Jesús crecía Lucas 2:52
La Biblia no dice mucho en los evangelios acerca de la niñez del Señor Jesucristo; y uno de esos versículos, es el que encontramos en Lucas 2:52, que dice: “Y Jesús crecía en sabiduría y estatura, y en gracia para con Dios y los hombres.” Aquí encontramos cuatro áreas muy específicas en las cuales Jesús siendo niño estaba creciendo. En forma inmediata esto puede aplicarse a los niños y jóvenes; pero estoy seguro que esto también tiene aplicación para los adultos.
En primer lugar, dice que Jesús crecía en sabiduría, esta palabra significa, amplitud de conocimiento, y profundidad de entendimiento, que son los que aportan la sensatez y claridad de juicio a la hora de actuar. Al ver esta definición, creo que habla del desarrollo o crecimiento intelectual y del conocimiento, bien se puede aplicar a lo académico, por ejemplo, en el libro de 1 Reyes 4:32 y 33, se nos dice de Salomón: “Y compuso tres mil proverbios, y sus cantares fueron mil cinco. También disertó sobre los árboles, desde el cedro del Libano hasta el hisopo que nace de la pared. Asimismo disertó sobre los animales, sobre las aves, sobre los reptiles y sobre los peces.” Aquí se nos dice de un hombre preparado en la literatura, en música, en botánica, en zoología; lo cierto es que la voluntad de Dios es que nunca dejemos de aprender; con el paso de los años entramos en un conformismo, nos hacemos más desidiosos para aprender algo nuevo, pero es algo con lo que debemos luchar y no estancarnos, pues la voluntad de Dios es que crezcamos en sabiduría.
Otra área en la que el Señor Jesucristo estaba creciendo, era en estatura, es decir, físicamente. Ahora, este crecimiento es algo normal y evidente en los niños y jóvenes, pero cuando llegamos a la edad adulta, esto deja de suceder; sin embargo, la aplicación pudiera ser el cuidado de nuestro cuerpo, es nuestro bienestar físico; y esto bien aplica en todas las etapas de nuestra vida. En Daniel 1:12b, dice: “…Y nos den legumbres a comer, y agua de beber.” Esto lo pidió Daniel después que él propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía, es decir, él entendía la necesidad de cuidar lo que comía y lo que bebía. Y claro que es muy importante cuidar nuestra dieta, es decir, cuidar lo que comemos y bebemos; es un área que no debemos descuidar. También hacer ejercicio, cuidar el sueño es fundamental para cuidar nuestro cuerpo.
La otra área en la que Jesús crecía, era en gracia para con Dios, es decir, en su vida espiritual, que primordialmente se basa en nuestra relación con Jesús. Él nos habla por medio de su Palabra que es la Biblia, y nosotros le hablamos por medio de la oración, eso es algo que cada día de nuestra vida debemos hacer.
Finalmente, y no menos importante, es que crecía en gracia para con los hombres. Es decir, en el área social, la relación que tenemos con los demás, es algo en lo que debemos crecer; en mi caso es en mi relación con mi esposa, con mis hijas, con mis familiares, con compañeros en el trabajo, con los hermanos de nuestra iglesia, con gente que no conoce a Cristo para poderles hablar del evangelio. Que el Señor nos de la gracia de crecer en estas áreas siguiendo el ejemplo de nuestro Señor Jesucristo.
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