/ domingo 14 de noviembre de 2021

Ahorita, ahorititita

Intento caminar de puntitas pues cuando deliro, sueño con un ahora, ahorita o ahoritita, ¡si¡, esas palabras que resuenan en mis oídos cada vez que pido a alguien hacer algo y me responden con un ahorita, que nunca sé si llegará, o me eternizo esperando, o, hasta pueda ser que muera en el intento y me haga vieja esperando el ahorita; asi, trato de ir por la vida haciéndome mejor ¨vividora¨ entre los ahoritas, mañanas y tal vez aunados al sí, o no, que los mexicanos expresamos, por eso, no opto ni por los sí, ni por los no, ni por los mañanas o los nuncas, trato de ir y venir del si al no y del ahorita al mañana queriendo hacerme a la idea de vivir mejor, para vivir más, en un país que ni Kafka entendería.

Deseo ser un mejor vividor en la medida en que la luz ilumine mi vida y las nuevas reglas aplicadas a las expresiones en español puedan cambiar mas no cambiarnos, porque entre los ahorititas encontramos que ya usan presidenta y presidente, generala y general y probablemente joven y jovena, a pesar que creo que las mentes que se abren a las ideas de renovación jamás volverán a tener su tamaño original, por el contrario, crecerán y se desarrollarán, siempre habrá un a según que permita aplicar lo que Einstein dijo: en tiempos de crisis solo la imaginación es más importante que el conocimiento, sin embargo, como actualmente a los jóvenes les damos todo, inútil resulta hablarles de obligaciones y esfuerzo para lograr el éxito, pues pareciera que en este momento de vida de los mexicanos, éste no existe y la razón mas importante para subsistir es extender la mano y recibir sin esforzarse, por lo que el ahorita alcanzará al mañana entre los si, los no y los nunca del nunca jamás.

Trabajar es un placer que en este momento poco se valora como resultado del placer de ser, del conocimiento y valor que dé resultados reales para la comunidad, sobre todo, si cuando tenemos un cargo público los hechos nos obligan a definirnos, y, a pesar que son los que cuentan, siempre podran usar la excusa del ahorita y el mañana lo definiré, ya que el país puede ser un museo, un castillo, la violencia, la tristeza, la calzada de Guadalupe o un remanso para amar aunque no acaben de definirse nuestras autoridades, o tal vez ¿no será que los que no entendemos la definición somos nosotros?

Tal vez necesitemos para despertar, el paseo de todos y una banca que nos permita armonía, amistad y amor, amar es un antidepresivo y produce adicción y aunque he viajado, mucho me falta por conocer, pero todos los pueblos que aman carecen de violencia brutal, como todos los seres que aprendemos a amar dejamos la violencia de un lado, en el mundo hay ciudades y ciudades, pero tal vez es en mi México donde caben todos los colores, formas, olores y sabores en abundancia, tantos y tan libres como se pueda ser, por eso es importante que esta libertad que nos caracteriza, permanezca, ya que nada es como nuestro juicio dicta, ni como nuestra imaginación desea, es la realidad, esa que en ocasiones lacera y duele, esa que en ocasiones ríe y alegra, esa que en este momento confunde y angustia, sabiendo que ser mexicano es un acto de esperanza, caminando en una profesión de fe que nos lleva al estoicismo entre unas cuantas alegrías que nos conducen a un grito que se ahoga por no saber expresarlo, ser mexicano es irrenunciable, se lleva en la sangre, en el carácter, en el ser, por eso, los hechos que obligan a definirse son los que cuentan, porque hechos son amores y no buenas razones y mientras usted busca la razón de sus sin razones, yo medito en hechos y amores deseándoles excelente semana y esperando sus comentarios en angeldesofia@yahoo.com.mx Gracias

Intento caminar de puntitas pues cuando deliro, sueño con un ahora, ahorita o ahoritita, ¡si¡, esas palabras que resuenan en mis oídos cada vez que pido a alguien hacer algo y me responden con un ahorita, que nunca sé si llegará, o me eternizo esperando, o, hasta pueda ser que muera en el intento y me haga vieja esperando el ahorita; asi, trato de ir por la vida haciéndome mejor ¨vividora¨ entre los ahoritas, mañanas y tal vez aunados al sí, o no, que los mexicanos expresamos, por eso, no opto ni por los sí, ni por los no, ni por los mañanas o los nuncas, trato de ir y venir del si al no y del ahorita al mañana queriendo hacerme a la idea de vivir mejor, para vivir más, en un país que ni Kafka entendería.

Deseo ser un mejor vividor en la medida en que la luz ilumine mi vida y las nuevas reglas aplicadas a las expresiones en español puedan cambiar mas no cambiarnos, porque entre los ahorititas encontramos que ya usan presidenta y presidente, generala y general y probablemente joven y jovena, a pesar que creo que las mentes que se abren a las ideas de renovación jamás volverán a tener su tamaño original, por el contrario, crecerán y se desarrollarán, siempre habrá un a según que permita aplicar lo que Einstein dijo: en tiempos de crisis solo la imaginación es más importante que el conocimiento, sin embargo, como actualmente a los jóvenes les damos todo, inútil resulta hablarles de obligaciones y esfuerzo para lograr el éxito, pues pareciera que en este momento de vida de los mexicanos, éste no existe y la razón mas importante para subsistir es extender la mano y recibir sin esforzarse, por lo que el ahorita alcanzará al mañana entre los si, los no y los nunca del nunca jamás.

Trabajar es un placer que en este momento poco se valora como resultado del placer de ser, del conocimiento y valor que dé resultados reales para la comunidad, sobre todo, si cuando tenemos un cargo público los hechos nos obligan a definirnos, y, a pesar que son los que cuentan, siempre podran usar la excusa del ahorita y el mañana lo definiré, ya que el país puede ser un museo, un castillo, la violencia, la tristeza, la calzada de Guadalupe o un remanso para amar aunque no acaben de definirse nuestras autoridades, o tal vez ¿no será que los que no entendemos la definición somos nosotros?

Tal vez necesitemos para despertar, el paseo de todos y una banca que nos permita armonía, amistad y amor, amar es un antidepresivo y produce adicción y aunque he viajado, mucho me falta por conocer, pero todos los pueblos que aman carecen de violencia brutal, como todos los seres que aprendemos a amar dejamos la violencia de un lado, en el mundo hay ciudades y ciudades, pero tal vez es en mi México donde caben todos los colores, formas, olores y sabores en abundancia, tantos y tan libres como se pueda ser, por eso es importante que esta libertad que nos caracteriza, permanezca, ya que nada es como nuestro juicio dicta, ni como nuestra imaginación desea, es la realidad, esa que en ocasiones lacera y duele, esa que en ocasiones ríe y alegra, esa que en este momento confunde y angustia, sabiendo que ser mexicano es un acto de esperanza, caminando en una profesión de fe que nos lleva al estoicismo entre unas cuantas alegrías que nos conducen a un grito que se ahoga por no saber expresarlo, ser mexicano es irrenunciable, se lleva en la sangre, en el carácter, en el ser, por eso, los hechos que obligan a definirse son los que cuentan, porque hechos son amores y no buenas razones y mientras usted busca la razón de sus sin razones, yo medito en hechos y amores deseándoles excelente semana y esperando sus comentarios en angeldesofia@yahoo.com.mx Gracias