/ jueves 13 de septiembre de 2018

¡Cristo es la Respuesta!

El Arrepentimiento

Apocalipsis 9:20,21

Víctor Hugo Guel González

En Apocalipsis 9:20 y 21, dice: “Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar. Y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos.” Quiero comenzar por decir, que aunque Dios es paciente y misericordioso; llega el tiempo donde él trata con nuestro pecado, es decir, llega el tiempo donde vienen consecuencias y viene el castigo en nuestras vidas. Con el deseo del Señor que nos arrepintamos de nuestro pecado. Lamentablemente en este pasaje, nos dice que aunque vinieron plagas, los hombres no se arrepintieron; y llama mi atención, que cuando describe el pecado y la maldad, es un vivo retrato de lo que actualmente está pasando, pues nos habla de adoración a demonios, idolatría en todas sus formas, homicidios, hechicerías y fornicación. Ya que la Palabra de Dios sigue vigente en nuestros tiempos, de ninguna manera la Biblia es anticuada y pasada de moda, al contrario, aplica perfectamente a lo que el día de hoy está pasando.


Primeramente, la palabra arrepentimiento, significa: Cambio de mente, o cambio en nuestra manera de pensar, lo cual debe llevarnos a cambiar lo que hacemos, de no ser así, la razón es sencilla, no ha habido arrepentimiento, por eso la gente sigue practicando su pecado. Por ejemplo, para que una persona decida recibir a Cristo como su único y suficiente salvador, debe haber arrepentimiento. Yo he encontrado gente diciéndome: Es que yo no voy a dejar la religión que me inculcaron mis padres. Pues mientras no cambie su manera de pensar respecto a ello, es muy probable que no acepte la salvación por fe en Jesús, Por cierto, es importante aclarar que de lo que se trata el arrepentimiento, es dejar de pensar a mi manera, como yo quiero, y empezar a pensar y ver las cosas como Dios quiere, como Él nos muestra en su bendita Palabra. Hay personas que actúan de acuerdo a su conveniencia, a estas personas, lo que les hace falta, es arrepentimiento, dejar sus ideas, saber lo que la Biblia enseña y comenzar a hacerlo.


También recuerdo que hace tiempo, el Pastor Luis Ramos decía acerca de un hindú al cual le habló del evangelio, y él contestó: Creo también tengo lugar para Cristo, y después abrió la puerta de su casa mostrando un lugar lleno de ídolos e imágenes, a lo cual el pastor comentó: Si realmente vas a aceptar a Cristo, debes arrepentirte y desacerté de todo eso, porque el Señor no comparte su gloria con nadie, y Él desea alabanza y adoración solo para Él. Finalmente el hombre decidió seguir su idolatría antes de aceptar a Jesús, es decir, no hubo arrepentimiento.


En la vida de un cristiano, sin duda el arrepentirnos, debe ser parte de nosotros, pues la meta es ser más y más como Jesús; y Dios nos libre y guarde que venga castigo y usted y yo sigamos en las mismas, como esa gente de la cual nos habla Apocalipsis. Oh, que Dios nos permita vivir de tal manera que haya verdadero arrepentimiento en nuestras vida.


Iglesia Bíblica Bautista

Calle Nube 560, Colonia Garita de Jalisco. Tel. 841-5387 www.ibbslp.org.mx

Horario. Domingo 10:00 A.M.y 12:00 P.M. 6:00PM; Miércoles 7:00 P.M.


El Arrepentimiento

Apocalipsis 9:20,21

Víctor Hugo Guel González

En Apocalipsis 9:20 y 21, dice: “Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar. Y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos.” Quiero comenzar por decir, que aunque Dios es paciente y misericordioso; llega el tiempo donde él trata con nuestro pecado, es decir, llega el tiempo donde vienen consecuencias y viene el castigo en nuestras vidas. Con el deseo del Señor que nos arrepintamos de nuestro pecado. Lamentablemente en este pasaje, nos dice que aunque vinieron plagas, los hombres no se arrepintieron; y llama mi atención, que cuando describe el pecado y la maldad, es un vivo retrato de lo que actualmente está pasando, pues nos habla de adoración a demonios, idolatría en todas sus formas, homicidios, hechicerías y fornicación. Ya que la Palabra de Dios sigue vigente en nuestros tiempos, de ninguna manera la Biblia es anticuada y pasada de moda, al contrario, aplica perfectamente a lo que el día de hoy está pasando.


Primeramente, la palabra arrepentimiento, significa: Cambio de mente, o cambio en nuestra manera de pensar, lo cual debe llevarnos a cambiar lo que hacemos, de no ser así, la razón es sencilla, no ha habido arrepentimiento, por eso la gente sigue practicando su pecado. Por ejemplo, para que una persona decida recibir a Cristo como su único y suficiente salvador, debe haber arrepentimiento. Yo he encontrado gente diciéndome: Es que yo no voy a dejar la religión que me inculcaron mis padres. Pues mientras no cambie su manera de pensar respecto a ello, es muy probable que no acepte la salvación por fe en Jesús, Por cierto, es importante aclarar que de lo que se trata el arrepentimiento, es dejar de pensar a mi manera, como yo quiero, y empezar a pensar y ver las cosas como Dios quiere, como Él nos muestra en su bendita Palabra. Hay personas que actúan de acuerdo a su conveniencia, a estas personas, lo que les hace falta, es arrepentimiento, dejar sus ideas, saber lo que la Biblia enseña y comenzar a hacerlo.


También recuerdo que hace tiempo, el Pastor Luis Ramos decía acerca de un hindú al cual le habló del evangelio, y él contestó: Creo también tengo lugar para Cristo, y después abrió la puerta de su casa mostrando un lugar lleno de ídolos e imágenes, a lo cual el pastor comentó: Si realmente vas a aceptar a Cristo, debes arrepentirte y desacerté de todo eso, porque el Señor no comparte su gloria con nadie, y Él desea alabanza y adoración solo para Él. Finalmente el hombre decidió seguir su idolatría antes de aceptar a Jesús, es decir, no hubo arrepentimiento.


En la vida de un cristiano, sin duda el arrepentirnos, debe ser parte de nosotros, pues la meta es ser más y más como Jesús; y Dios nos libre y guarde que venga castigo y usted y yo sigamos en las mismas, como esa gente de la cual nos habla Apocalipsis. Oh, que Dios nos permita vivir de tal manera que haya verdadero arrepentimiento en nuestras vida.


Iglesia Bíblica Bautista

Calle Nube 560, Colonia Garita de Jalisco. Tel. 841-5387 www.ibbslp.org.mx

Horario. Domingo 10:00 A.M.y 12:00 P.M. 6:00PM; Miércoles 7:00 P.M.