APRESURADA.- Apresurada fue la respuesta de los voceros del responsable de mantener la seguridad en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, José Luis Urban Ocampo, para desmentir su supuesta renuncia.
¿BUENAS CUENTAS?- Urban Ocampo alega que desde que llegó al cargo “ha entregado buenas cuentas con detenciones relevantes, recuperación de vehículos robados y por supuesto una baja considerable en el índice delictivo así como de las faltas administrativas en las colonias”.
CUANDO EL RÍO SUENA.- Lamentablemente, la inseguridad prevalece en ese municipio, a pesar que se asegure que se mantienen activos planes operativos. Los soledenses no ven a la Policía por ningún lado cuando la necesitan.
EN EL MORRO II.- Ahí están, por ejemplo, los vecinos de la colonia El Morro II, donde un grupo de pandilleros los tiene asolados y cuyos llamados de auxilio inexplicablemente, no son atendidos. De acuerdo a varios vecinos, los malvivientes suelen generar escándalos prácticamente toda la madrugada, aunque lo que más preocupa a los afectados son los frecuentes atracos que muchos de ellos han sufrido.
PINEDA, EN LA MIRA.- Y ya entrados en el tema de los jefes policiacos que se van y no se van, siguen los reflectores puestos sobre el Secretario de Seguridad Pública del estado, Jaime Pineda. Ahora es el diputado Rubén Guajardo Barrera, quien pide se investiguen los señalamientos del ex director de Seguridad Pública, Raúl Alanis, que en su carta de renuncia manifestó irregularidades al interior de la institución y ocultamiento de información.
NO FUNCIONA.- El citado legislador coincide en que la estrategia de seguridad pública en el estado no ha funcionado adecuadamente.
MALA COMIDA.- Ya comenzaron las quejas de los agentes de la Policía estatal asignados a la vigilancia en la Feria Nacional Potosina, por los alimentos que se les proporcionan, que aseguran casi están echados a perder. Sin embargo, no es la primera vez que ocurre algo así, pues año con año se han quejado de lo mismo.
