/ domingo 11 de noviembre de 2018

Artículo Dominical

¿Es posible encontrar a Dios, en el pecador?

Aunque le fallemos al Señor, Él sigue siendo fiel

Siempre vamos a contar con Dios, a pesar de nuestras fallas

Dios está en nosotros; pero el pecado no nos deja verlo

Por P. Chava

Alguna vez nos hemos preguntado: ¿Dónde está Dios? Sobre todo, en los momentos que sentimos el dolor de su ausencia, porque hay momentos en que las situaciones adversas nos llevan a preguntar por Dios.

Pensar en que hay un ser, que es causa de todo lo que existe, nos hace creer equivocadamente, que ese ser es también causa de nuestras desdichas. Y si nos dijeron que Dios está en todas partes, ¿porqué hay momentos, en que sentimos, que él no está cuando más falta nos hace?

Pensar en la ausencia de Dios, es una condicionante humana, porque Dios sí está en todo lugar; pero cuando le damos la espalda, es imposible advertir su presencia.

Dios nunca se aparta de nosotros; y se encuentra presente hasta donde abunda la miseria. Y aunque le fallemos al Señor, Él sigue siendo fiel.

Siempre vamos a contar con Dios, a pesar de nuestras fallas; porque si Él no estuviera donde hay carencias, entonces, no sería tan perfecto, ni sería Dios. Él, no se contamina con nuestras miserias.

Pero, ¿cómo encontrar a la abundancia, donde solo vemos la escasez? Eso, parece una contradicción, pero no es así. Porque donde hay miseria, hay ceguera espiritual. Y ésta, es la que no nos deja sentir a Dios; pero él, no deja de estar con nosotros.

Dios está en nosotros; pero el pecado no nos deja verlo.

Aunque también, hay que preguntarnos, ¿es posible encontrar a Dios, en el pecador? Hay que responder que sí, sí es posible. Pues ahí, con el miserable también está Dios. Porque Él no cambia, y nunca deja de amarnos.

El hombre cambia con frecuencia, debido a su imperfección; pero Dios, que es tan perfecto como estable, no deja de estar con nosotros, sin importar nuestra condición de pecadores.


¿Es posible encontrar a Dios, en el pecador?

Aunque le fallemos al Señor, Él sigue siendo fiel

Siempre vamos a contar con Dios, a pesar de nuestras fallas

Dios está en nosotros; pero el pecado no nos deja verlo

Por P. Chava

Alguna vez nos hemos preguntado: ¿Dónde está Dios? Sobre todo, en los momentos que sentimos el dolor de su ausencia, porque hay momentos en que las situaciones adversas nos llevan a preguntar por Dios.

Pensar en que hay un ser, que es causa de todo lo que existe, nos hace creer equivocadamente, que ese ser es también causa de nuestras desdichas. Y si nos dijeron que Dios está en todas partes, ¿porqué hay momentos, en que sentimos, que él no está cuando más falta nos hace?

Pensar en la ausencia de Dios, es una condicionante humana, porque Dios sí está en todo lugar; pero cuando le damos la espalda, es imposible advertir su presencia.

Dios nunca se aparta de nosotros; y se encuentra presente hasta donde abunda la miseria. Y aunque le fallemos al Señor, Él sigue siendo fiel.

Siempre vamos a contar con Dios, a pesar de nuestras fallas; porque si Él no estuviera donde hay carencias, entonces, no sería tan perfecto, ni sería Dios. Él, no se contamina con nuestras miserias.

Pero, ¿cómo encontrar a la abundancia, donde solo vemos la escasez? Eso, parece una contradicción, pero no es así. Porque donde hay miseria, hay ceguera espiritual. Y ésta, es la que no nos deja sentir a Dios; pero él, no deja de estar con nosotros.

Dios está en nosotros; pero el pecado no nos deja verlo.

Aunque también, hay que preguntarnos, ¿es posible encontrar a Dios, en el pecador? Hay que responder que sí, sí es posible. Pues ahí, con el miserable también está Dios. Porque Él no cambia, y nunca deja de amarnos.

El hombre cambia con frecuencia, debido a su imperfección; pero Dios, que es tan perfecto como estable, no deja de estar con nosotros, sin importar nuestra condición de pecadores.