderarse del partido Movimiento de Regeneración Nacional en San Luis Potosí y de ahí relanzar su proyecto político para la gubernatura del estado en 2021, el ex gobernador Horacio Sánchez Unzueta se quiso hacer el cómico respondiendo con simpleza que no es marinero, pues lo señalaron de “encabezar el desembarco priista en MORENA”.
Y mas evidente y ventajoso no puede ser. Usa al notario borrachín para introducirse en los círculos morenistas, al sobrino traicionero para hacer los grandes negocios como urbanista, a su sucesor en la gubernatura y prueba fehaciente de su plan transexenal, para apoderarse del PRI a través de sus ex colaboradores y a los medios de comunicación afines para atacar a sus enemigos o críticos.
Si alguien se ha empeñado en hundir el barco priísta, es él, después de todo el PRI solamente le sirvió para usar sus siglas y lograr poder, pero ya no. Su corazoncito, en toda la extensión de la palabra, ha sido siempre navista, pues fue ese movimiento quien lo llevó a la gubernatura del estado. La “lucha” de su suegro, sirvió al final de cuentas para que le entregaran la candidatura y luego la gubernatura.
La mayor parte de los integrantes de ese “movimiento social” al que se le sigue atribuyendo el retraso de décadas de San Luis Potosí, terminaron sirviendo a lo que criticaban: al gobierno. Hijos, nietos, ideólogos, activistas, voceros y allegados al Dr Nava, no resistieron la tentación de la nómina oficial, incluyendo al impoluto y prístino notario “number one” que, como diputado, pasó de noche.
La imposición que hizo Sánchez Unzueta del candidato a la presidencia municipal de Xilitla fue un fracaso, lo mismo intentó en el otro pueblo mágico que es Real de Catorce. Se le atribuyen las estrepitosas derrotas en otros municipios importantes del estado, la operación contra candidatos a diputados locales y federales que no prosperaron y demás acciones encaminadas a generar un desastre en el tricolor.
El único lugar donde todo le salió a pedir de boca fue en la capital. Ahora, tendrá vía libre para que la empresa a la que representa legalmente, obtenga los permisos definitivos para urbanizar sus contaminadas tierras al norte de la ciudad.
Por lo pronto, Sánchez Unzueta como auténtico pirata busca abordar el barco de AMLO y desde ahí seguir operando todos sus proyectos junto con su amplio equipo, sólo que ahora ya fue detectado y seguramente, el jefe político de ese movimiento le pondrá un alto. O al menos eso esperan los auténticos morenistas.
Por cierto. Esta semana llamó poderosamente la atención la ansiedad del alcalde electo Xavier Nava por ganar reflectores y mandó a una bola de personajes sumamente cuestionados, para iniciar el proceso de entrega-recepción, cuando la ley establece que ese protocolo debe arrancar 45 días antes de su toma de posesión, es decir, el 15 de agosto.
Fueron unos 60 acomedidos con aires de colonizadores y cada uno con su propio proyecto, quienes más que revisar papeles, fueron a elegir oficina. No obstante su ansiedad, se les trató con respeto y educación.
No se puede olvidar que existen dos impugnaciones a regidores, y una vez que se defina la planilla, tendrán acceso a todo, aunque por su mente ha de pasar que el ayuntamiento está quemando documentos, escondiendo otros bajo la alfombra y otros ni siquiera saben qué buscan ni dónde. Deberían ser más serenos y menos impetuosos, muchos de ellos ya no tienen edad para andar haciendo berrinches y ya le han hecho mucho daño a San Luis.
Twitter @lozano_ray
