¡Vida abundante!
DIOS CRISTO JESÚS, en Juan 10:10 de la Biblia así como invitó a los fariseos hace unos 2,000 años, nos invita a todos nosotros aquí ahora, como sigue: “Yo he venido para que tengan Vida, y para que la tengan en Abundancia”.
En efecto, cuando apenas hace unos pocos días hemos celebrado el nacimiento de Cristo, porque su Palabra Divina permanece para siempre, según 1 Pedro 1:25, Cristo nos sigue predicando acerca de su Salvación y Vida Eterna, porque para El, lo más importante es que podamos Vivir Abundantemente por medio de El, porque para nosotros “El es el Buen Pastor que su Vida da por sus Ovejas”, y, también “El es nuestro Camino, Verdad y Vida, para llegar a Dios el Padre Celestial”, según Juan 14:6.
Por lo tanto, Dios Cristo Jesús nos llama con todo su Amor en el tiempo aceptable, en el Día de Salvación, según 2 Corintios 6:2, y con su sacrificio del Calvario, según Juan 3:16, quiere rescatarnos de las garras del pecado, para pasarnos de las tinieblas de maldad, a su Luz Divina, según Juan 12:46.
Por ende, si bien, todos hemos pecado en forma voluntaria en contra de Dios, a partir de nuestra juventud, según Génesis 8:21 y Jeremías 3:25, porque en esta vida terrenal no hay justo ni aún uno, según Romanos 3:10 y 23, y sin embargo, si nos acercamos a Jesús para creer que El nos Salva del infierno con sólo arrepentirnos ante El de nuestros pecados, y lo aceptamos como Salvador Personal, entonces Cristo nos perdona y nos hace sus justos mediante su sacrificio de redención en la cruz del Calvario, porque con su Sangre Preciosa derramada lava todas nuestras maldades gratuitamente por su Gracia que es Amor Divino Perfecto, y vence la eternidad de condenación que como pecadores nos correspondía, según Romanos 3:24-25.
Entonces, seamos llenos del Conocimiento Divino para tener toda Sabiduría e Inteligencia Espiritual que nos obsequia Dios, según Colosenses 1:9-10
Estimado Lector: Dios Cristo, te regalará su Vida Abundante Suprema, si con toda reflexión, decisión y valentía le dices:
“Mi Señor Dios Cristo, ¡SALVAME!, me arrepiento ante Ti de mis pecados, perdóname y límpiame con tu Sangre Divina derramada en la cruz del Calvario, creo en Ti y te recibo como Unico, Suficiente y Perfecto Salvador Personal”.
Dios los bendiga ricamente, y si El permite continuaremos el viernes siguiente.
Teléfono 44-48-15-39-73.